10 de julio de 2012

PARA LA OCDE PARTE DEL PARO EN ESPAÑA PODRÍA CONVERTIRSE EN PERMANENTE

NOTA DEL EDITOR DE ESTE BLOG:
La “dualidad” de la que habla el informe de la OCDE podría ser el argumento-trampa para abaratar aún más el despido, precarizar los empleos indefinidos y nivelar a la baja –en la línea de los contratos temporales ofrecidos a los jóvenes- lo que sería una poderosa herramienta de confrontación generacional entre trabajadores mayores y jóvenes, defendiendo los primeros sus conquistas sociales en riesgo más que vidente y culpabilizando los segundos a aquellos por ser un factor de freno a su entrada en el mercado laboral.

Dividir la necesaria unidad de la clase trabajadora por la vía del conflicto intergeneracional podría ser el objetivo no confesado de este informe de la OCDE, según podría intuirse tras el siguiente párrafo: "Estrictas medidas de protección laboral para trabajadores con contratos indefinidos y el predominio de contratos temporales para las nuevas generaciones estarían directamente asociadas tanto con el débil rendimiento del mercado laboral a largo plazo como con su baja capacidad de recuperación"

LA OCDE SUGIERE QUE EL ALZA CÍCLICA DEL PARO EN ESPAÑA PODRÍA SER PERMANENTE
CINCO DÍAS.
La OCDE indicó hoy que pese a la bajada en el número de parados registrada en España en junio, la tasa de desempleo va a seguir siendo alta y el creciente desajuste entre quienes buscan trabajo y las vacantes sugiere que los aumentos cíclicos se podrían estar transformando en permanentes.


El informe sobre perspectivas de empleo para 2012 presentado hoy por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico recordó no obstante que desde el inicio de la recesión a finales de 2007 la tasa de desempleo se ha "más que duplicado", hasta llegar a ser la más alta de la OCDE. El pasado junio, según datos del Ministerio de Empleo y Seguridad Social, el paro bajó en 98.853 personas respecto al mes anterior (el 2,10 %) y sumó tres meses de caídas, con lo que el total de desempleados se cerró en 4,615 millones de personas.
La situación de los jóvenes, según el documento, es "especialmente preocupante", porque el paro y otras dificultades laborales a edades tempranas de la vida laboral "podrían estar mermando tanto las trayectorias profesionales de largo plazo como sus perspectivas de ingresos futuros".

La OCDE consideró en su análisis que el alto grado de "dualidad" en el mercado laboral español ha limitado la capacidad de este para capear la crisis, y hace que se encuentre "entre los menos resistentes" del grupo en lo referente al impacto que un shock económico negativo podría tener en el aumento del paro.

Según sus cálculos, un descenso del PIB en España incrementaría la tasa de desempleo una media de 0,6 puntos porcentuales en los próximos cuatro años, frente a los 0,15 puntos con los que esa misma situación repercutiría en Japón, una diferencia que surge de las respectivas políticas públicas.

"Estrictas medidas de protección laboral para trabajadores con contratos indefinidos y el predominio de contratos temporales para las nuevas generaciones estarían directamente asociadas tanto con el débil rendimiento del mercado laboral a largo plazo como con su baja capacidad de recuperación", explica la OCDE.

La institución confía no obstante en que las reformas introducidas el pasado febrero puedan contribuir a reducir la dualidad entre el empleo temporal y el fijo y a hacer que el mercado español sea más resistentes a crisis futuras.

"La lucha contra la dualidad es clave", subraya la organización, según la cual el equilibrio entre ambos tipos de contratos debe mejorarse para hacer cumplir las normas vigentes en las respectivas modalidades.

La OCDE recomienda también cambios en el seguro de desempleo de cara a eliminar incentivos inadecuados en trabajadores y compañías que tienden en la actualidad a fomentar la contratación temporal.

Y tras haber observado que las empresas españolas recurren en exceso a los despidos como método de ajuste en tiempos de crisis, apuesta por favorecer las medidas que flexibilizan salarios y condiciones laborales.

14 millones de empleos para superar la crisis
Los países de la OCDE necesitan crear 14 millones de puestos de trabajo para recuperar la situación de empleo anterior a la actual crisis, según un informe publicado hoy en París.

Un total de 48 millones de personas estaban sin trabajo en mayo pasado, lo que elevaba el índice de desempleo de la OCDE al 7,9 %, y los autores del informe calculan que el paro en los países de la zona del euro aumentará en los próximos meses y solo se estabilizará en 2013.

Eso significa que ahora están en paro 15 millones de personas más de las que lo estaban antes del comienzo de la crisis, en diciembre de 2007, asegura la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

La organización advierte de que la marginalización de los que llevan tiempo sin trabajo ha aumentado, un fenómeno que vincula con la falta de una recuperación firme de la economía y destaca la divergencia de las tendencias en el aumento del paro.

Así, se ha mantenido en el rango de entre el 3,5 y el 5 % en Australia, Austria, Japón, Corea del Sur, Luxemburgo, México, Holanda, Noruega y Suiza y ha descendido considerablemente en Alemania, donde pasó del 8,2 % de finales de 2007 al 5,6 % de mayo pasado.

Por otro lado, destaca los otros nueve países donde alcanza índices de dos dígitos: Estonia, Francia, Grecia, Hungría, Irlanda, Portugal, Italia, República Eslovaca y España.

El informe estima que la mejora del mercado laboral depende mucho de la recuperación económica, por lo que en ella influyen factores que no están bajo el control de las autoridades que gestionan políticas dirigidas a reducir el número de parados.

Recomienda la organización que los países adopten medidas "apropiadas" de política macroeconómica, entre las que destaca las que contribuyan a "estabilizar el sistema bancario europeo".

Además, estima que tiene que haber una relajación mayor de la habida hasta ahora de la política monetaria, con el fin de que ésta contribuya al crecimiento económico en el corto plazo.

La OCDE señala que es importante que los países miembros eviten repetir el error de utilizar las jubilaciones anticipadas o las contribuciones por discapacidad y enfermedad como vía para rebajar las cifras de desempleo.

"Es esencial evitar repetir ese error, ayudando a los trabajadores sin empleo a que mantengan el contacto con el mercado laboral y para que regresen al trabajo lo más pronto posible", escriben los autores del informe.

La OCDE pone algunos ejemplos de adaptación de políticas a las condiciones macroeconómicas vigentes en cada momento al destacar prácticas como las de Canadá, donde el sistema de subsidios a los parados dura más durante épocas de recesión y menos meses cuando es menos difícil encontrar un empleo.

En Dinamarca y Suiza, señala el informe, los gastos públicos en subsidios a los parados se ajustan de manera automática según el nivel de desempleo.

En relación con el creciente desempleo estructural, la OCDE señala que las políticas activas de empleo tienen que estar dotadas suficientemente, y éste es un elemento crucial, puesto que sus presupuestos han crecido menos que lo ha hecho el índice de paro.

La OCDE expresa su preocupación por las consecuencias que las políticas de ajuste aplicadas para reducir el déficit en varios países pueden tener en las políticas activas de empleo, lo que puede empeorar la situación del mercado laboral.

Esa circunstancia puede además "poner en peligro el potencial de crecimiento económico a largo plazo", se asegura en el informe.

Por último, el informe sugiere que políticas de promoción de la contratación aplicadas en el pasado, como la reducción de la fiscalidad que las empresas soportan sobre sus contratados, pueden resultar menos apropiadas en las actuales circunstancias.

Así, los autores del estudio indican que pueden ser más efectivas para reducir el nivel de paro políticas de subvenciones a las nuevas contrataciones que estén vinculadas a un crecimiento neto del empleo.

E inciden en que se deberían favorecer políticas activas de empleo dirigidas a compatibilizar el estudio y la incorporación al mercado laboral de los jóvenes y también que habría que dotar más los programas que hayan demostrado ser más rentables en función de los resultados obtenidos.

EE.UU. VA CAMINO DE LA PEOR RECESIÓN DE SU HISTORIA

Redacción Insurgente

El virus de la crisis soberana europea ha terminado por contagiar a la economía mundial.

A ambos lados del planeta, tanto el paciente estadounidense como el asiático no han podido evitar mostrar ya signos de agotamiento en áreas clave como la actividad manufacturera, que comienza a contraerse tras varios años de saludable crecimiento.

Un estigma que en el caso de Estados Unidos podría provocar una muerte súbita si el Congreso y la Casa Blanca no resuelven la oleada de recortes fiscales automáticos que se avecinan a finales de este año. Un hecho que caería como una losa no sólo para el producto interior bruto del país sino también arrastraría consigo al resto del mundo.

Hasta ahora, la economía norteamericana ha mostrado señales de alivio y sus fundamentos eran más saludables que los del resto de sus homólogos occidentales. No debemos obviar datos positivos como que la actividad de la construcción ha mejorado y el precio de la gasolina ha caído casi 60 centavos por galón desde principios de abril hasta principios de julio, algo que ha incrementado el poder adquisitivo de los estadounidenses en un 0,5%.

Sin embargo, el ISM manufacturero, que mide la actividad de sus fábricas, se sumó durante el mes de junio a muchos índices similares en otros países del mundo que mostraron una lectura por debajo del umbral de los 50 puntos, algo que marca el comienzo de una contracción.

El debilitamiento va más allá del área de las manufacturas y eso es preocupante. El sector de servicios mantuvo su marca por encima del punto de equilibrio en junio, pero registró su peor registro desde enero de 2010. En estas circunstancias, los bancos centrales de todo el mundo han recortado los tipos de interés y en el caso de la Reserva Federal de EEUU, donde los tipos ya mantienen niveles excepcionalmente bajos, se han ampliado las medidas de flexibilización no convencionales. Dicho esto, todavía no está claro cuán efectiva será la medicina monetaria, que lleva implantándose a este lado del Atlántico durante los últimos cuatro años.

De momento, el mercado laboral no termina de sanar. Es cierto que en junio la tasa de paro se mantuvo estable en el 8,2% pero la creación de puestos de trabajo, un total de 80.000 empleos, quedó muy por debajo de lo esperado por el mercado. En los últimos cinco años, el patrimonio de las familias estadounidenses se ha desplomado un 35%, según datos del censo de EEUU, desde los 102.844 dólares hasta los 66.740 dólares. Además, en el segundo trimestre del año, la confianza de los consumidores cayó hasta los 87 puntos, por debajo de los 100 que marca la barrera con el optimismo, de acuerdo con un estudio elaborado por Nielsen.

El acantilado fiscal
"Esperamos que el crecimiento continúe su desaceleración gradual a medida que la economía sufre tres ataques distintos: el ajuste fiscal, una recesión en Europa y un shock por la incertidumbre política síntoma de las elecciones presidenciales", explica Ethan Harris, economista jefe de Bank of America Merrill Lynch.

Desde el banco pronostican que el conocido como "acantilado fiscal" al que se enfrenta la mayor economía del mundo a finales de este año, cuando expiren de forma automática una remesa de recortes de impuestos y otros incentivos fiscales, aumentarán "las posibilidades de una posible recesión".

La Oficina Presupuestaria del Congreso (CBO, por sus siglas en inglés) proyecta que si el Capitolio no pone remedio a esta situación, algo que podría suceder dada la proximidad de las elecciones presidenciales, la política fiscal de EEUU experimentaría un ajuste por valor del 5,4% del PIB del país. Precisamente, el Fondo Monetario Internacional advertía esta semana en su revisión económica al mayor donante de la institución que si no pone remedio a dicha situación, los tambores de la recesión comenzarán a sonar en 2013.

De hecho, los expertos del Fondo estimaron que una consolidación fiscal de alrededor del 4% del PIB en 2013 "podría reducir el crecimiento anual muy por debajo del 1%", algo que resultaría en una contracción de la mayor economía del mundo el próximo año.

Además de esto, hemos visto como las empresas han reducido drásticamente sus previsiones para el año. Desde Pall, Nucor, Ryder Systems, Procter & Gamble, Cardinal Health, Texas Instruments, Starbucks, Autodesk, FedEx, Jabil Circuit, Bed, Bath & Beyond hasta Adobe Systems.

Buena parte de ellas son indicadores de la marcha económica del país. Y no debemos olvidar que las empresas sólo rebajan sus previsiones si las cosas van a empeorar mucho.

¿Depresión a la vista?
En términos generales, estamos recibiendo muchas señales de que la economía de EEUU se dirige hacia una segunda recesión que corre el riesgo de convertirse en una depresión. De hecho, el economista Nouriel Roubini indicó que "ya no quedan conejos en la chistera" después de que a la Reserva Federal se le hayan acabado las balas.


De momento, el FMI estima que la mayor economía del mundo crecerá un 2% este año y un 2,% el que viene aunque ayer la directora de la institución, Christine Lagarde advirtió que "el panorama económico mundial es preocupante en Europa, Estados Unidos y los grandes mercados emergentes", de ahí que el Fondo pueda rebajar sus previsiones de crecimiento el próximo 16 de julio cuando presente sus Perspectivas de Crecimiento Mundial (WEO, por sus siglas en inglés).

Desde la consultora IHS Global Insight han incrementado las probabilidades de una recesión en EEUU hasta el 25% y rebajado las previsiones de crecimiento hasta el 2 por ciento en 2012 y 2013, respectivamente. "La crisis de la Eurozona podría empeorar, sobre todo si las noticias sobre el crecimiento siguen siendo malas", justificó Nigel Gault, su economista jefe, a la hora de describir los fantasmas que sobrevuelan la economía de EEUU. "En Asia, la desaceleración en China podría intensificarse. Y la amenaza de los precios del petróleo fruto de las tensiones con Irán no han desaparecido", añadía al mismo tiempo que señaló que el acantilado fiscal, podría provocar que la economía estadounidense se contrajera un 0,3% en 2013.

En estas circunstancias es evidente que Ben Bernanke y sus chicos en la Reserva Federal podrían salir de nuevo al rescate de la economía con una nueva ronda de estímulo cuantitativo. "Asumimos que la Fed implantará una tercera ronda de por valor 500.000 millones de dólares en 2013", asegura Gault. Por su parte, Harris, economista jefe de Bank of America Merrill Lynch, determina que el próximo QE3 llegará el próximo verano.

5 millones de empleos
Desde el fin de la última recesión económica, EEUU sigue sin recuperar cerca de cinco millones de empleos perdidos durante el periodo de contracción. El pasado mes de junio sólo se crearon 80.000 puestos de trabajo, por debajo de los 100.000 que esperaba el mercado y la tasa de paro se mantuvo estancada en el 8,2%.


El segundo trimestre de 2012 marca el peor resultado en la creación de empleo trimestral de los últimos dos años, con un total de 75.000 nuevos puestos de trabajo frente a los 226.000 creados entre enero y marzo de este año.

Según Alan Krueger, presidente del Consejo Económico de la Casa Blanca, "las cifras son volátiles y las estimaciones de empleo pueden ser objeto de una revisión sustancial" justificó. Sin embargo señaló que "no hay soluciones rápidas" a los problemas que enfrenta la economía de EEUU, que se cocieron a fuego lento durante más de una década