Mostrando entradas con la etiqueta PSOEDEMOS. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta PSOEDEMOS. Mostrar todas las entradas

22 de enero de 2015

¿ZAPIGLESIAS O IGLESZAPA?

Por Marat

Cuentan los gacetilleros que un día de Diciembre de 2014, poco antes de las navidades, la casa del católico José Bono se iluminó por la presencia de tres estrellas de talla mundial que habrían fundido los plomos de la vivienda y de las de toda la ciudad, si las hubiera colocado en el abeto: allí estaban el Champions League José Luis Rodríguez Zapatero, el Clint Eastwood (lo dijo él mismo) Pablo Manuel Iglesias Turrión y el efebo pastorcillo de Belén Íñigo (¡qué nombre de reminiscencias tan jesuíticas!) Errejón-me-faltó-un-papel. 

Desconozco si el encuentro fue comida o cena y si a los postres, tras el consabido Ángelus o Rosario, según horario, oficiados en cualquier caso por el pater Bono y auxiliado por el monaguillo Errejón, hubo o no roscón prenavideño, ese en el que le tocó el haba a Monedero cuando lo probó en casa de Carmen Lomana, acompañado de la pijo-ultra-democrática-y-tolerante jet-set. 

Estoy convencido de que ectoplasmáticamente flotaban en el ambiente las imágenes de Susana Díaz apuñalando sanguinaria pero fraternalmente al “compañero” Pedro Sánchez "el breve", mientras una sonrisa mefistofélica pasaba por el rostro de Zapatero y se reflejaba cual aura de santo sobre la cabeza del miembro numerario del Opus Dei, empresario, terrateniente, ex Presidente del Congreso, ex ministro y ex Presidente de la Comunidad de Castilla La Mancha, hoy asolada por María Dolores de Cospedal, José Bono. 

¿Quién iba a decirle a Pablo Manuel Iglesias Turrión que un día estaría ante el ídolo de su juventud, ante el campeón del concurso “invente usted nombre para esquivar la palabra crisis”, ante el hombre al que en su tesis doctoral definió como “referente progresista mundial”, quizá inspirado por el ex afilado al PSOE y más tarde “empresario-emprendedor-no-enseño-las-facturas” Juan Carlos Monedero.

Enorme e indescriptible debió ser la emoción que embargara al joven politólogo-como-dice-Carl-Schmitt al ver tan de cerca a su ídolo de juventud. Sin duda el abrazo entre ambos debió ser tan poderoso que bien pudieron fundirse uno y otro, de tal modo que el podemita y Mr artículo 135 de la Constitución acabasen siendo uno solo. 

Dicen que hablaron de todo, de la situación del país, ¡de teoría política! (debe haberse rebajado mucho el nivel de ésta en los últimos años), de economía (Zapatero la aprendió en unas tardes), de América Latina, del euro, según Zapatero y, según Iglesias, de las perspectivas de España, término éste aparentemente más difuso pero que bien podría estar señalando posibles evoluciones futuras de las relaciones entre PSOE y Podemos, cosa ésta que siempre niegan con la boca grande los dirigentes podemitas, mientras con la pequeña acaban diciendo eso de “hombre, si el PSOE cambia mucho y se hace autocrítica...”. No hará falta tanto al día siguiente de las municipales y autonómicas. 

Y es que las sintonías personales son algo que acerca incluso más que unas afinidades políticas, siempre negadas, pero evidentes desde el marco ideológico del reformismo. No obstante en la traslación a los medios de esas simpatías es significativo que Zapatero fuese más mesurado que los dirigentes podemitas. Para el expresidente del gobierno fue “cordial y correcto”  y se preguntaba enfáticamente: "¿Vamos a convertir a Pablo Iglesias en algo diferente de lo que es, un político de este país?". En cualquier caso, de ese encuentro, lo relevante para el señor de las cejas circunflejas era señalar que se toma a su actual secretario general como a Perico de los los Palotes:  "La agenda que tengo cada día no suelo compartirla con Pedro Sánchez". Al chico de la camisa blanca hace tiempo que los pocos barones que quedan y el enorme antiguo aparato del PSOE le tienen más enfilado que Arias Cañete a un chuletón de buey.  

En cambio Iglesias y Errejón se deshicieron en halagos respecto al “referente progresista mundial”. El de Juego de Tronos hablo de “la altura de miras de Zapatero y de Pepe Bono” por tratarles de un modo mucho más acogedor que la dirección del PSOE actual. El más locuaz ha sido Errejón, que últimamente, intentando que todo el mundo se olvide del asuntillo de su beca, habla por los codos. 

Señaló las coincidencias respecto a América Latina: "La verdad es que teníamos posiciones bastante similares", puntualizando además que “Ahí, muchas de las transformaciones están teniendo que construir un Estado y por lo tanto trazar cualquier semejanza con nuestro país sería una cosa absurda en la medida en que en nuestro país hay un Estado ya construido. Y esa es una diferencia que no es de matiz, es central". Esto para la Brunete mediática de la ultraderecha que se empeña en que estos chicos son malvados castro-bolivarianos. Su referente es Dinamarca y, tras la última entrevista de Iglesias en El País, incluso los Estados Unidos y Obama del que pillaron slogan. La extrema derecha mediática y política lo sabe pero mantiene la farsa porque lo que se juega no es el sistema económico, ni siquiera unas medidas más o menos realmente sociales, sino unos cuantos sillones políticos y los de algunos periodistas y medios ligados a ellos.

Insistió el monaguillo becario en que "es un lujo poder intercambiar pareceres sobre cómo han sido las cosas en el pasado reciente, cómo son ahora y las perspectivas hacia adelante" y en que fue una charla “cordial y agradable”. Y es que en palabras suyas "A mí me produjo muy buena impresión. Me pareció una persona honesta. Una persona que tenía pensada las cosas que decía, y que creía las cosas que decía. Y me pareció un buen conversador, informado y respetuoso. La verdad es que da gusto conversar así". Y no se despisten de lo señalado respecto a las "grandes realizaciones" de Zapatero: "El expresidente decía que era lo que tenía que hacer y que no tenía margen. Nosotros le decíamos que sí era posible, que había otro margen. Pero en todo caso teníamos mucha voluntad de escuchar también cómo lo presenta alguien que dice: mira, a mí no me gustaba mucho pero había que hacerlo". Aviso a futuros votantes por si algún día no les cuadran las cuentas a los podemitas.

Se le nota a Errejón el entusiasmo de haber alcanzado unos niveles de relación con “el poder” o con quien pareció representarlo, aunque fuese un mandado del capital y del imperialismo, más elevado que el contacto con jefes de gobierno de América Latina. ¡Menudo líder mundial fue Zapatero!

Si me importase algo que más que una higa me quedaría en la evidente, pero insuficiente como análisis, alianza de civilizados enemigos de la actual dirección del PSOE y en cómo ésta entrevista se realizó en medio de los ataques de la señora Susana Díaz contra su secretario general, así como en la coincidencia de que la difusión del encuentro por el Huffington Post y la entrevista de la SER en el mismo día a Zapatero, dónde se le preguntó por dicha reunión. Es decir, esto aparece cuando la Presidenta de la Junta, modelo de personaje chabacano, tan del estilo de la audiencia de “Sálvame” o de los programas de “tertuliadas” nocturnas de fin de semana de La Sexta, más está arreciando en su cuestionamiento a su secretario general.

Y es muy cierto que al mediocre pero templado Pedro Sánchez le han metido un viaje de no te menees con un encuentro que sería adecuada y oportunamente filtrado a los medios y que en ese golpe estaban interesados tanto sus enemigos internos -según Bono no hay hijos de puta como los del propio partido- como sus rivales externos; los segundos por la desestabilización que le supone al PSOE el cuestionamiento de su secretario general y porque éste les hace frente. 

En los últimos tiempos, siempre lo ha sido, pero últimamente más que nunca, la política nacional se ha convertido en un inmenso estercolero, un lodazal en el que los políticos demuestran ser perdularios de la peor condición, Pedronavajas en barrio de putas, matones de esquina, payasos vocacionales, un patio de Monipodio en el que el tonto sin complejos ni escrúpulos es el rey, maleantes que merecen ser tratados como carne de presidio, imbéciles sin el menor sentido del ridículo, desleales Brutos a su partido y a sus compañeros, vulgares funcionarios del capital que les coloca donde está -solo el ignorante dice que lo hace “el pueblo”, ese villano que vota lo que le dicen que debe votar-. Y de esa condición no hay partido, organización política o coalición que se salve. Eso sin hablar de corrupción económica porque creo que la peor es la de tipo moral, ya que de ella vienen todos los males. Es el signo de una crisis de capitalismo que no es mera crisis económica sino degradación general de los valores mínimamente humanistas, lo que permite medrar al más trepa, al más canalla, al más idiota con soberbia suficiente para pisar fuerte y decir “aquí estoy yo”. El majadero y el sinvergüenza a menudo van de la misma mano. 

Pero con ser todo eso cierto, creo que lo importante es quedarnos con el recado que una y otra parte de la reunión nos ha querido trasladar y con el mensaje que aflora con su filtración a los medios. 

Desde un nacional-católico y cacique como Bono, desde un progre de chichinabo como Zapatero y desde una fontanera como Susana Díaz -que no estaba de físicamente allí pero sí en espíritu- a punto de convocar adelanto electoral en Andalucía, por muchos aspavientos antipodemitas que haga la fontanera se nos está diciendo “con estos chicos se pueda hablar”. Y es que estamos a cuatro meses de las elecciones autonómicas y municipales en la mayoría del territorio del Estado, y posiblemente a menos en Andalucía. Y en cualquier caso los sondeos, manipulados para generar opinión entre el elector sin criterio propio que vota a caballo ganador, pero eficaces en su manipulación le dan malas expectativas al PSOE mientras, curiosamente empiezan a mostrar un despegue de la distancia del PP respecto a Podemos. No tardará Teresa Rodríguez en decir menos tonterías por minuto en su twitter desde el que liga el embarazo de la fontanera, con la demanda de elecciones en Andalucía y con su deseo de sustituirla porque, por mucho que quiera, no será ella la Presidenta de Andalucía sino, en el mejor de los casos la vicepresidenta. Y lo gracioso es que la necedad del votante podemita tragará con ello cuando hasta hace muy poco les decían que bajo ninguna circunstancia pactarían con el PSOE.   

Y tienen razón los Zapatero, Bono y compañía cuando afirman que con estos chicos se puede hablar  porque no son sino una reedición de lo que fue el PSOE en 1977 que, del radicalismo de boquilla -somos los “descamisaos”, decía Guerra- llegó hasta un compromiso con la banca y el gran capital nacional y extranjero que fue asombro sólo para quienes viven en el mundo de las apariencias. Y ese camino que el PSOE hizo en unos años lo está recorriendo Podemos con zancadas de botas de siete leguas en su viaje hacia el extremo-centro. El centro, ese punto imaginario en la política, de falso enunciado. Como si pudiera haber un centro entre un sistema capitalista y otro socialista (eso que los ignorantes llaman llenos de odio cretino “el comunismo”), entre la propiedad individual de las empresas y la propiedad colectiva de las mismas. Si usted no entra en esa cuestión estará siempre en la derecha, extrema, moderada o como quiera llamarla, pero en la derecha, que no es otra cosa que capitalismo, puro y duro o compasivo y de rostro humano, pero capitalismo. 

Me descojono de esos “demócratas” para los que la democracia es hacer más referéndums, votar mucho electrónicamente, algo si cabe más manipulable, como nos han demostrado los propios jefes podemitas, que con urna física y mucha app desde donde se nos pregunta lo que quiere preguntar el que controla la herramienta, pero que no tocan el asunto de la economía desde su base, que no es otro que el de la propiedad. 

Y, desde Podemos, con dicha reunión se estaba enviando un mensaje sobre todo dirigido a esas bases socialistas -su gran caladero de votos- a esos que, si vivieron el franquismo, fueron gente callada y de orden y que, si no lo vivieron, creen que ser de “izquierdas” es no votar PP, algo para muchos de ellos rechazable no tanto por cuestiones económicas -el PSOE ha demostrado tener el mismo modelo de sociedad que el PP con algo más de vaselina- como por cuestiones “estéticas” (la caspa, el talante) y de derechos civiles. A poco liberal en lo político que hubiese sido el PP, muchos de ellos no hubieran tenido empacho en votarle.

Sabe Podemos que su base para ganar unas elecciones está en ese sector que creía ser clase media, satisfecho de la vida y de cómo le iba en ella, conservador en la dinámica social, poco dado a la protesta, si la cosa económica no le afecta, y cuyo modelo de sociedad sea el de capitalismo del bienestar. Si esto último no es ya posible porque el capitalismo ha mutado en su nueva fase ya se irá parcheando políticamente con otro tipo de propuestas y circo. Quien busca su base social en ese tipo de “gente” y la quiere, ante todo como votante, está claro que no es un peligro para ningún poder real y ese mensaje se lo está mandando no sólo a los poderes fácticos y económicos, al reunirse con la derecha civilizada, que representa el PSOE, o sus emisarios informales, sino también a los votantes con los que quiere fraguar su mayoría: “la buena gente de orden”. Esos tontos de los cojones que con mandar a unos cuantos corruptos (políticos siempre claro, no va a ser cosa de morder la mano empresarial que corrompe y que ellos creen que les da de comer) a la cárcel ya han satisfecho sus ansias de justicia social porque lo que a ellos les “indigna” es que lo hayan hecho cuando se estaban realizando recortes sociales, más que los recortes sociales en sí mismos y que las clases sociales beneficiarias de ellos. Pues en eso también les defraudarán los podemitas porque no va a ser cosa de aplicar contra “la casta” unas medidas de justicia que luego, una vez perdido el gobierno, porque nada es eterno, pudieran aplicarles a ellos mismos, que sin llegar a tener todavía un sólo concejal apuntan maneras. La justicia que en ese hipotético gobierno podemita se aplicase iba a venir del esfuerzo particular de un reducido puñado de jueces, exactamente igual que sucede ahora con la metástasis corrupta del PP. 

Estoy convencido de que Pablo Iglesias no hubiera dicho esta vez aquella frase suya de “me siento como una mujer guapa que entra al bar y se encuentra rodeada de babosos”, como tampoco eso de rechazar los encuentros en “despachos cerrados”. Al fin y al cabo no fue en un despacho cerrado sino en casa de Bono, que por arte de magia ha debido dejar de ser “casta”. Cosas de la neocasta.       

NOTA DEL EDITOR DE ESTE BLOG: 
Puede que también el interese: Podemos, nuevo títere del gran capital y de la derecha española más rancia: http://marat-asaltarloscielos.blogspot.com.es/2015/01/podemos-nuevo-titere-del-gran-capital-y.html

"Un nauseabundo olor a cloaca": http://marat-asaltarloscielos.blogspot.com.es/2015/03/un-nauseabundo-olor-cloaca.html

21 de septiembre de 2014

PEDRO SÁNCHEZ vs. PABLO IGLESIAS: DE LOS DEBATES CON MARHUENDA A LA LLAMADA EN DIRECTO A “SÁLVAME”

Había una vez, un circo...
Por Marat

Cuando Pedro Sánchez llamó a “Sálvame” para comunicar humildad y cercanía al entrar en directo para pedir perdón por el papel del PSOE en Tordesillas en relación con el Toro de la Vega -el alcalde es de este partido- y afirmar que él y su partido están contra el maltrato a los animales, trasmitiendo la imagen de que era un hombre simpático, cercano, afable y “espontáneo” tuve la sensación de un dejà vu

Cuando horas más tarde repitió la jugada, rizando aún más el rizo de la “espontaneidad” para comunicar amabilidad, empatía, espontaneidad e “investidura” del poder que llevó a Pablo Motos a dejar que le ganara en la prueba que casi siempre gana él, supe que estaba ante una misma categoría de producto con dos marcas -Pedro Sánchez y Pablo iglesias Turrión (PIT, que no Brad) y las mismas estrategias de marketing que se dirigían a idéntico público: el que alimenta su intelecto y su formación/información por la televisión.

El formato de los combates de presing-cacht-tongo entre Marhuenda y PIT, que no Brad o entre la señora de éste y submarino de Podemos en IU, Tania Sánchez y Eduardo Inda, es tan espectáculo televisivo, tan poco racional, tan dado al entretenimiento, tan poco facilitador de la reflexión no ya como “el Hormiguero” sino como el programa de casquería gruesa que conduce Jorge Javier Vázquez. En ambos espacios televisivos las acusaciones cruzadas, la interrupción del que habla, las gesticulaciones y gritos, la dramatización teatral, la representación actoral de papeles previamente ensayados, el carácter de performance, la puesta en escena, la búsqueda de la frase de trazo grueso y el efectismo se oponen al debate argumentado, la profundidad y relevancia del contenido de lo que se debate y la posibilidad de que la audiencia se eleve por encima del bagaje cultural con el que previamente se había puesto delante del televisor.

Lo que importa es el circo, el entretenimiento, el arte ceremonial, el espectáculo, sea en relación con la operación de agrandamiento de mamas de alguna de las descollantes figuras intelectuales de “Sálvame” o con que Marhuenda sea un facha redomado o PIT, que no Brad, un terrible bolchevique que pretenda convencernos de que hay que “empoderar” a la cabra de la Legión al grado de comandanta de un Tabor de Regulares.    

Como en una de tantas ediciones de “Gran Hermano”, el espectador asiste al espectáculo político televisivo convertido en un mirón pasivo, casi siempre un cotilla al que la banalización de los contenidos que le alimentan como el soma de “Un Mundo Feliz” le ha ido convirtiendo en la mayoría silenciosa de la que nos habla Baudrillard y, en el mejor de los casos, en parte del público que desde los sofás de sus casas, asiente, murmura, emite un gruñido de desaprobación o complacencia y se identifica o no con el personaje de la obra de ficción que la TDT le esta emitiendo. 

Del bufón plebeyo de las cortes medievales al político mediático algo hemos avanzado en simulacro de democratización social. Hoy quien ejerce de aparente soberano es el ciudadano-espectador mientras es el noble-político quien realiza las gracias, evoluciones y piruetas para entretener a una sociedad con más tiempo libre del que quisiera porque el desempleo convierte en obligados ociosos a millones de seres humanos que tienen sumamente difícil aprovechar ese espacio socialmente improductivo en construcción que mejore sus vidas y sus personas.

Series de ficción con vampiros o zombies, talk-shows a cada cual más descerebrado, banal y embrutecedor, programas de “información”-debate-tertulianismo-cotilleo que rebajan al público a la condición de discapacitado mental. Ese es el logro de unos aparatos ideológicos del poder económico y político que condenan al individuo a una permanente etapa infantil carente de raciocinio.

En las actuales sociedades capitalistas la sofisticación no es precisamente el mecanismo de manipulación y dominación a quienes tienen menos capacidad para defenderse de la sodomización mental. Lo habitual es la emisión de mensajes destinados a un esfuerzo mental mínimo, donde los contenidos vienen ya formateados y preparados como los potitos de las comidas para bebés. 

El mercado político no es sino la prolongación del mercado de consumo de mercancías.La comunicación, que no información, queda reducida a eslóganes publicitarios en un estado de permanente campaña en la que la tensión, la agresividad y la violencia verbal representan a una fracción mínima (muestra) del universo total de la población. El debate político es el desplazamiento metonímico de la violencia social, como válvula de escape que permite que la presión no suba en exceso y se mantengan los mínimos necesarios para el consentimiento. 

Puesto que la representación política, las organizaciones, y la propia sociedad con ellas, carecen de alternativas reales para afrontar una crisis económica capitalista que es endémica, la tensión se desplaza hacia el escenario político, dejando que los poderes económicos queden en la sombra mientras las figuritas del guiñol fingen golpearse con rutinarios mamporros retransmitidos a los hogares en los que unas mayorías cada vez más fatigadas los contemplan. 

El pretendido espacio de disidencia social y política frente al orden imperante no supera un tercio de la sociedad y está compuesto fundamentalmente por aquellos que, habiendo perdido un estatus relativamente acomodado, pretenden recuperarlo y volver a los buenos tiempos de la estabilidad social y el consumo despreocupados.

Pero ese tercio y sus supuestas correlaciones políticas son plasmados por el foco mediático como la disidencia global oficializada a la que dar la palabra y la bendición institucional que haga las veces de reintegración en el orden sistémico de quienes en realidad nunca estuvieron fuera de él ni en su contra porque es su orden, en el que creen y el que desean.

La gran mayoría de las auténticas víctimas de la crisis asiste silenciosa a su sacrificio ya que carece de voz política que la exprese con voluntad de derribar el orden económico, político y social que sustenta al capitalismo.

“Si hay alguna esperanza está en los proles”, dijo Winston Smith en “1984” -yo también creo que está en ellos porque cada vez tienen menos que perder y un mundo por ganar- pero no ha renacido aún el derrotado partido que siempre les representó. Todos los que reclaman su patrimonio son aún demasiado sectarios, cerrados en sí mismos y miedosos para serlo. Habrá que ir poniendo la semilla destinada a un resurgir que expulse a las clases medias autoatribuidas y reales del escenario central de la protesta para situarlas a la cola y dependiendo de la lucha protagónica del viejo y, a la vez, moderno Prometeo de la Humanidad: esa clase que al liberarse de la opresión y la explotación, emancipa a todas las demás del yugo capitalista de la producción, el consumo fetichista y la falta de  futuro.

Mientras tanto, cuando veo a PIT, que no Brad o a Pedro Sánchez sé que se me está vendiendo el mismo producto caducado: ciudadanismo interclasista que incluye a los explotadores, discurso aceptable y bendecido por el sistema capitalista, apelación a “la gente” en lugar de a la clase, primarias como solución a cualquier tipo de mal, incluida la calvicie y la alitosis y telepredicación apelativa al hooligan descerebrado en lugar de al ser humano crítico y capaz de expresar un NO que se salga del guión y esté dispuesto a avanzar, como el bosque de Birnam, hasta derribar las murallas del castillo de Cawdor. Juventud, divino tesoro...de la trivialidad. 

Eso sí, al menos Pedro Sánchez da la impresión de ser un tipo más humilde, que se baña más a menudo y que tiene la dentadura más limpia que PIT, que no Brad. Algo es algo. Y si para las señoras está más bueno que el escuálido cargado de hombros y de soberbia, algo más se logra. Al menos gustará a las chicas. 

No hace mucho escribí un artículo que ustedes pueden encontrar en este blog titulado “Guárdame los votos Pablo, que en unos meses pasaré a recogerlos. Pedro Sánchez”. Ya está sucediendo. Es lógico: el 35% de los votantes de Podemos proviene del PSOE y son personas que creen que ser de izquierdas es no ser tan cutre y carca como el PP. Nada debe sorprender de estos “progresistas” del mundo PSOEDEMOS.

Quien sepa interpretar que lo haga. En “La Sexta Noche” del sábado 21 de Septiembre ha entrado PIT, que no Brad, después de meses de silencio meditativo, como respuesta a la crítica dentro de su “movimiento” a su hiperliderazgo bonapartista, para retar a Pedro Sánchez a un debate. Será divertido comprobar cómo nada pueden ofrecer ni uno ni otro a la clase trabajadora de este país, más allá de críticas mutuas, velados guiños y alguna palabra talismán que nada significa. 

Propongo que el debate se haga en "Sálvame de Luxe" y que, en lugar de conducirlo Jorge Javier Vázquez, sean Belén Esteban o bien Kiko Hernández los moderadores, aunque también veo capacitadas para lidiar el evento a Lydia Lozano y a María Patiño.  

El día anterior, el curilla efébico y andrógino Errejoncito jr. en el programa “La otra red” del canal Cuatro admitía que, según en qué condiciones y si el PSOE cambiaba, (¿creería en sus palabras este personajillo?) Podemos podría pactar con este partido. ¿Alguien creía otra cosa? Yo creo que ni los fans, que no militantes, de Podemos más fantalizados pensaban en lo contrario. Radiografía del viaje desde el reformismo más agotado de Zapatero hasta la nada de PIT, que no Brad, pasando por todas las contradicciones posibles. 

En Podemos hay dos almas, además de algún primo que se cree revolucionario y desconoce dónde está pinado: la derecha democrática, representada por el voto que viene del PSOE, y la extrema derecha del borracho de taberna exaltado y matón. De esta última escribiré en unos días.   

NOTA DEL EDITOR DE ESTE BLOG: Quizá también le interese:
"El lado fascista de Podemos del que no hablan La Sexta, Cuatro o Público": http://marat-asaltarloscielos.blogspot.com.es/2014/09/el-lado-fascista-de-podemos-del-que-no.html

"Esoterismo y negocios giran alrededor del planeta Podemos"http://marat-asaltarloscielos.blogspot.com.es/2014/10/esoterismo-y-negocios-giran-alrededor.html

"Juego de Tronos: la trampa de Pablo Iglesias"http://marat-asaltarloscielos.blogspot.com.es/2014/10/juego-de-tronos-la-trampa-de-pablo.html