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15 de marzo de 2022

EL PANÓPTICO DE LA GUERRA

Por Marat

Segun la wikipedia, ese lugar tan denostado por los internautas que todos los que lo somos consultamos, el panóptico “era un tipo de arquitectura carcelaria ideada por el filósofo utilitarista Jeremy Bentham hacia fines del siglo XVIII. El objetivo de la estructura panóptica era permitir a su guardián, guarecido en una torre central, observar a todos los prisioneros, recluidos en celdas individuales alrededor de la torre, sin que estos puedan saber si son observados.”

Hoy, como en todo momento bélico hay una realidad negada a todo campo contendiente – estamos en guerra, aunque las bombas no nos alcancen - La verdad es la que dicta cada campo contendiente.

Cada parte contendiente envenena la realidad hasta hacer que en cada mentira repetida deba tomarse partido.

Quizá los prisioneros de la nave humana de 2022 que viaja hacia su propia incertidumbre futura debieran reflexionar sobre esta nueva fantasía de odios y autodestrucción, de nuevos abismos hacia la distopía de una supuesta edad postguerra nuclear.

La grandeza de la humanidad se encuentra en que se enfrenta por igual a lo grande y a lo pequeño , a un minúsculo virus y a la potencia destructiva nuclear. De un modo u otro siempre nos ha salvado la ciencia, cuando no nos ha amenazado, o la razón, cuando no ha enloquecido.

La posibilidad de pasar a la siguiente pantalla del proceso de autodestrucción de la especie sin que ello suceda tiene más que ver con la homeostasis que con la capacidad de entender al eterno enemigo: fuera de la caverna el enemigo, el poder, la clase, la meada para marcar el territorio.

Cuando una parte animal de la especie predomina están presentes la explotación laboral, la guerra, el odio al pobre y al extranjero sin medios económicos, Quien no logra fortuna fracasa por su culpa. Nadie pregunte sobre los orígenes sociales de quienes triunfan y fracasan ni sobre qué lugares ocupaban en eso que llaman el mundo prrductivo.

Habláis de la guerra los políticos y los medios de desinformación con tanta “verdad” como si vosotros y los capitalistas banqueros, fabricantes de armamentos, sociedades de inversiones en bolsa, petroleras y otros instrumentos de dolor fuéseis inocentes en estimular todo esto. A un lado y otro del telón todavía sin acero, los capitalistas chorreáis sangre.