28 de febrero de 2011

SOLIDARIDAD CON LA WEB ALASBARRICADAS.ORG

alasbarricadas.org es condenada por el Tribunal Supremo a pagar 6.000€ por unos comentarios en sus foros
Jue, 24/02/2011 - 23:44 — ALB Noticias
En una nueva vista del caso Ramoncín, el Tribunal Supremo de Madrid, institución a la que se había recurrido tras perder la vista en primera instancia en el Juzgado número 44 de Madrid, ha rechazado todos los recursos que la página Alasbarricadas.org había interpuesto y le da la razón a Ramoncín.

En síntesis, el Supremo basa su decisión en que la ilicitud de los contenidos "es patente y evidente por sí sola, al no depender de datos o información que no se encuentre a disposición de del intermediario", y porque incumplir el art. 10 (los deberes de información), supone - en su opinión - no observar la debida diligencia de cara a la retirada de contenidos ilícitos. Asimismo fallan que se incumple la LSSI, al no disponer de una dirección actual en el registro, como es obligación de todo buen ciudadano, ignorando que existen otros medios de contacto como el correo electrónico, que por cierto jamás utilizaron.

O sea que, aunque los comentarios fueron retirados más o menos en cuanto nos dimos cuenta de que había una causa legal interpuesta, no sirve de nada, ya que al parecer no fuimos lo bastante "diligentes" en su retirada. Los comentarios, para los jueces, son ilícitos sin ninguna duda, y no se atienen al derecho a la libertad de expresión, sino al derecho al honor. Y en cuando un administrador viera uno de estos comentarios (tan patentemente ilegales) debe, proceder a eliminarlo.

La sentencia del Tribunal Supremo viene a contradecir otras sentencias de otros tribunales, en las que se eximía a los moderadores de otros foros de los comentarios de sus usuarios, como el caso Rankia o que libraba a los acusados de otras demandas por injurias contra el honor como fueron el caso Quimera o el caso CNT Artes Gráficas, entre otros.

Dicho esto, queremos también elevar una queja sobre cómo los mass media tratan la realidad sin contrastar absolutamente nada. En diversos medios aparece que la página condenada es alasbarricadas.com, que cualquiera con un mínimo de curiosidad puede comprobar que no existe, y no alasbarricadas.org. ¿Es así como trabajan los periodistas de hoy, que ni se molestan en averiguar ni de qué página web están hablando? Exigimos que se corrija este "error".

En estos momentos estamos evaluando la estrategia a seguir. De todas formas para todas aquellas personas que deseen solidarizarse, os remitimos a esta página: http://www.alasbarricadas.org/sgae/?page_id=7

27 de febrero de 2011

ENTREVISTA A JULIAN ASSANGE

Por Santiago O’Donnell. Página12


Entramos por la puerta de atrás, por la cocina, a la mansión donde hoy vive Julian Assange, una tarde de enero helada y gris, a eso de las cinco y media.
Ni sirvientas ni mayordomos en Ellingham Hall, la edificación georgiana construida en el siglo XVIII que sirve de guarida para el fundador de Wikileaks. Lo primero que se ve es a un par de empleadas de la organización, edad veintipico, preparando una tarta sobre una larga mesada frente a un ventanal, mientras dos chicos en uniforme escolar toman la leche con su niñera alrededor de una mesa redonda. Los chicos son los hijos de los dueños de casa, el adinerado periodista Vaughan Smith y su esposa Pranvera.
La cocina da paso a un salón amplio y despojado, con paredes altas de tonos oscuros, donde cuelgan grandes óleos con ilustres antepasados, como en las películas. De muebles poco y nada. Un par de sillones mullidos tapizados en tela negra, algunas sillas, una repisa de madera tallada que sostiene dos o tres candelabros rústicos, plateados y vacíos. Frente a una gran ventana que da al jardín, por donde se filtra un resto de luz, sobre una mesa de comedor como para unas quince personas, otras dos empleadas de Wikileaks trabajan en sus laptops.
Assange está en un salón contiguo al nuestro. Sabe de la visita pero no puede ser molestado. Se pasa las horas en ese cuarto, trabajando en su computadora y durmiendo en el sofá. Sólo sale de la mansión una vez por día, para presentarse en la comisaría local, cumpliendo con el acuerdo de libertad condicionada que firmó para salir de la cárcel bajo fianza tras ser detenido en Londres en diciembre pasado. Había sido arrestado a pedido de Suecia, por dos acusaciones de asalto sexual.
Según las denunciantes, los presuntos crímenes habrían ocurrido durante relaciones consensuadas, cuando Assange habría insistido en continuarlas sin protección profiláctica, lo cual en Suecia está penado por la ley. Las mujeres que lo acusaron dijeron que no se conocían entre sí, pero que a raíz de lo sucedido entraron en contacto y decidieron presentarse juntas ante la Justicia. Assange jura que es una maniobra de Estados Unidos para extraditarlo a ese país. El fiscal general de Estados Unidos confirmó que lo está investigando por presunto espionaje, pero no lo ha acusado. En los cinco años que lleva Wikileaks, el sitio difundió más de un cuarto de millón de documentos secretos, casi todos de Estados Unidos. El fiscal general lo quiere procesar pero no la tiene fácil: en Estados Unidos es un crimen robar documentos, pero no publicarlos.
De repente se abre la puerta y aparece. Tiene cara de sueño y el uniforme arrugado: traje azul, camisa celeste, zapatos negros. Es alto, flaco, bien rubio y parece más joven que sus 39 años. Sólo le falta la mochila con la laptop para completar el cliché del guerrillero cibernético del siglo XXI.
El viaje había sido largo. Me ofrece un café. Se va. Al rato reaparece con un plato de galletitas caseras de limón. Lo deja en la mesa y se desliza hacia su cuarto. Al rato vuelve a salir, pasa a la cocina y vuelve con dos tazas de café. Atiende su celular. Vuelve a irse al otro cuarto, vuelve a salir. Aparece y desaparece casi en silencio, inesperadamente, como un fantasma.
Está claro que desconfía de los periodistas, que guarda distancia. Sabe que los necesita, pero no le gusta que se acerquen. Acababa de romper relaciones con The New York Times y The Guardian, después de que ambos diarios publicaran sendos perfiles de Assange que lo dejan en ridículo. Lo describieron como un neurótico autoritario con delirios de persecución, un fugitivo con las horas contadas. Se trata de los mismos diarios que se cansaron de publicar tapas con las primicias de Wikileaks. Yo no lo veo tan terminado. Lo veo a full, yendo y viniendo.
Cuesta atraer su atención, pero se detiene un momento cuando le cuento que me llamó la atención la popularidad que había adquirido en Europa mientras en Estados Unidos era tan criticado y en América latina era prácticamente un desconocido. Le digo que me gustaría contar su historia. Menciono una columna de opinión de El País de España que había leído en el avión. Lo presenta como el nuevo icono revolucionario. Dice que miles de jóvenes ya se visten y se peinan como él y que Hollywood ha copiado su estética.
Assange no parece muy impresionado, pero al menos está escuchando. Entonces le digo: “El Che Guevara estaba en la selva y usaba el fusil, el Comandante Marcos estaba en la selva pero usaba la computadora, y ahora venís vos y usás la computadora pero ya no estás en la selva”.
Un poco lo hago sonrojar. “Soy consciente de ese lugar que ocupo”, contesta en voz baja, casi un susurro.
Comento que hay mucha gente esperando su próxima jugada y le pregunto si es verdad que va a publicar información sobre un banco estadounidense, como había adelantado al Times de Londres.
“Uy, para qué lo mencioné. Ahora todos me preguntan. Algo vamos a hacer, pero no quiero adelantar nuestras movidas”, dice.
“Tanto no te equivocaste, porque todo el mundo habla de eso”, contesto.
“Puede ser”, dice ensayando una media sonrisa, mientras emprende otra retirada a su habitación, donde se escuchan otras voces. Al rato pasa otra vez, camino a la cocina, cargando dos cartones de huevos. Lo miro y sonríe. Parece contento. Cuando vuelve a pasar lo intercepto con más preguntas.
“¿Estás convencido de que la causa en Suecia fue armada por Estados Unidos?”
“No tengas dudas. El Pentágono es capaz de cualquier cosa. Fijate los cables y te das cuenta. Si mandan a matar a un ministro en Zimbabwe, ¿cómo no van a tratar de hacer algo conmigo?”
Se refería al ministro de Comercio e Industria del “gobierno de unidad”, Welshman Ncube. Según un wikicable, el embajador estadounidense en Harare había escrito que era “una figura divisiva y destructiva dentro de la oposición” y había recomendado que “lo saquen del escenario”. A Ncube la revelación no le cayó bien. Dijo que podría ganar o perder elecciones pero que siempre seguiría en política, y que la única manera de “sacarlo” era matándolo, por lo que él interpretaba que el embajador había ordenado su asesinato. La pregunta sobre el caso judicial había incomodado a Assange. Enseguida aclara que no puede hablar más del tema por consejo de sus abogados y se retira a su cuarto.
Al rato salgo a fumar un cigarrillo y al volver lo encuentro cuchicheando y sonriendo con dos colaboradoras. Les pregunto de qué hablan. Me contesta él.
“¿Viste cuando salís con una chica y a los diez minutos te das cuenta de que la cosa no va pero ya te clavaste para toda la noche? Bueno, eso me pasa con una gente que está en el otro cuarto. A los cinco minutos de empezar a hablar me di cuenta de que la cosa no va, pero se vinieron desde muy lejos para verme, y no puedo no escucharlos.”
Se ve que le gusta jugar con fuego. Me comenta que está apurado porque tiene que presentarse en la comisaría y se le está haciendo tarde. Le pregunto si lo puedo acompañar y me contesta con un no rotundo.
“Quiero escribir sobre vos”, le repito. “Para explicar lo que estás haciendo tengo que hacerlo a través de tu personaje, así llego a más gente.”
Sonríe apenas mientras sacude su cabeza. “Mi vida no es importante, lo que importa es lo que hago y lo que digo”, contesta.
Lo que hace es difundir información secreta robada. Lo que dice en sus últimas entrevistas es que ha desarrollado la teoría de lo que él llama el “periodismo científico”, esto es, periodismo que va acompañado por la documentación correspondiente, para que los lectores puedan corroborar por sí mismos, objetivamente, si el periodista está diciendo la verdad. Sus críticos señalan que el periodismo siempre se valió de documentos, y mucho más desde que estalló Internet. Assange también viene hablando de la idea de “gobierno transparente”, un gobierno que pone todos sus actos en Internet y así evita filtraciones de hackers como Assange. El año pasado Canadá y Gran Bretaña presentaron distintas iniciativas de gobierno transparente, pero hasta ahora no han hecho mucho más que anunciarlas. Otro tema que interesa a Assange es la propagación de información. Habiendo estudiado física y matemática en la Universidad de Melbourne, Assange aplica principios de esas ciencias para estudiar el impacto multiplicador de los medios de comunicación. Pero todo eso ya salió en los diarios. Lo mismo que su intrincada arquitectura informática para evitar que el gobierno de Estados Unidos cierre sus operaciones. Y su contrato millonario para escribir un libro, con el cual les paga a sus abogados. Y su tormentosa relación con los principales diarios del mundo. Ni hablar de las historias que se escribieron a partir de los documentos filtrados.
Agarro una galletita de limón y se la muestro. “Quiero escribir de esto”, le digo.
No dice que no. Se queda pensando. “Podemos hacer una entrevista por teléfono”, finalmente contesta. “Podemos hablar de la misión de Wikileaks y de la importancia de Wikileaks para la Argentina.”
Salgo a fumar otro pucho, me pierdo y aparezco sin querer en el cuarto de Assange. Al igual que el otro, este también es oscuro y despojado, con ventanal mirando al jardín y laptop sobre la mesa. Recién me doy cuenta de que me equivoqué cuando veo la chimenea encendida. Justo cuando aparece una empleada de Wikileaks y me saca presurosa, mientras
Assange va entrando desde la otra puerta.
Llega la hora del tren de las ocho y me avisan que mi visita está terminada. Pregunto si me puedo despedir de Assange y al rato aparece. Me acompaña hasta la puerta de la cocina.
“Tené cuidado, este lugar está lleno de espías”, me advierte mientras me estrecha su mano suave y fría. Las mismas dos empleadas que me fueron a buscar me llevan de vuelta a la estación ferroviaria de Beccles, un pueblito distante a cinco minutos por auto de Ellington Hall. Faltan quince minutos para que llegue el tren, 190 kilómetros hasta llegar a Londres. La estación está cerrada, el andén está vacío. Hace mucho frío.
Medianoche en Londres, alquilo un cuarto en Paddington y prendo el televisor. Acaba de empezar la revolución egipcia. La BBC entrevista a Bill Keller, editor ejecutivo de The New York Times. “En tanto los documentos que publicamos sobre Túnez fueron decisivos en la caída de Ben Alí y los egipcios declararon que su inspiración fue la revuelta de Túnez, podría decirse que los Wikileaks han tenido una incidencia fundamental sobre lo que está pasando en el mundo árabe”, declara.
El miércoles pasado la Justicia británica aceptó el pedido de extradición de Suecia y ordenó que el traslado se haga el 10 de marzo. Los abogados de Assange apelaron la decisión. Assange ha proclamado muchas veces que su objetivo es usar la transparencia para corregir injusticias. Sus enemigos sueñan con que tenga las horas contadas pero, mientras tanto y visto de cerca, todo indica que no le va nada mal.

http://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-163174-2011-02-27.html

25 de febrero de 2011

AÚN CON NUEVO GOBIERNO, LAS PERSPECTIVAS DE IRLANDA SON TAN CRUDAS COMO EN TIEMPOS DE LA GRAN HAMBRUNA DE LA PATATA

Marshall Auerback
New Deal 2.0

Cualquiera que tuviera esperanzas en que un proceso electoral en Irlanda podría suponer por lo menos el inicio de un cambio en relación con la ruinosa política que se ha puesto en marcha, tiene que estar muy decepcionado con las propuestas de “reforma” del partido de la oposición Fine Gael. Los objetivos parecen absolutamente maravillosos, pero uno se pregunta de qué forma el nuevo gobierno piensa alcanzarlos. El Irish Times publicaba la siguiente noticia:

“Fine Gael publicó su manifiesto electoral, que según el líder del partido Enda Kenny ayudará a transformar Irlanda.

Entre las propuestas contenidas en el documentos se encuentran la promesa de crear miles de nuevos puestos de trabajo, una revisión del sistema de salud pública, una reducción del número de miembros de la clase política, la protección de las pensiones públicas y de las trasferencias a los sectores más vulnerables de la sociedad y una reforma del sector público.

‘Cada sección del manifiesto ha sido preparado con el objetivo de maximizar la creación de puestos de trabajo, el crecimiento, y la transformación y modernización de nuestros servicios públicos’, afirmó Enda Kerry esta mañana.”

Suena fenomenal, ¿verdad? ¿Y cómo pretende el Fine Gael alcanzar este nirvana económico? Según publicó The Guardian:

“Un gobierno liderado por el Fine Gael se centrará en reducir el déficit público irlandés hasta el 3% del PIB en 2014, aseguró su líder Enda Kerry.

En relación con este recorte del déficit público, aseguró: ‘El pueblo irlandés no quiere ni pensar en el futuro oscuro que dibuja esta carga económica’.

Kenny aseguró que la opinión pública quiere que se afronte la cuestión del déficit nacional lo antes posible.

‘El próximo gobierno debe resolver esta situación’, afirmó. ‘Debe alejar al país de la bancarrota solucionando la crisis de la deuda sin por ello dejar de proteger a los más vulnerables y redistribuyendo la carga de forma equitativa’ ”.

En otras palabra, más del sinsentido neoliberal que ha conducido al país hacia el abismo.

Con una tasa de paro situada en el 15% del PIB, la caída del PIB acumulada más importante jamás registrada en la historia de Irlanda, el paquete de rescate de la UE y el FMI ha terminado sin duda de sellar la tumba de la República de Irlanda. El país tiene que cargar con un punitivo tipo de interés del 5,8% de un préstamo de varios miles de millones de euros, que será en su mayor parte usado para pagar a los propietarios de bonos alemanes, franceses y británicos. El contribuyente irlandés, en cambio, no va a recibir nada.

Tal y como demostró Argentina en 2001, los gobiernos soberanos no son necesariamente rehenes de los mercados financieros globales. Pueden trazar un sólido camino hacia la recuperación con políticas orientadas hacia el interior, como por ejemplo introduciendo un Programa de Empleo Garantizado, que beneficie directamente a la población protegiendo a los trabajadores más desaventajados de la devastación que genera una recesión.

Pero una condición necesaria para la salvación de Argentina fue el abandono de su régimen cambiario atado al dólar, que limitaba la capacidad de maniobra fiscal del país.

Irlanda debe hacer lo mismo. Seamos claros: no hay crisis de la deuda sin el euro. Tal y como ha señalado Bill Mitchell, Grecia tiene un ratio de deuda pública de alrededor del 144% del PIB, Italia un nivel del 118%, Bélgica del 102%, Irlanda al 98%, Francia al 83%, etc. Japón está alrededor del 204%, el Reino Unido al 74%, los EEUU al 59%, etc.

Pero contrariamente a estos tres últimos, y a pesar de afirmaciones ridículas en sentido contrario, no existe tal crisis de la deuda. ¿Por qué? La respuesta es que, tal y como señala Mitchell, “estas naciones han mantenido todas su soberanía monetaria y tienen poca o ninguna exposición externa de su deuda. Ello significa que podrán siempre encontrar la manera de cumplir con cualquier compromiso pendiente que tengan en relación con su deuda”.

Por el contrario, ninguno de los países de la UEM tienen la capacidad de cumplir con estos compromisos bajo cualquier circunstancia, porque su deuda está denominada en una “divisa extranjera”, ya que cedieron su divisa individual creando monopolios al entrar en la eurozona. En primer lugar, cedieron su soberanía monetaria al renunciar a sus divisas nacionales y adoptando una supranacional. Al divorciar sus autoridades fiscales y monetarias, han renunciado a la capacidad de su sector público de generar empleo y producción. Los países que no son soberanos está limitados en su capacidad de gastar mediante impuestos y emisión de bonos, y ello es perfectamente aplicable al caso de Irlanda, Portugal e incluso a países como Alemania o Francia.

Además, al entrar en la eurozona, estos países han adoptado también el Tratado de Maastricht, que restringe su déficit presupuestario a un máximo del 3% y su deuda al 60% del PIB. Por lo tanto, aún estando capacitados para tomar prestado y financiar su gasto a cargo del déficit como Alemania o Francia, no deben usar la política fiscal por encima de estos límites. Por supuesto que muchos lo hicieron, como Alemania y Francia. Pero si no estamos equivocados esta deflación de los ingresos domésticos será el resultado final de la contracción fiscal que colisiona con los intentos del sector privado para ahorrar, y por ello seguramente más ciudadanos desesperados tenderán a realizar actos aún más desesperados.

En resumidas cuentas, el crecimiento es necesario para reducir el déficit. El crecimiento llega con el gasto. Si el sector privado no quiere gastar un volumen suficiente para promover el crecimiento, entonces lo tiene que hacer el sector público. De lo contrario lo que se obtiene es estancamiento y un enorme déficit. Pero para poder gastar, un gobierno necesita plena soberanía fiscal. Sólo así puede el Estado darle un empujón a una economía en recesión y restaurar la confianza privada.

Pero habiendo renunciado a la soberanía fiscal, hay poca esperanza para Irlanda. La única vía de escape a este gran lío no es a través de más cansinas predicciones neoliberales ofrecidas por el Fine Gael, sino a través de la imposición de pérdidas a los tenedores de bonos. Ellos son los mismos que se enrolaron en actividades financieras especulativas y que hoy continúan pidiendo compensaciones ilimitadas a costa del pueblo irlandés por sus pérdidas en el casino.

Hasta que no se de este paso, Irlanda no tiene ninguna esperanza de poder estabilizar sus finanzas, y sus perspectivas son tan crudas como en tiempos de la gran hambruna de la patata.

Marshall Auerback, uno de los analistas económicos más respetados de los EEUU, es miembro consejero del Instituto Franklin y Eleanor Roosevelt, en donde colabora con el proyecto de política económica alternativa new deal. 2.0.

Traducción para www.sinpermiso.info: Ernest Urtasun Domènech


http://www.sinpermiso.info/textos/index.php?id=3958

23 de febrero de 2011

ENSEÑANZAS DE LAS REVOLUCIONES ÁRABES QUE MARCAN EL AUTÉNTICO COMIENZO DEL SIGLO XXI


Por Marat

Las rupturas que señalan los grandes cambios históricos tienen su propio calendario. No tienen porqué coincidir con los inicios oficiales de los años, los decenios o los siglos.

La voluntad de los pueblos y las clases populares marca su propio ritmo, atrasa o adelanta las cadencias y los tiempos y establece discontinuidades con la apariencia plana del movimiento de la Historia.

Las revoluciones árabes están alumbrando la entrada en el auténtico comienzo del siglo XXI. Y no es extraño que lo hagan al ritmo de exigencias democráticas que no se agotan, ni mucho menos, en el cambio de unos regímenes políticos despóticos por otros de corte formalmente democrático.

Tanto en Túnez, como en Egipto, en la marabunta social que avanza por Argelia, Marruecos, Libia (cuando escribo estas líneas un tambaleante Gaddafi continúa masacrando a su pueblo mediante el ametrallamiento y los bombardeos sobre la población civil y la acción de los matones del régimen), Jordania, Barhéin, Yemen y que en cualquier momento podría aparecer, con sus propias revueltas, en las corruptas monarquías del Golfo Pérsico, el clamor democrático posee componentes políticos pero también indudablemente económicos y sociales.

Ello sucede, sin embargo, en países en los que la izquierda es muy débil, siendo las  represiones a los movimientos populares que impulsó en el siglo pasado una de las razones de ello, aunque quizá no la única.

Las revueltas sociales que están convulsionando al mundo árabe, nacen de una base popular que muchos parangonan con los principios que impulsaron a la Revolución Francesa de 1789. Incluso algunos analistas ven similitudes entre los alientos de la Plaza de Tahrir y la Comuna de París de 1848. Me parece demasiado aventurado afirmar este último extremo, cuando los componentes políticos de la demanda no parecen, en estos momentos, apuntar a un cambio de régimen global; esto es, político, económico y social.

Sin embargo, lo que ha nacido como una aspiración de libertades democráticas de tipo interclasista, tiene componentes de progreso social que no deben de ser olvidados.

En Túnez, la lucha contra el derribado régimen político de Ben Alí tiene, inevitablemente, componentes antioligárquicos, en la medida en que su dictadura representaba también una opresión de clase, de los sectores económicos más poderosos de un país cuya población dedica a su alimentación básica el 70% de sus salarios.

El alza de los precios de los alimentos básicos en Argelia, Túnez y Egipto, Libia y la mayoría de los pueblos árabes, ha estado, junto a la reclamación de libertades políticas, en el germen de unas protestas que han prendido con una fuerza popular imposible si sólo se hubiera sustentando en sus exiguas clases medias, cultivadas y occidentalizadas, lo que suele ser clásico en las demandas de cambios limitados al orden político.

Los últimos días de Mubarak en el poder y su posterior caída son incomprensibles sin la entrada en escena de la clase obrera egipcia (1). La ola de huelgas y movilizaciones obreras se extendieron por todo Egipto, incorporando un impulso popular y social a las reivindicaciones que no serán sólo políticas. Durante los últimos años no ha habido día sin que varias huelgas se simultaneasen en distintos lugares del país. Lo hemos visto también en Túnez (2) y llamativamente éste es un hecho que las grandes agencias y medios de comunicación del capitalismo occidental han silenciado. Revolución democrática sí, pero dentro de un orden y sin las turbas “sans-culottes” parece ser su tácita consigna.

De la evolución de los acontecimientos, de la capacidad de los sectores que defienden un programa político que rompa con la permanencia de las oligarquías económicas en el poder, de la habilidad de éstas para perpetuarse a través de otros rostros, con el apoyo USA, del papel que jueguen los diversos grupos islámicos respecto al factor económico y social en la lucha de estas jornadas y las sucesivas, del papel de las clases populares árabes en los cambios políticos que las revoluciones en sus países están abriendo, va a depender la deriva de unas revueltas que, de momento, han puesto en cuestión la estabilidad de unos regímenes títeres del imperialismo que tanto habían afirmado los “expertos en política internacional y mundo árabe” y los tour operadores que vendían sus paquetes turísticos con el argumento de destinos tranquilos para el impasible turista occidental con la misma sensibilidad social que una ameba.

Del mismo modo que la ceguera occidental fue incapaz de prever las revueltas existen algunos exquisitos revolucionarios de salón cuya miopía política es equivalente a su reaccionarismo de fondo. Para ellos, tras las revueltas del mundo árabe sólo se esconde la mano oscura de Washington y la CIA, buscando desestabilizar a sus propios regímenes títeres, a los que nunca han cuestionado en su satrapía criminal y oligárquica (otra cuestión es el ya viejo acoso USA frente a la teocracia de los clérigos iraníes), para imponer gobiernos títeres prooccidentales. ¿Acaso Mubarak y Ben Alí no eran regímenes amigos de los USA? ¿Acaso Gaddafi no se había hecho perdonar de sus pasadas “veleidades” antiimperialistas y anticolonialistas de juventud? Habrá que ver cómo estas mentes preclaras justifican la caída del régimen de Mubarak, amigo del Estado sionista de Israel, que abre el riesgo de poner a la cabeza de playa del imperialismo occidental en el mayor brete de su historia como Estado. Lo más grave de este análisis es que, bajo un pretendido enfoque antiimperialista se esconde su más absoluta desconfianza y desprecio hacia las masas que riegan con su sangre las calles de las tiranías árabes.

Derribados los poderes de gobiernos amigos o al menos políticamente “neutralizados” (Libia está al caer) la posibilidad de nuevas orientaciones políticas más antiUSA y antisionistas no es descartable. Y ello esta vez no parece que vaya a materializarse desde el fundamentalismo islámico (salvo los riesgos no desdeñables de Argelia y de La Cirenaica en Libia) sino desde regímenes laicos.

En los procesos revolucionarios desatados en el mundo árabe juegan todos. Intereses capitalistas occidentales, Imperialismo USA (3), Israel, Irán,...pero también las masas populares tienen algo que decir en todo este nuevo estado de cosas que pone la realidad política hasta ayer conocida patas arriba. La historia no está escrita de antemano. Hay bases sociales, económicas y de clase en las revueltas. De la capacidad de unos y otros para imponer sus estrategias saldrá un nuevo orden o desorden internacional, pues el peso demográfico, político, económico y estratégico del mundo árabe no es en absoluto desdeñable y tiene repercusiones en las cancillerías de todo el mundo por cuestiones evidentes (islamismo, petróleo, inserción en la economía capitalista mundial,...). 

Es el momento de plantearse qué pueden llegar a significar estas revoluciones al inicio del siglo XXI, qué aprendizajes podemos extraer quienes luchamos por cambiar el mundo de base, qué pueden llegar a aportar en el proceso de emancipación del ser humano frente a la opresión política, económica, social, cultural o de otro tipo.

Es demasiado pronto para avanzar cualquier afirmación rotunda pero lo que sí es evidente es que, de nuevo, se muestra que el fin de la historia, teorizado por los Fukuyama de turno y los postmodernos, pasados con armas y bagajes al campo que antaño combatieron, no está, ni de lejos, escrito.

Se nos ha dicho, con el papanatismo propio de quienes confunden causa y efecto y ven en las redes sociales 2.0 los gérmenes de los cambios sociales y de la irrupción de las masas en el centro de la vida política del mundo árabe, que estas revueltas serían impensables sin Internet y las formas de comunicación inmediata de ideas, mensajes y personas que la red ofrece.

No existe revolución 2.0 porque ésta o se produce en el mundo en el que las personas habitan, la sociedad, las calles, los centros de trabajo, los barrios, el entorno político, o no existe en el mundo virtual de Internet. No es éste el lugar del combate social sino su espacio de difusión.

Son las calles las que ponen las víctimas en la revuelta, las barricadas las que se enfrentan a las fuerzas que reprimen la protesta, las movilizaciones las que conducen a la marea humana a derribar los poderes establecidos.

El ciberactivismo es útil sólo si tiene en cuenta que su fin está en el espacio de la realidad, la ocupación de lo que hoy está vacío de la fuerza social: las calles, pero también los centros de trabajo, los de enseñanza, todo aquel lugar en el que habita la razón para la rebeldía y un halito de vida que la impulse. Los gritos virtuales prenden en los oídos colectivos cuando hay un eco social, político y económico que los haga resonar. Sin que la protesta se materialice en las calles, el ciberactivismo es sólo el esfuerzo baldío de predicadores sin audiencia, un pequeño mundo endogámico que se consume en sí mismo.

Lo que nos enseñan los pueblos del mundo árabe en sus revueltas, los jóvenes airados, los estudiantes y trabajadores, los hombres y las mujeres, en sus esperanzadas protestas es que es falso que el poder sea una losa indestructible que aplasta nuestras vidas. Al poder político es posible abatirle. La divinización del poder es la ideología que nos imbuye el propio poder, dios Jano, con doble cara -perversa pero también sagrada e inconmovible como si fuera una esfinge- No lo es y los hechos lo están demostrando.

El poder puede ser derribado a través de la lucha los oprimidos. En los motivos profundos de las revueltas árabes están el anhelo de desasirse de la naturaleza tiránica del poder, incluso cuando manifiesta un simulacro democrático o popular, pero también y fundamentalmente razones de clase, económicas y sociales, como las huelgas que en muchos de los países árabes, no sólo Egipto, demuestran.

Esa lección quien primero y principalmente la está comprendiendo es la UE y los políticos de los países que la integran. El rostro de preocupación de Zapatero en TV, mientras saludaba la “buena noticia” de las revoluciones democráticas árabes, era toda una expresión simbólica de ello (4).

Nunca el eco de las revueltas sociales ha sonado tan fuerte, tan extensamente y tan cerca de la vieja Europa de los mercaderes. Más allá de los temores a que el precio del petróleo entre en un vertiginoso ascenso imparable, que golpee aún más a las economías en crisis de la UE, a que pueda rebrotar el fundamentalismo islámico en el norte de África –opción improbable pero no descartable- la razón de los silencios de la UE y específicamente de la Baronesa Catherine Ashton, Vicepresidenta de la Comisión Europea y Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad Europea, prudente hasta la inacción más incomprensible, se debe ante todo a que han comprendido que, por encima de la fuerza y las bayonetas, el poder se sostiene sobre el consentimiento de los sometidos. Basta que estos digan NO, pierdan el respeto al carácter omnímodo, omnipresente y falazmente inamovible del poder para que todo pueda ser puesto patas arriba por la arrolladora fuerza destructiva y, la vez, constructora de algo nuevo, de las masas.

Es algo que ha comprendido muy bien el sátrapa pseudodemocrático de Marruecos, Mohamed VI sentado estos días en su trono, antes sus notables del Consejo Económico y Social, diciendo que se profundizaría en la reforma democrática emprendida y en los valores de la justicia social pero “sin ceder ante la presión demagógica” (5). Así le parece la gente que el pasado domingo 20 de Febrero salió a las calles. Respecto a los valores de justicia social de los que habla sabemos bien quién es el demagogo. Veremos si cede o no ante la presión de la calle.

De la voluntad de lucha, la inteligencia y la conciencia política dependerá que caiga también el orden económico y el social, cultural y religioso, allá donde éste oprime como una tiranía más.

Las clases populares de los países árabes nos están dando una lección de lo que es tratar al poder de tú a tú, perderle el miedo y el respeto, establecer un nuevo diálogo sobre lo político en lo que la soberanía popular y el concepto de ciudadanía sean mucho más que una expresión y constituyan una voluntad colectiva de no permitir a los poderes públicos que se les trate como a súbditos.

Esto es algo que los ciudadanos y las clases populares y los trabajadores del Occidente capitalista hemos olvidado. Resignados a ver cómo el poder político se enfeuda al económico, cómo se nos roban nuestros derechos sociales y económicos sin que nuestros representantes políticos y sindicales nos permitan expresar de un modo directo nuestra opinión ante el sacrificio al que nos somete el capital y sus lacayos, hemos aceptado una supuesta realidad que se nos impone como la única posible. Y aún aquí nada está escrito que establezca de modo indiscutible que los esfuerzos de los pertinaces en que algo se mueva en nuestra vieja Europa no logren su objetivo.

Si la crisis sistémica del capitalismo continúa agudizándose, espoleada ahora por la crisis alimentaria, que afecta especialmente a los países pobres y en desarrollo pero que encarece los precios en todo el mundo, no es descartable que el ejemplo de las revueltas árabes acabe calando en la clase trabajadora europea.

Hasta el día de hoy, salvo los ejemplos de lucha griego, francés e islandés, no hemos visto respuestas, a la altura de las agresiones antisociales sufridas, en un movimiento obrero europeo domesticado y en unos sindicatos afiliados a la CES aburguesados y que son parte del poder aliado al capital.

Pero no hay nada en la Historia de la Humanidad que impida que ésta se mueva en una dirección revolucionaria, si la crisis capitalista y las contradicciones de clase continúan agudizándose. Basta con que surja la conciencia subjetiva de que este estado de cosas no puede continuar sucediendo sin la respuesta de los trabajadores, que alcancemos la convicción de que no hay salida para nuestras vidas dentro del capitalismo.

La chispa en cada país será diferente pero las razones suelen ser comunes: el expolio al que la oligarquía mundial y de cada país está sometiendo a los trabajadores. 



NOTAS:

22 de febrero de 2011

ENTREVISTA A JAMES PETRAS. MEDIO ORIENTE: REBELIÓN EN LA GRANJA


James Petras - La Haine   

Comentarios para CX36 Radio Centenario del sociólogo norteamericano, James Petras desde su huerto en Binghamton, Nueva York Estados Unidos. Lunes 21 de febrero de 2011. www.radio36.com.uy

Chury: Justamente en la presentación del espacio internacional yo estaba hablando de lo complicadas que aparecen las cosas por allá por Yemen, por Libia, por Marruecos, por Somalía después de lo Egipto que ya comentaste el otro día así que quería plantearte estos temas pero también los que tengas en elaboración.
Petras: Hay que analizar en profundidad más allá de las manifestaciones, lo que está atrás de eso. Primero, debemos entender que el proceso marcha de una forma desigual. Por ejemplo ahora en Egipto y en Túnez, que ya alcanzan a derrocar a los dictadores en la primera fase, están entrando en la segunda fase donde están exigiendo una limpieza total del Estado y los aparatos, y realizar algunos pasos hacia la democracia, no simplemente reemplazar a un gobierno autocrático con otro. En Túnez hoy hay una gran manifestación exigiendo la renuncia del gobierno de transición. Mientras en Yemen, Libia, Jordania, Argelia, Irán, Bahréin, Marruecos, están en la primer fase para transformar gobiernos monárquicos, absolutistas y represores y creo que entre los próximos gobiernos a ser afectados parece que están Libia, Bahréin y Yemen, que están a punto de caer.
Ahora, ¿qué hay detrás de todas estas manifestaciones?: En primera instancia debemos brevemente analizar las economías.
Las economías están concentradas en uno o dos sectores que generan los ingresos de gobiernos, que son el petróleo, el turismo y sectores con poco impacto sobre el empleo, principalmente no dan mucho empleo para la gran masa de jóvenes educados, universitarios y secundarios. Segundo una gran presencia de capital extranjero que desplaza a cualquier burguesía que podría fomentar pequeñas y medianas industrias porque como son países que dependen de las exportaciones, la burguesía está ausente como factor. Son las empresas del Estado controlado por una oligarquía y el capital extranjero. Es más, importan mano de obra externa de India, de Pakistán y otros países y también eso es un bloqueo para la utilización de mano de obra local.
Y tercero, utilizan soldados extranjeros, mercenarios de Pakistán y otros países africanos que no tienen ninguna relación con el pueblo.
Más allá, para proteger este sistema económico parasitario, compran muchas armas, miles de millones de dólares. En vez de invertir y diversificar la economía, estas oligarquías prefieren importar armas, montar ejércitos y policía para proteger esta economía no diversificada.
Ahora, a partir de esa economía tenemos una clase dominante cerrada, que no es realmente una clase sino que son clanes, rentistas, personas que viven de la renta y no tienen ninguna función económica que pudiéramos decir productiva. Es una burguesía lumpen que gana su dinero a partir del control del tesoro y a partir de eso utilizan los grandes ingresos concentrados para el gran consumo de lujos con docenas de casas, yates, putas y también en cuentas en el exterior. Hay miles de millones en bancos en paraísos fiscales que como decimos, es capital muerto que no afecta ninguna posibilidad para que se cree ninguna clase media. Lo que existen, que son pequeñas empresas, están totalmente bloqueadas por las importaciones que dependen de la política estatal. Y la clase media de empleados públicos está impactada por la inflación y los altos costos de mercancías que vienen del exterior.
El factor más dinámico en todo eso son los jóvenes desocupados y sub-ocupados que suman más del 60 % de la población. Es una población demográficamente muy joven, sin empleo y que enfrenta las alternativas de: o emigración, buscar salir a Europa, o rebelarse. Y frente al panorama que hemos descrito la mayoría por muchos años buscó salir; ahora esta salida es cada vez más difícil por las políticas inmigratorias de Europa y Estados Unidos. Entonces han optado por la rebelión. En todo caso muchos quieren quedarse en su país y ellos forman la fuerza motriz de toda esta movilización porque no ven ningún futuro en esta economía oligárquica, exportadora de materias primas.
Entonces tenemos esta mezcla de economía, estructura de clases y también frente a eso la falta de una salida política. Como esta oligarquía es muy reducida depende del ejército, las fuerzas represivas y como monarquías absolutistas, anacrónicas, no permiten ninguna expresión para modificar o cambiar este sistema. Simplemente son diferentes versiones de gobiernos autocráticos con una dinastía de familias que van desde el monarca o el dictador a sus hijos y los otros parientes alrededor de estos gobiernos.
Depende mucho de sectores muy atrasados, tribus, para controlar a los sectores modernos. Pero actualmente la gran mayoría de las tribus y los sectores religiosos se juntan en las protestas. Eso pone en cuestión los regímenes porque la oligarquía depende de estos sectores tradicionales para controlar y reprimir a los sectores modernos de desocupados, la clase media y los trabajadores. Y ahora como están perdiendo este eslabón, parece que todo está en cuestión.
Quiero enfatizar otra vez que muchos de los militares que utilizan estos regímenes, de los países petroleros, son mercenarios extranjeros, principalmente pakistaníes y africanos también, que los utilizan como una fuerza mercenaria.
Este proceso no puede terminar sin cambios porque las causas son estructurales. Pueden reprimir un día y otro día pero como condiciones de largo plazo, de gran alcance, perjudicando a tantos sectores, lo único que buscan estos dictadores es abrir un diálogo para conseguir frenar las movilizaciones en la calle. Pero estos diálogos no pueden ir muy lejos por las condiciones económicas que hemos comentado.

Chury: Casi todos estos países sino todos, son países satélites del imperio.
Petras: Sí, ese es el factor que debemos enfatizar. Cuando hablamos de economías de enclaves, debemos entender que esos enclaves son una forma de compartir poder entre el capital imperial y las familias. Hay una articulación entre las elites imperialistas y las clases dominantes parasitarias. Lo mismo con los militares, todos los regímenes en estas zonas compran más de 180 mil millones de dólares en armas cada año. Sólo Arabia Saudita ha firmado contratos por 70 mil millones de dólares de armas. Y ese es el gran negocio para el imperialismo en estas regiones y tiene la doble función de abrir bases militares en estos países, como tiene en Bahréin. El gran puerto de Bahréin es para las fuerzas navales de Estados Unidos en todo el golfo y lo mismo en Arabia Saudita que hay bases militares norteamericanas. Y tenemos que entender que la venta de armas es el único sector industrial importante que está creciendo un 7% el año pasado en Europa y Estados Unidos, frente al estancamiento de lo civil.
Finalmente debemos entender que el control imperial allá es tanto político como militar y económico. Una forma de imperialismo extraordinario porque no es simplemente tener una base militar o vender armas o tener un puerto naval sino también combinar eso con un control de sectores económicos importantes y mercados de ventas.
También el factor que debemos enfatizar es que estos gobiernos son colaboradores de Israel. Trabajan bajo las directrices norteamericanas de apoyar las agresiones de Israel que forma el país más influyente en la política interna de Estados Unidos. Y ahora esta política de Israel de apoyar dictadores, represores, pro norteamericanos, ha causado un enorme problemas para la Casa Blanca.
Porque por un lado los sionistas aquí presionan para que el gobierno siga apoyando a estos regímenes autocráticos mientras por otro lado los políticos profesionales dicen que mientras seguimos apoyando estos regímenes en caída para servir a Israel, estamos perdiendo todas las palancas para influir a los nuevos gobernantes que van surgiendo de los movimientos. Este es el dilema, o someterse a los sionistas y apoyar a los gobiernos represores o buscar la forma de insertarse y poner un recambio más compatible con la situación del imperio.

Chury: ¿Habrá veto del presidente Obama al presupuesto [de EE.UU.] cuando lo trate el senado?
Petras: El presupuesto está en una situación de total parálisis porque el gobierno está dividido. El Congreso controlado por los republicanos quiere profundizar los recortes en una forma muy brutal y muy extensiva afectando la seguridad social o pensiones y todos los reajustes que uno necesita frente a los altos precios. Obama no está en contra en principio, pero el ritmo de los cambios debe ser menos rápido y grande porque él tiene miedo de que si implementa la política de los republicanos en todo, va a perder un 50 % del electorado que lo votó. En ese caso, si no aprueban un nuevo financiamiento para la deuda y el funcionamiento cotidiano del gobierno, no tienen dinero para pagar a los millones de funcionarios. Y el gobierno terminará paralizado, cerrando su funcionamiento.
Eso va a crear una crisis mundial del sistema financiero y una corrida sobre el dólar porque sin más circulante, sin una aprobación del nuevo presupuesto y financiamiento, termina definitivamente de funcionar. Por eso las bolsas y los especuladores, inversionistas, están muy nerviosos porque hasta ahora el gobierno está dividido con la oposición entre los ultras y los conservadores moderados y Obama no encuentra una solución. Entonces vamos caminando hacia el abismo en este sentido.
Si el gobierno no consigue financiamiento, quiero repetir, el gobierno queda cerrado, no hay forma de continuar las funciones diarias.

Chury: Un hecho realmente grave Petras, ¿no? Sin duda alguna
Petras: Muy grave y no aparece en los grandes títulos todavía. Pero la fecha se está acercando. Simplemente unas 3 semanas hasta el 10 de Marzo que debe comenzar a funcionar el nuevo financiamiento y no aparece en el horizonte ninguna posibilidad de un arreglo. Y eso vamos a ver con más atención mientras la fecha se acerca.

Chury: Petras, muy buena la aclaración porque además seguramente muchísima gente en el mundo puede creer que lo que se está tratando es un tema doméstico, interno de los Estados Unidos, pero tú estás aclarando que la repercusión internacional es muy grande
Petras: Sí, va a afectar a todos los mercados en el mundo y podría provocar o detonar un crac en la economía mundial porque las olas van a extenderse más allá de Wall Street y Washington y el país. Van a extenderse a todas las economías vinculadas financieramente con los Estados Unidos y eso es muy grave. Debemos mantener la atención sobre lo que puede pasar. Al mismo tiempo tenemos aquí una rebelión muy significativa en el estado de Wisconsin donde ayer se movilizaron 100 mil obreros, empleados públicos, maestros, médicos y otros, en contra de un gobernante que quiere implementar la agenda de la derecha y quiere eliminar las negociaciones colectivas de los sindicatos, quiere recortar las pensiones, quiere eliminar el financiamiento de la salud por parte del estado.
En este sentido vemos otro conflicto que va más allá del Demócrata y Republicano. Por primera vez el pueblo organizado, los sindicatos locales, los empleados públicos, entran en una gran confrontación: la huelga y protesta más grande que hemos visto en más de 50 años aquí. Una huelga general del sector público contra este gobernador que trata de eliminar efectivamente a los sectores sindicales. Hablé con un sindicalista que me dijo que esta lucha es hasta la muerte porque si el gobernador consigue la aprobación de la ley, va a eliminar efectivamente el funcionamiento de los sindicatos. Más allá de los recortes está en juego el sindicalismo representativo. Entonces estamos en una situación donde la extrema derecha, controlando puestos importantes en el gobierno, ha provocado por primera vez un tipo de levantamiento popular que utiliza en algunos casos las consignas de Egipto: hablan de un levantamiento popular estilo El Cairo.

21 de febrero de 2011

HAMBRE, REVUELTAS Y MALAS PERSPECTIVAS PARA LAS COMUNIDADES MÁS VULNERABLES



Haití, Egipto, Indonesia, la India, Vietnam o Bolivia vivieron oleadas de disturbios durante el 2008 causados por el rápido aumento de los precios de alimentos básicos. El incremento de los precios de los cereales que estamos viviendo desde hace unos meses también está relacionado con las revueltas de septiembre a Mozambique o los recientes levantamientos populares contra las dictaduras de Argelia, Túnez y Egipto. La falta de acceso a los alimentos básicos puede dar alas al pueblo más oprimido para rebelarse contra las elites que permiten estas situaciones y que se lucran de ellas. No es de extrañar que las tensiones sociales crezcan viendo la evolución del Índice del Precio Mundial de los Alimentos de la FAO en los últimos meses. Este indicador, creado en 1990 registró en enero de 2011 el valor más alto de su historia, tanto a nivel real como nominal. Globalmente, a mediados de octubre de 2010 ya se habían superado los precios de la anterior crisis alimentaria.

A grandes rasgos, y siempre considerando medias mundiales, hoy la carne es un 75% más cara que en el año 2000, los productos lácteos un 130%, los cereales un 190% y el azúcar un 270%. En contraste, los salarios de las capas más empobrecidas de la población mundial han permanecido estancados durante toda la década. Las frías cifras tienen repercusiones dramáticas sobre la vida de las familias con menos recursos, que son las que destinan una proporción más alta de la renta disponible a la alimentación. Mientras en la Unión Europea se considera normal gastar entre el 12 y el 20% de la renta semanal en comida, hay sectores del proletariado industrial asiático que llegan a gastar el 70% de sus ingresos en alimentar a sus familias.

El aumento del precio del petróleo, que no parece tener que remitir a corto ni a medio plazo, hace prever una ola inflacionaria en productos de primera necesidad resultado del aumento del coste de los transportes. Asimismo, un petróleo más caro hace más atractivas las inversiones en el cultivo de vegetales destinados a la elaboración de agrocombustibles. Esto sucede en un contexto de bajas reservas de cereales. El fenómeno climático conocido como "La Niña" golpeó duramente las plantaciones del hemisferio sur mermando las cosechas del Cono Sur americano, de Australia o de Indonesia, mientras en el hemisferio norte, los incendios de Rusia reducían la producción del mayor exportador de trigo del planeta. Todo ello reduce la producción y las reservas que se destinarán a la alimentación humana durante el 2011 haciendo prever un incremento de los precios. Y si alguien es conocedor de las dinámicas de los mercados globales son los especuladores financieros que, ante estas perspectivas, no dudan en invertir en los mercados de futuros, adquiriendo derechos sobre el que aún no se ha cultivado y generando una burbuja especulativa sobre productos totalmente imprescindibles para la supervivencia. En este sentido, la especulación exagera los incrementos de precios condenando al hambre a más de mil millones de personas.

Los datos del mes de enero reflejan, sobre todo, el encarecimiento del trigo y del maíz, básicos en la dieta de gran parte del planeta. El hecho de que el arroz asiático esté en pleno proceso de recolección ha contenido el precio de este cereal, pero el sudeste asiático y la India se observan las tendencias mundiales con preocupación, previendo que el arroz no escape a las tendencias alcistas mucho tiempo más. El impacto de la última crisis alimentaria en algunos grandes países de la zona llevó a millones de familias con pocos recursos a desprenderse de activos como ahorros, tierras o pequeñas propiedades, para hacer frente a la emergencia. Sin la oportunidad de recuperarse del embate de 2007, estas familias se verán abocadas a una situación crítica.

Mientras el hambre sea tratada como un problema de seguridad alimentaria continuará sujeta a las fluctuaciones de los mercados. No se aborda la gran paradoja de que la inmensa mayoría de los mil millones de personas que pasan hambre extrema en el mundo viven o provienen del entorno rural y de la actividad agrícola. Fruto de tres décadas de imposición de modelos productivos y comerciales orientados a la exportación y al beneficio de las grandes empresas, millones de familias de todo el mundo han perdido el acceso a su modo de vida tradicional. Las políticas de modernización agrícola que se han implementado de manera clónica en todo el planeta han privatizado las tierras comunales que permitían el sustento a millones de campesinos y campesinas, y han permitido prácticas de expulsión de población rural hacia los núcleos urbanos en busca de trabajos asalariados a la industria ya los servicios. Las tres décadas de imposición del libre mercado han consolidado un régimen de explotación internacional en el que las personas trabajadoras viven pendientes de las fluctuaciones de los precios de los productos básicos e intentan satisfacer sus necesidades vitales a través de salarios de miseria.

La única salida al empobrecimiento extremo y al hambre intolerable que afecta a más de mil millones de seres humanos pasa por la recuperación de la soberanía alimentaria que, en pocas palabras y asumiendo el riesgo de simplificar en exceso, consiste en garantizar que los pueblos puedan decidir sobre sus políticas de producción agrícolas y ganaderas, la recuperación de la dimensión local de los mercados y la exclusión de los alimentos de los mecanismos de especulación internacional. La idea de soberanía alimentaria no es ninguna construcción académica o teórica y no se materializa en un modelo económico de pizarra de facultad. Surge de las vivencias de las propias comunidades de campesinas y campesinos organizados en el movimiento social más numeroso del planeta. La Vía Campesina, que articula la cooperación de grupos de productores agrícolas desde Argentina hasta Sri Lanka representando a más de 300 millones de familias, parte de la evidencia que las políticas comerciales y alimentarias mundiales están en manos de las empresas transnacionales y responden a sus intereses, y reclaman para las comunidades la recuperación de la opción democrática de mantenerse al margen de los designios del capital.


* El autor es profesor de Sociología de la UPF. Miembro de SETEM Catalunya

19 de febrero de 2011

SOBRE LA RED DE CONVERGENCIA CIUDADANA DE IU

Por Marat



Breve repaso, telegráfico, a la Red de Convergencia Ciudadana de IU:


1.-Nace como un proyecto cupular que luego se bajará a los barrios, no al revés, lo que deja a lo que en ellos se discuta ante la opción de refrendar pero no de decidir. El mismo esquema que en su día aplicó el PCE, y después IU, con la Junta Democrática de la “transición” o con las Mesas ProReferendum de la OTAN. La estructura de un OVNI: mucha cabeza y pies raquíticos debajo. No es que no sepan, es que no quieren, no sea que se les desmande el gallinero


2.-Es un intento de revitalizar una "refundación" ya teledirigida en su día por los políticos profesionales de IU, sin otros excipientes que la adhesión acrítica de notables.


3.-Su proyecto de unir a exPSOE, a sectores escorados a la derecha de la izquierda (ICV y Equo: estos últimos no se definen ideológicamente) no es precisamente propio de la "izquierda alternativa", la cuál tiene una naturaleza anticapitalista, y no simplemente eufemísticamente antineoliberal


4.-Su obsesión por hablar de enfrentamiento ante las políticas "neoliberales" ya nos habla claramente del ropaje ideológico de esta gente. No buscan un enfrentamiento contra el capitalismo sino simplemente contra el liberalismo, que nada tiene de neo-


5.-Ergo, este proyecto no pasa de ser un programa keynesiano, el mismo que el PSOE tenía antes de la crisis del capitalismo y que ha caído derrotado por la subordinación de la socialdemocracia clásica y los reformistas.


6.-Que junto a gente valiosa en sus posiciones de izquierda como Almudena Grandes o Julio Anguita se encuentren en este proyecto personajes como Luis García Montero o Santiago Carrillo, ya nos indica el alcance político del proyecto: reformismo blando ligeramente más coloreado que el PSOE, no por su rojez sino por la derechización del PSOE. Giran a la derecha y no a la izquierda para pescar votos moderados, no de lucha


7.-Una imagen vale más que mil palabras: la foto del Presidente de ATTAC-España (http://www.publico.es/espana/362148/intelectuales-impulsan-el-tea-party-de-izquierdas) entre los logos de los sindicatos que protagonizaron el Pacto Social y de las pensiones (la elección de la sede de CCOO para realizar el evento no es gratuita) nos da idea del alcance del proyecto del que venimos hablando. Y de lo que hay detrás.


Frente a las tácticas de mesas, pasillos, foto de prensa, notables y cúpulas reformistas es necesario levantar un polo anticapitalista de luchas y resistencias contra las políticas de desmantelamiento del Estado del Bienestar y de robo de los derechos de los trabajadores. Un polo anticapitalista que acumule fuerzas y vaya forjando, desde la base, no desde arriba, posiciones directamente enfrentadas al capitalismo y no simplemente al mal llamado neo-liberalismo. Un polo anticapitalista que nazca desde los movimientos sociales y el auténtico sindicalismo de clase y de combate y dispuesto, de verdad, a ser absolutamente independiente del PSOE, y no su muleta tras las próximas municipales y autonómicas, precisamente el auténtico objetivo para el que este "Tea Party antineoliberal" nace. Algo muy coherente con la obsesión de IU por cambiar la ley electoral y romper su techo de representación institucional: seguir viviendo sus dirigentes de su profesionalización política, hasta ir dando saltos individuales después al PSOE, y apoyar las prácticas liberales en las instituciones que gobiernan con este partido (ayuntamientos y CCAA)

18 de febrero de 2011

ANTIKAPITALISTAK NO ES LA "TAPADERA" DE NADIE


Ante la noticia emitida en la noche de ayer por el canal televisivo Cuatro en el informativo de la noche (http://www.cuatro.com/noticias/videos/sortu/20110217ctoultpro_61/ ), desde la organización política ANTIKAPITALISTAK deseamos expresar públicamente lo siguiente:
1.- Rechazamos cualquier vinculación de nuestra organización como supuesta “tapadera” de la izquierda abertzale para que ésta pueda ejercer su por otra parte legítimo derecho para estar presente en las próximas elecciones municipales. Nuestro proyecto político es autónomo, serio y las y los militantes que lo integramos tenemos una trayectoria propia,  pública y contrastada en el seno de la plural y multiforme izquierda alternativa vasca. No tenemos, por tanto, ningún tipo de estrategia al servicio de ninguna política,  ningún interés ajeno al que nuestro propio proyecto representa.
2.- Denunciamos la vinculación interesada y falsificada que la presunta “noticia” pretende realizar entre nuestra organización y la política electoral de la izquierda abertzale. Su difusión por parte de Cuatro, sin realizar antes ni la más elemental verificación, muestra la baja calidad de sus servicios informativos.
Denunciamos el nulo rigor periodístico mostrado por los informativos de Cuatro Televisión, que ni siquiera han sido capaces de nombrar correctamente a nuestra organización, demostrando su modelo de periodismo-basura: la necesidad de un titular y un contenido llamativo, pero vacío, sin ningún margen para el mínimo contraste requerido.
Denunciamos también la aparición de nuestra organización en los informes policiales realizados para la ilegalización del partido político SORTU. Este hecho demuestra, una vez más, la nula profesionalidad e incompetencia de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado para la defensa de derechos y libertades básicas, especialmente cuando, como ha sucedido en este caso, tienen la obsesión por buscar supuestas “pruebas” para ilegalizar a un partido, SORTU, que ha cumplido con todos y cada uno de los requerimientos exigidos por el ordenamiento legal vigente
3.- Nos reiteramos, nuevamente, en nuestro el rechazo a la antidemocrática Ley de Partidos y exigimos la legalización de SORTU como partido político y denunciamos las maniobras del Gobierno español y la fiscalía para obstaculizar la participación política y electoral de un sector importante de la ciudadanía vasca. Por todo ello, llamamos a participar en la convocatoria de manifestación “Bakerantz: legalizazioa” que recorrerá las calles de Bilbao el próximo sábado día 19.
18 de febrero de 2011.                                        Antikapitalistak

PRECIOS EN AUMENTO Y DESESTABILIZACIÓN CRECIENTE. ALIMENTOS, EGIPTO Y WALL STREET


Robert Alvarez. Sin Permiso

El alza espectacular de los precios de los alimentos está intensificando un gran acopio de descontento en Túnez, Egipto y otros lugares. Es una profunda corriente subterránea que impulsa a muchos pobres condenados a morirse de hambre a lanzarse a la calle y a la violencia. Según la Agencia alimentaria de Naciones Unidas (FAO) los precios de los alimentos están creciendo mensualmente por séptima vez consecutiva y es probable que sobrepasen el récord más alto alcanzado en diciembre 2010.






Robert Alvarez, académico senior del Institute for Policy Studies, fue asesor político senior del secretario del Departamento de Energía de 1993 a 1999.


Traducción para www.sinpermiso.info: Anna Maria Garriga
No se  entrevé el fin de esta batalla de desestabilización por la inflación de los precios de los alimentos en lugares como Egipto, donde la mitad de la renta media se la llevan los alimentos. Según el Departamento de Estado, durante los dos últimos años tuvieron lugar en el mundo más de 60 revueltas a causa de los alimentos.

En marzo 2008, un espectacular repunte de los precios de los alimentos llevó a miles de personas al borde de la inanición, a una violenta revuelta, enviando una ola de choque sísmico a través del régimen de Mubarak. Después de que los militares consiguieran distribuir suficiente trigo para atajar la revuelta, los esfuerzos del gobierno Mubarak para almacenar trigo han fracasado, puesto que los precios de los alimentos continúan elevándose a niveles récord.

Los medios de comunicación atribuyen el problema a varias razones, que van desde una demanda creciente, a cortes en los subsidios alimenticios, sequías y órdenes gubernamentales de utilizar más bio-combustible a base de semillas. Pero hay otro factor significativo en juego: la especulación desenfrenada por parte de los bancos de inversión. Como señala USA Today, en 2008, "puede que los especuladores no maniobren en Wall Street, sino que están apuntando a las semillas alimenticias".

La cuestión está en los mercados de bienes aún no regulados, introducidos por la Administración Clinton y el congreso de EEUU con la aprobación de la Ley de Modernización de Futuros de Materias Primas de 2000. Antes de esta ley, la Comisión de Intercambio de Futuros de Materias Primas (Commodity Futures Trading Commission [CFTC]) sirvió de vigilante introduciendo reglas para prevenir la distorsión o la manipulación de los precios al margen de la oferta y la demanda normales. Pero los bancos de Wall Street y empresas como ENRON y British Petroleum estaban decididos a ganar mucho más dinero a través de la especulación, eximiendo los contratos de derivados de la energía y los "swaps" con ellos relacionados, del control gubernamental.

Debido a esto, la ley del 2000 permite a entidades a quienes no les importa si la gente común tiene o no tiene cantidades suficientes de alimentos y combustible, así como a negocios dependientes de materias primas, ganar grandes cantidades de dinero apostando con el dinero de los demás.

Poco después de la aprobación de la ley del 2000 emergieron mercados "oscuros" de intercambio de futuros no regulados, especialmente el Intercontinental Exchange (ICE) de Londres, creado por Wall Street, bancos de inversión europeos y varias empresas petrolíferas. Una operación clave implica el "over the counter index trading", por la que cientos de miles de millones de dólares de fondos de pensiones, bienes soberanos y otros fondos institucionales se utilizan para inundar mercados "oscuros" de bienes para comprar y detentar contractos de futuros sin fecha de expiración o sin supervisión. Cuando llega el momento de ganar dinero apostando a la baja, estos fondos se retiran, provocando caídas de precios de los bienes e inestabilidad económica.

No se trata de transacciones habituales de "comerciantes de bienes bona fide, tales como una compañía aérea que se protege de las variaciones del precio del petróleo comprando contratos de futuros. Tal como señaló el prominente directivo de un fondo de riesgo, Michael McMasters, ante una comisión del Senado  de EEUU en 2008, esto equivale a "una forma de atesoramiento electrónico y acrecienta grandemente el efecto inflacionario del mercado. Para millones de pobres del mundo ello significa literalmente morirse de hambre"

Algunos líderes mundiales se pronuncian abiertamente contra el pernicioso papel de los mercados "oscuros" de bienes. Recientemente, el Presidente francés Sarkozy alertó, en el forum de Davos, de un crecimiento del malestar e incluso de guerra, a menos que la especulación con materias primas sea controlada, algo contra lo que luchan ferozmente Wall Street y los legisladores republicanos. La ley de reforma financiera Dodd/Frank introduce algunas restricciones en esta práctica a través de la CFTC. Concretamente, la CFTC está empezando el proceso de desbrozar los especuladores de los bancos de inversión no bona fide.

Como era de esperar, los republicanos piden que la CFTC deje de poner frenos y están planeando audiciones y legislación para contrarrestar estos esfuerzos.

El levantamiento masivo, espontáneo, de la gente común en Egipto y Oriente Medio contra sus regímenes autoritarios tiene muchas causas. Una de ellas, que merece mucha mayor atención, es la especulación desenfrenada de poderosas instituciones financieras privadas, a quienes no les preocupa que la gente se muera de hambre en el mundo ni los impactos que ello pueda tener. A causa de ello se está distorsionando la oferta global de alimentos.

17 de febrero de 2011

CÓMO HACER QUE 4 BILLONES DE DÓLARES SE DESVANEZCAN EN UN INSTANTE. OTRA NUEVA CRISIS FINANCIERA ESTÁ ASEGURADA



El 9 de agosto de 2007 hubo un episodio en un banco francés que desencadenó tal crisis financiera que acabaría llevándose por delante más de 30 billones de dólares en capital, y metiendo al planeta en la mayor recesión desde los tiempos de la Gran Depresión. El suceso en cuestión fue descrito en un discurso del director ejecutivo de Pimco Paul McCulley, en la decimonovena edición de la Annual Hyman Minsky Conference on the State of the U.S. and World Economies (Conferencia Anual Hyman Minsky sobre el estado de las economías de los EEUU y el mundo. N.delT.). Este es un extracto de la exposición de McCulley: "Si hubiera que elegir un día para lo que fue el Momento Minsky, éste fue el 9 de agosto. Y, de hecho, no ocurrió aquí en los EEUU. Ocurrió en Francia, cuando el Paribas Bank (BNP) dijo que no podía valorar los paquetes de activos hipotecarios tóxicos en tres de sus productos de inversión fuera de balance, y que debido a ello los inversores, quienes creían que podían salir en cualquier momento, estaban atrapados. Recuerdo ese día tan bien como el cumpleaños de mi hijo. Y esto último ocurre una vez al año.

Porque el desastre en cadena empezó ese día. De hecho, fue algo más tarde ese mismo mes cuando acuñé el término "Sistema Bancario Paralelo" durante el simposio anual de la FED en Jackson Hole. "Era solamente el segundo año que yo asistía al simposio. Me sentía algo sobrecogido, y básicamente me dediqué a escuchar la mayor parte de los tres días. Al final… me levanté y (parafraseando) dije 'Lo que está pasando es bien simple. Tenemos una fuga en el ‘Sistema Bancario Paralelo’ y el único interrogante es cómo de rápido va a retroalimentarse a medida que sus activos y sus obligaciones vayan regresando a los balances del sistema bancario convencional."

BNP ha estado llevando a cabo actividades de intermediación crediticia, es decir, cambiaba activos que se constituían con garantías de paquetes hipotecarios (MBS, por sus siglas en inglés) por préstamos a corto plazo en los mercados de derivados. Suena todo muy complicado, pero no es algo distinto a lo que hacen los bancos cuando toman los depósitos de sus clientes y los invierten en activos a largo plazo. La única diferencia en este caso es que estas actividades no estaban reguladas, así que no había ningún organismo del gobierno encargándose de determinar la calidad de los préstamos o asegurándose de que las distintas entidades financieras estaban suficientemente capitalizadas para cubrir las eventuales pérdidas. Esta falta de regulación acabó por tener consecuencias catastróficas para la economía mundial.

Pasó casi todo un año desde que el impago de las hipotecas subprime empezase a propagarse en masa, hasta que el mercado secundario (donde se intercambiaban estos activos "tóxicos") se colapsó. El problema era simple: nadie sabía si las hipotecas que había detrás eran o no seguras, así que se hacía imposible ponerles un precio a los activos (MBS). Ello creó lo que el profesor de Yale Gary Gorton llama un problema de e. coli (el nombre genérico para las bacterias que producen enfermedades como la salmonella. N.delT.), es decir, aunque solo se contamine una pequeña cantidad de carne, millones de libras de hamburguesas tienen que ser retiradas del mercado. La misma regla se aplica a las MBS. Nadie sabía cuáles de ellas contenían los malos préstamos, así que el mercado entero se paralizó y billones de dólares de garantías empezaron a perder valor.

Las subprime fueron la chispa que prendió la mecha, pero el mercado de las subprime no era lo suficientemente grande para hundir todo el sistema financiero. Ello requería mayores temblores en el sistema bancario paralelo. Este es un extracto del artículo de Nomi Prins que explica de cuánto dinero se trataba:

"Entre el año 2002 y el comienzo de 2008, aproximadamente 1,4 billones de dólares en hipotecas subprime correspondían a prestatarios que han quebrado como New Century Financial. Si esos préstamos fuesen nuestro único problema, sobre el papel la solución hubiese sido que el gobierno subsidiase esas hipotecas hasta un coste máximo de esos 1,4 billones de dólares. Sin embargo, y según Thomson Reuters, casi otros 14 billones de dólares en productos financieros complejos se crearon a partir de esas hipotecas, precisamente porque los fondos de inversión animaron a que se llevara a cabo tanto su producción como su dispersión. De este modo, cuando se llegó al máximo de desembolso público en julio de 2009, el gobierno había tenido que poner 17,5 billones de dólares para sostener la pirámide de Ponzi de Wall Street, en lugar de esos iniciales 1,4 billones ("Shadow Banking", Nomi Prins, The American Prospect)".

El sistema bancario paralelo se creó para que las grandes instituciones financieras que disponían de mucha liquidez tuviesen algún sitio donde poner su dinero a corto plazo y obtener la máxima rentabilidad. Por ejemplo, digamos que a Intel le sobran 25.000 millones de dólares en efectivo. Puede entregar el dinero a un intermediario financiero como Morgan Stanley a cambio de una garantía (los MBS o los ABS), y sacar a cambio un rendimiento razonable por su préstamo. Pero si aparece algún tipo de problema y se cuestiona la calidad de la garantía, entonces los bancos (en este caso Morgan Stanley) se ven forzados a llevar a cabo recortes y más recortes que pueden acabar colapsando el sistema entero. Eso es lo que pasó en el verano de 2007. Los inversores descubrieron que muchas de las subprime eran fraudulentas, así que miles de millones de dólares se retiraron rápidamente de los mercados financieros, y la FED tuvo que intervenir para evitar que el sistema se colapsara.

La regulación se establece para asegurar que el sistema funcione adecuadamente y para proteger a la gente ante el fraude. Pero la actividad bancaria es más provechosa cuando no hay reglas, así que los líderes del sector y sus grupos de presión han estado tratando de impedir los esfuerzos para introducir reformas. Y, en general, lo han conseguido. La ley Dodd-Frank (de reforma del sistema financiero) está plagada de lagunas y no resuelve realmente los problemas cruciales de la calidad de los préstamos, la disponibilidad de capital y le minoración de los riesgos. Los bancos siguen pudiendo conceder tranquilamente hipotecas a personas desempleadas con muchas posibilidades de no poder pagarlas, igual que hacían antes de la crisis. Y siguen pudiendo utilizarlas para producir complejos instrumentos de deuda sin mantener ni siquiera un mísero 5% del valor original del préstamo (esta cuestión sigue en disputa, de hecho). Además, las agencias gubernamentales no podrán forzar a las instituciones financieras a que incrementen su capitalización a pesar de que sigue habiendo el peligro de que una pequeña sacudida en el mercado pueda hacerles quebrar y poner en serio peligro el resto del sistema. Wall Street se ha salido de nuevo con la suya y ahora la oportunidad para un nuevo impulso regulador ha ya pasado.

El Presidente Barack Obama entiende donde radica el problema, pero también sabe que no va a ser reelegido sin el apoyo de Wall Street. Es por ello que hace sólo 2 semanas prometió en el Wall Street Journal que seguiría reduciendo la "gravosa" regulación que afecta a Wall Street. Su columna trataba de anticiparse a la publicación del informe final de la Comisión de Investigación de la Crisis Financiera (FCIC, Financial Crisis Inquiry Commission), el cuál posiblemente hará recomendaciones de que se refuerce la regulación pública del sector. Obama torpedeó ese esfuerzo al ponerse del lado de las grandes finanzas. Ahora es cuestión de tiempo hasta que haya otro crack.

Este es un extracto de un informe especial del Banco Federal de Nueva York sobre el sistema bancario paralelo:

"En la víspera de la crisis financiera, el volumen de crédito intermediado por el sistema bancario paralelo era próximo a los 20 billones de dólares, es decir casi el doble de los 11 billones que intermediaba el sistema bancario tradicional. Hoy, esas mismas cifras son de 16 billones y 13 billones respectivamente… la debilidad de los proveedores de fondos al por mayor no sorprende cuando solamente se dispone de muy poco capital que respalde sus carteras de activos y en cambio los inversores tienen cero tolerancia a las pérdidas ("Shadow Banking", Federal Reserve Bank of New York Staff Report)".

Así que cuando Lehman Brothers se desintegró, entre 4 y 7 billones de dólares simplemente se convirtieron en humo. ¿Cuántos millones de empleos se perdieron debido a una mala regulación? ¿Cuánto se redujo el PIB, la productividad y la riqueza nacional? ¿Cuántas personas viven ahora de los cheques de comida estatales, o duermen al raso, o tratan de evitar la quiebra de sus negocios porque unas instituciones financieras desreguladas pudieron dedicarse a la intermediación del mercado de crédito sin que el gobierno las supervisara?

Irónicamente, la Reserva de Nueva York ni siquiera trata de negar el origen del problema: la desregulación. Ahí va lo que dicen en su informe: "Manejar la regulación fue la razón última de la existencia de muchos bancos en el sistema paralelo". ¿Qué quiere decir eso? Pues que Wall Street sabe perfectamente que es más fácil ganar dinero si se quitan las reglas… las mismas reglas que protegen al público de la depredación por parte de especuladores y avariciosos.

La única forma de arreglar el sistema es someter a la necesaria regulación a cualquier institución que actúe como un banco. Sin excepciones.

Mike Whitney es un analista político independiente que vive en el estado de Washington y colabora regularmente con la revista norteamericana CounterPunch.


Fuente: http://www.counterpunch.org/whitney07292010.html
Traducción para www.sinpermiso.info: Xavier Fontcuberta i Estrada