27 de septiembre de 2016

TIEMPOS OSCUROS DE CONFUSIÓN IDEOLÓGICA

Por Marat


1.-Rotura del eje articulador del sistema-mundo capitalista
Imagínense que el mundo en el que vivimos fuera un cubo de Rubik. Imaginen que a ese cubo se le hubiera roto el eje principal (la cruceta) y que, como consecuencia, las piezas que lo componen fueran a su aire, incapaces de componer caras del mismo color y de resolver el juego en ninguna circunstancia. Posiblemente las caras acabasen desprendiéndose y las piezas saltando por los aires

El mundo jamás ha sido perfecto: enfrentamientos entre clases sociales, antagonismos entre las naciones, luchas por su cuota de poder dentro de la clase dominante, tensiones ideológicas que expresan las contradicciones anteriores,…

Pero pocas veces que no sean un fin de ciclo, una etapa agonizante hemos visto tal descoyuntamiento del orden social.

Miremos un momento a nuestro alrededor.

Una crisis capitalista que anuncia nuevas acometidas dentro de una situación económica que no sólo no remonta sino que da signos de que al estancamiento mundial le sucederá una nueva caída.

Unos Estados nacionales del primer mundo incapaces de atender al creciente empobrecimiento de sus clases trabajadoras. Su condición de Estados de la burguesía se ha plasmado al desproveer a las clases subalternas de la gran mayoría de sus conquistas históricas, amenazando con rematar la faena.

Un mundo árabe o islámico, según el caso, que se desangra en guerras causadas por un terrorismo financiado por el imperialismo; guerras que no parecen importar a casi nadie, salvo cuando esas guerras hacen que cientos de miles de sus víctimas huyan hacia Occidente y se convierten entonces en un problema. El derribo por la violencia de gobiernos laicos y la destrucción de países en estas zonas está causando un desastre tan grande que las “soluciones militares posteriores” tienen un efecto boomerang contra los países que previamente les han armado.

En América Latina, un reformismo mal disfrazado de revolucionario repite el mismo camino que en los años 20 del pasado siglo intentó en Europa la socialdemocracia. Sin radicalizar sus procesos de transformación no ha cambia ni la naturaleza del poder económico ni la de sus Estados, por mucho que sus gobiernos sean progresistas. En unos casos su proyecto se está agotando porque dependía de la suficiente capacidad económica para subvencionar a las clases populares de sus países. Mientras el dinero de la venta de sus materias primas fluyó en abundancia fue posible lograrlo. Pero eso ocurría sin que realmente se produjese un ascenso de las clases populares al poder popular, que sólo puede venir de la socialización de los medios de producción. Hoy, cuando la venta de sus materias primas (petroleo y gas) ha caído en los mercados internacionales, la presión de los sectores oligárquicos a los que se permitió organizarse y del imperialismo ha sido capaz de lanzar a una parte de los apoyos sociales de dichos gobiernos contra ellos, al descender la capacidad de sufragar el gasto social.

En Europa, el supraestado de la UE se descompone a marchas forzadas, mientras el presidente de la Comisión Europa, Junker, se presenta a sus socios carente de soluciones mágicas en medio de la mayor crisis de su historia. Una crisis de múltiples cabezas: económica, política, de identidad (Brexit, euroescépticos), de refugiados, de repliegue nacionalista,…

Las contradicciones interimperialistas entre las grandes superpotencias se dirimen en luchas por influencia económica, alianzas estratégicas variables con otras potencias de entidad menor, guerras por los recursos naturales de terceros países y amplia manipulación mundial de la opinión pública a través de sus áreas y entornos de influencia.

La presión de la propaganda, expresada en su sentido más vulgar, exigiendo alineamientos acríticos y lealtades cerradas hacia cada actor imperial es tal que sólo el palmero más entusiasta es digno de respeto dentro de cada ámbito de verdades eternas inducidas.

Llamativamente las tres superpotencias son sistemas de uno y otro modo capitalistas y forman parte del sistema-mundo capitalista. Ello no debe obviar en absoluto el hecho de que, de las tres, es con mucho EEUU la potencia más peligrosa, agresiva y provocadora tanto en lo económico, como en lo político, y en lo militar.

Asumir esto y denunciarlo no debiera nunca convertir a una parte de quienes se reclaman marxistas en voceros de las otras dos superpotencias. Esa no fue nunca la posición del sector que rompió con la socialdemocracia oponiéndose a la I GM porque comprendía que aquella era una manifestación exacerbada de las luchas dentro del imperialismo global.

Es necesario denunciar sistemáticamente la violencia terrorista del imperialismo norteamericano. El papel de Rusia y China es muchísimo menos agresivo, y sí fundamentalmente defensivo, pero eso no significa convertirse en corresponsales de dos países capitalistas que también tienen sus propios intereses económicos. Esto no debiera ser difícil de comprender desde una perspectiva comunista.

Un sentimiento de temor al futuro, de inestabilidad en el presente y de vuelta de viejos fantasmas del pasado -guerra, pobreza, fascismo, terrorismo viejo y nuevo, incluido el cibernético,...- se ha instalado en las sociedades capitalistas. El malestar social se combina con un pesimismo ante el mañana, una pasividad ante lo que ocurre, y una rabia cuya dirección puede seguir un camino muy adverso para la clase trabajadora, si ésta no toma en sus manos su propio destino y se organiza autónomamente al margen de los intereses de otras clases sociales en una estrategia de clase contra clase, de trabajo frente a capital.

El eje político ya no se alinea correctamente con el económico pero tampoco lo hace con el ideológico ni con el social.

La homeostasis del sistema-mundo capitalista (capacidad de autorregularse y mantener su equilibrio interno) consistía en una aceptable articulación de los elementos económico, social, político e ideológico.

Dentro del primer mundo, el crecimiento económico y las políticas redistributivas garantizaban altos índices de empleo, un cierto bienestar de amplios sectores de la clase trabajadora y un salario indirecto basado en los servicios públicos. El pacto capital-trabajo garantizaba la paz social, donde sindicatos y patronal, partidos conservadores y socialdemócratas eran factores clave de dicha estabilidad. En lo ideológico, el capitalismo abría ante sí un horizonte de felicidad y futuro para amplias capas de trabajadores que paulatinamente iban entrando en una cultura de consumo, simulacro de democracia social y medio de autoadscripción a una clase media a la que en realidad no pertenecían pero a la que aspiraban y con la que soñaban. La idea de ascenso social de unas generaciones a otras daba una fuerte legitimación social al sistema. El eje central que permitía que funcionara de manera armónica todo el sistema era una positiva tasa de ganancia del capital. Mientras esto se mantuviera , todo el edificio estaría sólidamente asentado.

Pero en los años 60 del pasado siglo el capital empezó a detectar problemas con el mantenimiento de su tasa de ganancia. Su capacidad productiva se había elevado mucho con equipos cada vez más sofisticados y la competencia obligaba a una innovación permanente con períodos de amortización cada vez más cortos, lo que afectaba a su rentabilidad. Algunos mercados de demanda apuntaban ya signos de madurez, al menos en los países económicamente más desarrollados.

El resto supongo que ustedes lo conocen. En los años 70 comienzan los experimentos neoliberales de los Chicago Boys, aunque para ello necesitaran hacerlo primero en la dictadura chilena, con el desmantelamiento de las pensiones públicas. Luego llegarían Thatcher y Reagan, la desregulación financiera, el desvío de parte de las ganancias de la economía productiva a la especulativa, un proceso imparable hacia la financiarización de la economía, la crisis de las punto com como antecedente de la madre de todas las crisis del capitalismo que se inició en el último trimestre del 2007 y que aún hoy arrastra el mundo, a pesar del cacareo de los apologetas del sistema que tratan de hacernos creer que lo peor ya ha pasado.

Por en medio, el hundimiento de la Unión Soviética en 1991 y antes la desaparición de la RDA irían abriendo una dinámica cuyas consecuencias no han dejado de actuar durante todo este tiempo: la desaparición de una de las federaciones de repúblicas más grandes del mundo, con la consiguiente aparición de fuertes tensiones dentro de una parte de las antiguas repúblicas; guerras internas dentro del territorio de algunas de esas repúblicas; la aparición de movimientos fundamentalistas islámicos; conflictos bélicos interétnicos que desmembraron la antigua Yugoslavia, en una dinámica que fue estimulada exteriormente por grupos terroristas financiados por fundaciones globalistas y por potencias como Alemania; movimientos nacionalistas, racistas, de extrema derecha y xenófobos en varios países del este de Europa, incluso bastante antes de la crisis de los refugiados; la unificación alemana, que pocos vieron con temor en su día pero que hoy empieza a preocupar no sólo por la fuerza con la que impone sus tesis en la UE sino por el exitoso rebrote de alternativas fascistas en el país.

Aunque el capitalismo globalizado, con la extensión de sus lacras de paro, pobreza, crimen en los negocios, parece haber ganado la partida sobre la clase trabajadora, lo ha hecho dejando un efecto de creciente deslegitimación de sus estructuras políticas

Crece la abstención en las elecciones generales , regionales y municipales en muchos países, ha crecido también en las elecciones al Parlamento Europeo en en los países que se incorporaron a la UE en 2003, 2007 y 2013.

Los Estados experimentan en los países de la UE un doble efecto, producto de dos corrientes antagónicas entre sí.

A) Desde los países, una efervescencia nacionalista que rechaza la pérdida de soberanía de los Estados, derivada del incremento de competencias por parte de las instituciones europeas.

Hasta hoy esas tensiones explican una parte importante del euroescepticismo que cuestiona el futuro de la UE -aunque éste no recoge la condena de la UE desde posiciones de clase y a la izquierda de la izquierda- y que descarga en la burocracia de Bruselas una crítica que se queda sólo a medio camino. La negación a la Unión Europea no señala que el origen de la pérdida de soberanía está en el propio sistema capitalista, que es el que se malesconde tras las instituciones políticas de la Unión. La disminución de la autoridad de los Estados da alas a los movimientos secesionistas en territorios como el de España o el Reino Unido.

B) A su vez, en la UE se producen tensiones interestatales (Norte-Sur y este de Europa vs eje alemán). Estas tensiones reflejan intereses encontrados entre algunos sectores de las burguesías de unos países frente a otros, que sus medios de comunicación azuzan. El conflicto de intereses intercapitalista hace luz de gas sobre el rechazo de clase a la Europa comunitaria. Este tipo de crítica es aún muy débil por la fragilidad, minoría y deficiencias en el análisis de la cuestión por parte las organizaciones “izquierdistas”. Muchas de esas organizaciones rechazan el euro pero no a su creadora, la UE. Otras se quedan en la superficie de la crítica, impugnando sólo a las instituciones políticas sin entrar en un análisis en profundidad del marco económico-social que las dio origen y que las sostienen, así como de sus transformaciones y su inserción en el capitalismo mundial.

Los partidos que protagonizaron durante décadas la representación política han entrado en una crisis que no están en condiciones de resolver y que amenaza con llevárselos por delante.

Los partidos comunistas fueron los primeros en sufrir esa crisis tras la implosión de la Unión Soviética. Dónde aún mantenían cierta representación (Italia, Francia, España,…) desaparecieron o están en trance de hacerlo, en algún caso mediante una metabolización postsocialdemócrata, ya que hacía tiempo que habían dejado de ser comunistas para convertirse a un parlamentarismo socialdemócrata de “izquierdas” (la socialdemocracia oficial se había vuelto ya derecha). Por muy excomunistas que fuesen ya por entonces, su raíz histórica golpeó sobre sus propias identidades y proyectos, si tenían alguno que no fuera la supervivencia de sus organizaciones y profesionales de sus aparatos. Han sobrevivido en Portugal y Grecia por su fuerte implantación militante y su trayectoria muy insertada en las luchas sociales de sus clases trabajadoras.

Las dos corrientes políticas hegemónicas en Europa, conservadores y socialdemócratas nominales, han visto laminadas sus bases sociales y políticas de una forma que amenaza su supervivencia.

En el caso de los “socialdemócratas” porque una parte de su base trabajadora ha visto su futuro y condiciones de vida amenazados y se ha a refugiado en opciones más “radicales” a un lado y otro del espectro político y porque, en la práctica son casi indistinguibles de los partidos conservadores.

En el de la derecha conservadora por la irrupción del populismo próximo a la extrema derecha (antiinmigración, xenofobia, seguridad, nacionalismo,…) o abiertamente fascista.

Esa crisis de representación, que ya no se reconoce en las organizaciones clásicas, más allá de las particularidades que afectan a cada partido, hunde sus raíces en la propia utilidad de la representación.

La crisis capitalista, y la absoluta independencia del capital respecto a la capacidad de los Estados para aparentar una mediación entre intereses sociales y económicos antagónicos, ha desnudado el auténtico carácter de clase de dichos Estados y puesto en evidencia lo que los marxistas ya sabíamos desde hace mucho tiempo: que cualquier gobierno que ejerza su mandato dentro de un aparato burocrático y legal burgués será un gobierno del capital.

Por este motivo se delatan como formas políticas inútiles para resolver las necesidades de la clases trabajadora golpeada por la crisis capitalista y como “curanderos” que aplican recetas que ahondan en el empobrecimiento de dichas clases.

2.-Viejos productos con nuevas marcas, envases y etiquetados
Los intentos de salvar a la socialdemocracia mediante formas que aparentan renovarla -Syriza, Podemos,…- están abocadas al mismo fracaso que el reformismo tradicional porque se han mostrado como instrumentos dóciles del capital, más allá de su cháchara útil para captar el voto de sectores populares con bajo nivel de conciencia sobre la ausencia de salida de la crisis dentro del marco capitalista.

Mientras el sistema necesite de la ficción democrática, requerirá del simulacro de la representación. Por este motivo necesita refrescar esa apariencia de representación a través de nuevos formatos de partidos que, en esencia, siguen vendiendo las más viejas ideologías pero con nuevos envoltorios. En Europa esa “renovación” de actores va a venir principalmente desde dos líneas políticas distintas.

-Una que hunde sus raíces en el viejo liberalismo pero que ha dado un salto más allá del grosero neoliberalismo y entra en nuevas formas de expresión política que tratan de aparentar ciertas raíces libertarias que sólo tiene en apariencia.

-Otra que supone un intento de dotar de atractivo a un fascismo que todavía no puede presentarse en su aspecto matonesco y criminal, salvo parcialmente en Grecia y en Hungría.
El liberalismo está jugando desde hace algunos años ciertas bazas de “modernización ideológica” de su deriva neoliberal, dada la mala prensa de esta última.

Aunque el capitalismo no es capaz de salir de esta crisis, que no es una crisis más, los segmentos sociales y político-ideológicas que lo ponen en tela de juicio son reducidos. Apenas se discute la “economía de mercado”, “el derecho a la libre empresa” y menos aún la sociedad de consumo, fuera de algunas condenas puramente moralistas.

Es mucho mayor el repudio al neoliberalismo. Grupos políticos, economistas, “opinadores” oficiales, etc. condenan el neoliberalismo, que es hijo del capitalismo, y no el capitalismo en sí mismo. El oportunismo político de quienes rebajan su ideología hasta el saldo por fin de existencias para que sus partidos pasen el corte parlamentario no necesita de la censura que pueda tildarles de anticomunistas. Ya se ofrecen ellos mismos como tales. Prefieren hablar en un lenguaje de cura de pueblo de avaricia, de estafa, de capitalismo salvaje y de majaderías similares para ocultar que la lógica del beneficio capitalista, que explica mucho más que la moralina beata de la crítica al neoliberalismo, se basa en la explotación del trabajador y que ésta nace de la extracción de la plusvalía al mismo.

Puesto que el neoliberalismo está desacreditado, la vía de renovación de una oferta dentro del supermercado de marcas electorales que evite la idea de igualdad material ente los seres humanos está siendo la que sigue el discurso de la “democracia participativa”, el “agorismo”, los wikipartidos”, “la wikidemocracia”, la “democracia 4.0” o la “transparencia”. Pero lo cierto es que esos no son los enunciados que se oponen a los recortes sociales y retroceso de derechos de los trabajadores, a menos que se esté actuando como la columna del capital. Este tipo de organizaciones no pueden plantear la cuestión de la desaparición de lo público de un modo directo y lanzarán sus sospechas contra el Estado, deseando un “Estado líquido” en la línea de las teorías de Bauman sobre la modernidad líquida. Este enfoque que parece conectar, aparentemente con el anarquismo, en realidad lo hace con el más rancio liberalismo de origen y complementa el papel de los neoliberales con la voladura de lo público y su privatización completa. Para borrar la sospecha de neoliberalismo modernizado reclaman la enseñanza y la sanidad públicas. Pero es sabido que las declaraciones de principios significan muy poco. También las proclama el PP mientras las destruye. Lo relevante es ocupar una parte del discurso supuestamente alternativo con contenidos ideológicos que, lejos de enfrentarse al capitalismo, lo refuerzan con la patraña de la filosofía y la “economía del bien común”, que se sustenta en la idea de un capitalismo ético, como si eso fuese posible.

Su modelo social fue el 15M en España y los movimientos Occupy en USA como disidencias controladas. Uno de sus experimentos previos fue la revolución ciudadana islandesa que nunca existió pero que tantos creyeron que había hecho algo memorable. Hoy en Islandia son muchos los desencantados con aquello como con el 15M o con los Occupy.

Sin embargo en lo político sí que han tenido algunos éxitos, sobre todo en la Europa nórdica y en algún momento en Alemania. Son los “partidos piratas”, que hacen bandera de cuestiones como el software libre, el copyleft (ley Sinde), el fomento de Internet y el libre acceso a la red, el ciberactivismo,… Son partidos que han calado fundamentalmente en los sectores jóvenes universitarios y postuniversitarios de la pequeña y mediana burguesías. Son lo que podríamos llamar la generación Erasmus, un segmento cuyos líderes no han tenido la oportunidad de ser explotados en el trabajo y de sentirse tales, bien porque han vivido de encadenar proyecto de investigación tras proyecto de investigación bien porque han vivido de negocietes asociados con las tecnologías de la información y la comunicación, en muchos casos subvencionados. En España, aunque no es miembro de ningún partido pirata, un caso muy representativo de esa generación es el concejal de Ahora Madrid Pablo Soto, un tipo que se forró creando un sistema P2P para compartir archivos (que servían para bajarse gratis películas y música) y que luego se volvió forrar con varias subvenciones por un total de 1.600.000 euros para varios negocios que resultaron ruinosos excepto para él mismo.

En España, como los “piratas” eran pocos, estaban divididos y su plan no salía adelante, se lanzó la frikada del Partido X, los de “Democracia y Punto”, apoyados por el panfleto “Público” y el digital de referencia de Soros en España, “El Diario”. Dicho “partido” estaba integrado por componentes del engendro formado en su día por liberales, anticomunistas y sectores de la extrema derecha, llamado Asociación DRY.

El ciberactivismo de la llamada “democracia participativa” no es otra cosa que la estabulización (de establo) de amplios sectores sociales en la red con el fin de lograr dos objetivos:

1) Reorientar el debate político hacia el simulacro de la “realización” de las libertades individuales en el mercado tecnológico, en una cacofonía inútil para la transformación social. La realidad es que los discursos se conforman por ghettos opináticos, excepto cuando hay una masiva inversión económica para profesionalizar community managers con el fin de lanzar un nuevo invento político, como sucedió con el 15M, DRY y Podemos en su día. En ese caso se busca crear “estados de opinión” muy amplios dentro de la red a través de una masiva repetición de mensajes muy sencillos, de modo que genere la sensación de amplio consenso.
2) Mantener una pseudoguerrilla comunicacional que, en realidad, está compuesta por ludópatas atrapados en las redes sociales y profesionales del asunto. El fin es contribuir a vaciar las calles, tras llevarles hacia proyectos (15M, 25S, el propio Podemos,…) que son callejones sin salidas.

En la actualidad, como temática que ha impactado con fuerza en España, nos encontramos la “oportuna” emergencia de los antitaurinos, animalistas, especistas y veganos con una base social muy similar a la de los piratas. Cuenta con un impresionante apoyo mediático, sobre todo en el caso de antitaurinos y animalistas y no les falta abundante financiación. El especismo se ha convertido en la ideología con pretensión hegemónica amplias capas juveniles y no tan jóvenes, lanzado por parte de quienes pretenden que se reclamen los derechos de todas las especies menos la humana a la que el capitalismo la está llevando a la destrucción. Pero hablar de esto no es moderno para este tipo de ideologías cómplices de un sistema que se niega a que se hable de sus crímenes y usa como señuelos a sus títeres tan fácilmente manipulables y tan carentes de escrúpulos que no sean respecto al maltrato animal, como si quienes no hacemos de dicha cuestión el eje central de nuestra posición política fuésemos torturadores del resto de las especies. El fanatismo del que hacen gala ha logrado convertirse en moda hasta el punto en el que personas que se dicen comunistas, patanegras M-L (línea política de la que se reclaman pero de la que desconocen todo) se definen animalistas, antitaurinos y otras simplezas semejantes. La ausencia total de formación política, la ignorancia plena de lo que significa ser comunista, unida a una frivolidad absoluta y a una devoción supina por “lo nuevo” explican este tipo de aberraciones ideológicas.

La otra línea de refresco de la oferta política del sistema capitalista es la de la renovación ideológica del fascismo, como señalábamos antes.

Bajo el paraguas del término fascista se amparan organizaciones muy variopintas.

En el caso de Francia, el fascismo intenta dotarse de una respetabilidad “republicana y moderada”, en la misma línea del experimento de Gianfranco Fini de llevar el antiguo Movimiento Social Italiano (mussoliniano) hacia la respetabilidad amable de un fascismo blando en zapatillas de andar por casa.

Un caso distinto es el de Alternativa para Alemania (AfD). Se trata de un grupo de origen euroescéptico, favorable a la salida de Alemania de la UE que en los últimos tiempos ha acentuado su carácter xenófobo y antiinmigrantes. Ha ido pasando de una defensa del liberalismo económico e incluso el ultraconsdervadurismo a posiciones abiertamente de extrema derecha. Este cambio se ha producido mediante el triunfo interno de su corriente más derechista que lo ha llegado a conectar con sectores del movimiento social racista y xenófobo PEGIDA. Pero a su vez este partido tiene el sentido de la oportunidad de enfatizar un programa social y económico de defensa del resquebrajado Estado del Bienestar alemán. Sigue la estela del nazismo cuando en la brutal crisis económica de la república de Weimar amagó por la izquierda para golpear por la derecha más criminal. Su caladero de votos no proviene solamente de liberales y CDU sino también de antiguos votantes de izquierda. Tiene una base social importante entre trabajadores precarios (minijobs), parados, autónomos, funcionarios y jubilados, los grupos más afectados por las consecuencias populares de la crisis capitalista en forma de recortes sociales, salariales y de condiciones de contratación. Baste decir que el 40% de los alemanes carece de capacidad de ahorro. Allá donde los ex comunistas se convierten en ala izquierda del sistema, fascistas y prefascistas recogen la antorcha de la protesta que acabarán proyectando sobre las bases sociales que les aúpan porque son la avanzadilla de la alternativa represora que se da a sí mismo el capital.

Si descartamos al NPD alemán y Amanecer dorado, más clásicamente nazis, el perfil del prefascismo en auge oscila entre el intento de institucionalizar su imagen, buscando un aura de respetabilidad y el de radicalizarla, “equilibrando” un discurso que enfatiza uno de los rasgos típicos del nazismo (el odio al otro) con rasgos sociales de defensa de los golpeados por la crisis, junto con un rechazo más o menos pronunciado hacia la UE y el euro. En los dos últimos aspectos, han recogido lo que las “izquierdas” han ido abandonando al pringarse en gobiernos que aplican las mismas recetas que la derecha, si no peores (Tsipras en Grecia).

Hasta ahora hemos hecho un análisis sintético de las primeras oleadas de signo neofascista y prefascista y de camuflaje remozado de un neoliberalismo cibernético porque el de aplicación práctica sufre un fuerte cuestionamiento.

Pero estoy convencido de que a esas primeras oleadas les sucederán nuevas mutaciones de los mismos discursos puesto que, profundamente adentrados en un marketing de entretenimiento a las víctimas de la crisis por parte de quienes crean y de quienes difunden las nuevas formas de alienación política del sistema capitalista, es necesario renovar la oferta hasta dar con la fórmula final que mejor les funcione.

Desconozco cuáles serán las nuevas fórmulas con las que se disfrazarán en lo sucesivo los nuevos liberales. Pero es obvio que el mando a distancia (E. Dans, R. Galli, L. Abadía,M.Varsavsky, Fundación Everis,.. ) seguirá funcionando, aunque en el caso de España serán seguramente otras caras las que les sustituyan puesto que sus conexiones con las plazas fueron ya probadas en su día.

El único punto del que tengo casi certeza es en que el componente friki para la idiotización de mentes continuará. Al fin y al cabo el frikismo está de moda y se ha revalorizado, el 4.0 es su partitura como el 15M con sus extravagancias, el Partido X primero y Podemos después, con su falta de sentido del ridículo, han sido sus melodías.

En cuanto a los fascismos de nuevo cuño, viejo producto con nuevo etiquetado, seguirán avanzando imparables penetrando ya con fuerza en campos políticos en los que no tendrían porqué entrar, si la realidad del “progresismo” y de las corrientes políticas a su izquierda no estuvieran en el estado de indigencia ideológica en el que se encuentran.

El discurso peronista de movimiento y patria del errejonismo y que es parte del código genético de Podemos convive con la reivindicación socialdemócrata hecha por Pablo Iglesias.

Quien pretenda negar la faceta peronista de Podemos debiera comprobar cuál es el discurso de Chantal Mouffe y de Ernesto Laclau de quienes Iñigo Errejón toma sus excéntricas teorías.

Quién dude de cuál era la ideología de Perón sólo debe informarse sobre las similitudes casi absolutas entre la legislación peronista de entidades gremiales de 1945 y la Carta del Lavoro mussoliniana de 1927. La representación del movimiento obrero fue “integrada” dentro de ambos proyectos políticos para un mejor control de la clase trabajadora, en el clásico esquema organicista del fascismo. Quien busque supuestos izquierdismos de Perón en los años 60 debiera analizar antes su figura en el contexto de los difíciles equilibrios políticos nacionales e internacionales de aquella época así como el peculiar potaje ideológico de la izquierda latinoamericana durante tantas décadas; potaje que aún persiste.

Es entendiendo esos dos elementos como se comprende la abundancia de casos, algunos de ellos citados incluso en medios, de ex miembros de Falange y de otros grupos ultras que se han ido incorporando a Podemos o mostrado su simpatía hacia este partido que, al fin y al cabo, como José Antonio Primo de Rivera dijo de Falange en su día, afirma no ser de derechas ni de izquierdas.

Pero mi preocupación mayor no la representa ya un partido que pierde votos en términos absolutos elección tras elección y que intenta hacer pasar sus broncas y guerras intestinas por debate abierto y fraternal. Las razones para la protesta, la lucha y la resistencia no sólo no han disminuido sino que se incrementarán pero esa “gente” no estará en ellas ni se la espera porque su dirección está compuesta por arribistas sin escrúpulos cuyos únicos objetivos son sus carreras políticas profesionales. Podemos, al vender ungüentos frente a las medidas antisociales que la burguesía ordena a los gobiernos y usar a las víctimas de las mismas de modo meramente instrumental, decepcionará y acabará por ser pasado.

3.-Penetrando con fuerza en campo enemigo
Lo que de verdad me preocupa es la penetración ideológica de la extrema derecha dentro del entorno social y político comunista.

Hace casi 9 años escribí un artículo en mi primer blog ya desaparecido, que otro blog amigo tuvo a bien recoger, titulado De Gustavo Bueno a los nazbol, pasando por todo lo que arrastran sus "discípulos"”. En dicho artículo ya denunciaba estas infiltraciones fascistas en entornos digitales de la izquierda marxista y revolucionaria. Quien leyese en su día dicho artículo, largo, como tantos míos, se encontraría con multitud de enlaces que iban desde las publicaciones de la extrema derecha a las publicaciones comunistas y similares.

Cuando un blog o una web recibe visitas, el gestor de contenidos que maneja la persona/s que lo edita/n permite ver la procedencia de esas visitas. Éste es un sutil modo por el que las páginas fascistas de aquella época captaban la atención de blogueros de izquierda. Para ello contaban con la curiosidad de la persona que administraba el blog o web de línea marxista. En muchos casos, el despistado “izquierdista” no siempre se percataba de la orientación política fascista del medio que lo enlazaba, que solía camuflarse bajo una ideología de tipo nazbol (nacionalbolchevique), en ocasiones definido como tercerposicionista o de la tercera vía. Esta ideología engañaba y sigue engañando al militante poco formado ideológica y políticamente pues no era raro que encontrase en sus publicaciones menciones a Marx, Lenin y, por supuesto, Stalin, mezcladas con otros teóricos de ideología opuesta (Ramiro Ledesma Ramos, Ezra Pound, León Degrelle, Oswald Mosley, Francis Parker Yockey, Corneliu Codreanu,…). Evidentemente no iban a citar a Adolf Hitler o a Benito Mussolini, demasiado conocidos, demasiado evidentes como nazis y fascistas y por, desgracia, los únicos referentes de esas ideologías criminales que conocen muchas personas que se identifican como comunistas.

Llegados a este punto es sencillo comprender de qué modo la persona que se dice de ideas comunistas, si carece de una sólida formación marxista, es fácilmente contaminado de conceptos y categorías de pensamiento ajenas y opuestas al marxismo y de procedencia fascista. Si además, los elementos contaminantes se los aderezaban con términos atractivos para cualquier comunista como “Antiimperialimo” (el manejo que hacen del concepto nada tiene que ver con el significado que le otorgan Lenin, Hilferding o la propia Rosa Luxemburg), o con términos evocadores como “Eurasia”, la píldora ideológica entra más fácilmente. Para los menos formados, los nacionalblocheviques y los tercerposicionistas en general empleaban imágenes y dibujos que integraban símbolos de apariencia comunistas mezclados con otros de tipo fascista o nazi. Les podré un par de ejemplos.







El término nacionalbolchevique no es nuevo. Tiene su origen en los años 20 en la URSS y alcanzó cierto relieve en la Alemania previa al ascenso de Hitler al poder. Pero se revitalizó a partir de la caída de la Unión Soviética con políticos, a la vez que intelectuales, como Eduard Limonov y Alexander Dugin, del que les hablaré más tarde.

Lo que los nazbol y tercerposicionistas hacían para penetrar en el pensamiento de los militantes comunistas lo hizo con mucha mayor destreza Gustavo Bueno Martínez, recientemente fallecido. De hecho sugiero que se lean las conexiones de pensamiento, lenguaje y hasta nombres entre Gustavo Bueno y sectores nazbol, que expuse en su día en el citado artículo.
Bueno, un hombre que empezó siendo marxista y próximo al PCE acabó siendo miembro de la Fundación Defensa de la Nación Española (DNAES), grupo ultranacionalista español. Se declaró tomista no creyente (del filósofo y teólogo Tomás de Aquino), ateo católico y nacionalista español. Sus teorías en los últimos tiempos eran un refrito reaccionario, con alguna expresión pseumarxista despojada de su significado real. Fue un protector, desde su revista El Catoblepas, de católicos, monárquicos, liberales, algunos comunistas despistados, como el ya fallecido como José María Laso, y un buen elenco de falangistas y reaccionarios.
Ligada al Catoblepas estaba un grupo de poder interno llamado “nódulo materialista”, auténtico núcleo de devotos de la teoría del “materialismo filosófico” (no confundir con el materialismo histórico ni con materialismo dialéctico marxistas) de G. Bueno. En ella estaba por aquél entonces un tipo excéntrico llamado Santiago Armesilla que editaba una publicación digital llamada “Izquierda Hispánica” (por aquello de la “Hispanidad”), un refrito de teoría bolivariana, paridas de Bueno, populismo reaccionario y neolenguaje que quería parecer marxista pero no se acercaba a este pensamiento ni de lejos.
Pues bien, el tal Armesilla hoy es militante del PCE, colabora con la Fundación de Investigaciones Marxistas (FIM), ligada al PCE, se las da de formado en el marxismo, cosa de la que no tiene ni repajolera idea, y ha escrito un vomitivo texto en una web ligada a militantes del PCE, Crónica Popular, en la que presenta a Bueno como un renovador del pensamiento marxista. Que gente como dicho sujeto esté llegando lejos en la Universidad española, y posiblemente acabe haciéndolo en la política, indica el nivel de pudrimiento intelectual y moral de ambas.
Quiero volver a Alexander Dugin, un teórico y político que empezó militando en el movimiento ultranacionalista ortodoxo y antisemita ruso Pamyat, movimiento que tuvo una deriva hacia una mezcla de elementos teóricos de la monarquía de los Romanov y el fascismo, para pasar posteriormente a ser consejero externo del Partido Comunista de la Federación Rusa (PCFR), lo que no es disonante con el fuerte componente nacionalista de dicho partido heredado del estalinismo, y acabar siendo un teórico del Partido Nacional Bolchevique. Dugin rompería después con este partido y crearía el suyo propio, Eurasia.
Dugin, frente a la tercera vía o tercerposicionismo clásico del los nazbol, sostiene una nueva teoría neofascista, la llamada Cuarta Teoría Política (superación de capitalismo, marxismo y fascismo/nazismo). Es necesario aclarar que tanto el tercerposicionismo como la Cuarta Teoría Política dicen rechazar al fascismo y el nazismo clásicos por capitalistas, lo que no es sino un modo de intentar legitimar sus ramas particulares de neofascismo o neonazismo desde una aparente izquierdización. A esta baza ya jugaron sectores del NSDAP (nazis alemanes) como el ala izquierda de Otto Strasser.
Entre ciertos sectores de la izquierda comunista española están empezando a calar las ideas de Dugin y de otros políticos y pensadores neofascistas y neonazis. La vía empleada es a través de publicaciones aún muy minoritarias en cuanto a seguimiento y lecturas pero que aplican el anzuelo de lo ruso para quienes aún se niegan a ver que este país juega su propia baza como país capitalista en la geoestrategia y la geopolítica mundiales. Es el tipo de gente capaz de considerar recomendables a Trump -Hillary Clinton me parece igual de peligrosa- y a Erdogan sencillamente porque apuestan por mejorar sus relaciones con Rusia, sin inmutarse ni tomar conciencia del carácter profundamente reaccionario y hasta criminal de los dos personajes que acabo de citar.
Una de esas publicaciones es Katehon, una web en la que basta ver la sección de vídeos para notar la presencia de Dugin o incluso la de Marine Le Pen. No falta tampoco un artículo de alabanzas al líder del partido de ultraderecha Alternativa para Alemania porque propone mejorar las relaciones con Rusia. Prefiero no seguir con las entradas que tiene esta web y que las comprueben ustedes. Entre sus autores destaca de nuevo Alexander Dugin, por encima de todos, el ultra Alain de Benoist y la publicación de extrema derecha, con colaboradores progres, El Espía Digital. Para despistar algún autor de izquierda radical. Puede que la recolección de artículos se haya hecho a partir de la libre publicación y que Katehon los haya recolectado, lo sepan sus autores o no. Pero Dugin destaca por encima de todos por el número de artículos publicados en esta web. Por último, por si quedaban dudas, en el quiénes somos las aclaran: Dugin aparece de nuevo y hay dos miembros ligados a instituciones de la iglesia ortodoxa rusa. Para dar empaque a la publicación, el resto de miembros del Consejo de la publicación aparecen muy ligados a la oficialidad institucional rusa.
En cuanto a la publicación El Espía Digital es una de esas publicaciones de la extrema derecha más extrema que anda aún enganchada con el rancio y cuartelero ¡Gibraltar español!, tal y como vemos en su petición de firmas en change.org, una de esas plataformas que hacen negocio con el ciberactivismo.
El Jano Andaluz, en un largo artículo publicado en su blog, desvela quiénes están detrás de la publicación El Espía Digital. El número de ultraderechistas en dicha publicación es inmenso, algunos como su propio director con un pasado en organizaciones nazis y neonazis violentas (Bases Autónomas, MSR,...), algo que se ha difundido ya en varios medios, hasta el punto de que ha decidido simplificar su nombre de Juan Antonio Aguilar a Juan Aguilar, en un intento por “camuflar” ese pasado. Ello no impidió que Juan Carlos Monedero le invitase en su día como tertuliano en su programa La Tuerka. ¿Responde la razón de esta entrevista a una colaboración La Tuerka-El Espía Digital por aquello de que ésta última página tiene conexiones con Hispan TV, en la que Pablo Iglesias presenta su programa Fort Apache? Lo ignoro. Juan Antonio Aguilar es también un colaborador habitual de Russia Today
No faltan militares golpistas o hijas de militares que participaron en el 23-F. Como tampoco faltan artículos, a mansalva de Alexander Dugin (112 entradas con este nombre) como tampoco del falangista y analista militar Gustavo Morales, colaborador habitual de la casa , de Hispan TV, de Russia Today (RT) y de Página Transversal, una publicación digital ligada al pensamiento nazbol, en la que tampoco falta Alexander Dugin. Los sitios recomendados por esta página son El Espía Digital, Katehon y La Cuarta Teoría Política (en español). Así uno no se pierde.
Conviene señalar que Gustavo Morales fue miembro creador de la Asociación DRY, escisión muy por la derecha de su entidad de origen, Democracia Real Ya, que era bastante de derechas. La Asociación DRY llegó a pedir relaciones políticas al Nudo Patriota Español (fascistas). Victor García, otro de los fundadores de ADRY, es o ha sido miembro de Podemos.
No quiero olvidarme tampoco, dentro de los colaboradores de El Espía Digital, Fernando J. Muniesa, Presidente del Consejo Editorial de dicha publicación.
A Fernando J. Muniesa hay quienes le acusan de ser un ex colaborador del CNI-CESID implicado en las escuchas a políticos de la Comunidad de Madrid por Encargo de Esperanza Aguirre. Igualmente diversas fuentes le vinculan también con Xavier Anglada, líder de la ultraderechista Plataforma por Cataluña (PxC), muy centrada en el rechazo hacia los inmigrantes extranjeros en ese territorio.
Puede que lo anterior no sea cierto pero sí lo es su vinculación con los servicios secretos españoles, que el mismo ha señalado en varios libros. También lo es que es el Presidente del Consejo Editorial de El Espía Digital en cuyo newsletter colabora habitualmente.
Me resulta sorprendente y preocupante que esos artículos aparezcan también publicados en un digital que se dice progresista, Diario 16. 50 artículos lleva publicados ya en él. Pero cuando se acude a ver las entradas que publica en el newsletter de El Espía Digital no aparece un enlace a Diario 16, ni siquiera la mención de que ha sido publicado en dicho medio, lo que nos lleva a pensar que el mismo artículo aparece en ambos a la vez y no es consecuencia de que un medio copie los contenidos del otro.
Con el currículo de Muniesa como espía, con las acusaciones que se han vertido sobre él, con su condición de Presidente del Consejo Editorial de El Espía Digital, no puedo menos que preguntarme qué hace este señor en Diario 16 y si este diario desconocía dicha trayectoria. Admito que yo tampoco sabía nada sobre quién era Fernando J. Muniesa hasta que me puse a escribir este largo artículo pero yo soy uno y en el diario son unos cuantos más, además de que no se empieza a escribir en un medio sin que se busquen referencias acerca de un posible colaborador. La búsqueda de datos personales en Internet de alguien que se va a incorporar a una plantilla es algo que hace cualquier empresa que se precie de ser tal desde un tamaño pequeño en adelante.
Dicho todo lo anterior, quiero explicar porqué funciona la penetración del pensamiento nazbol y reaccionario tanto de Katehon como de El Espía Digital entre un sector de personas que se consideran a sí mismas comunistas.
La histórica tradición del internacionalismo proletario sufrió tras la revolución de octubre, más marcadamente tras la muerte de Lenin, una mutación consistente en la subordinación de las organizaciones de la III Internacional a los intereses de Estado de la URSS, comprensible por el acoso externo a la revolución y por la situación posterior al ser atacado dicho país por la Alemania nazi, pero que tuvo sus efectos perniciosos en cuanto a que los objetivos internacionales de clase se identificaron con los de Estado. Habrá quien intente justificarlo en base a que dicho Estado era el primero obrero de la historia y a que su supervivencia era la base que garantizaba la expansión del socialismo en otros lugares del mundo. Pero es una tesis como mínimo falaz ya que Yalta demostró que no era así y que se pactaban repartos de influencia en Europa y la posterior doctrina de la Coexistencia Pacífica intentó pactar esto a nivel mundial, aunque algunos episodíos internacionales la rompieron ocasionalmente. Todo ello tuvo sus consecuencias sobre las organizaciones comunistas en el mundo y las posibilidades del socialismo internacional. Y si no que le pregunten al KKE (Partido Comunista de Grecia) por el rechazo de la URSS a apoyar a su organización guerrillera ELAS tras la II G.M., en cumplimiento delos acuerdos de Yalta que contrajo dicho Estado con USA y el resto de potencias vencedoras.
Esta pauta se ha mantenido mimética y acríticamente tras las desaparición de la URSS. Para muchos comunistas Rusia y sus intereses siguen representando algo parecido, a pesar de que esa visión sólo se dé en su cabeza y de que la Rusia de hoy proteja los intereses internacionales de sus oligarquías económicas a las que Putin sirve, siempre que le sustenten su concepción geostratégica mundial que, como dije anteriormente, es mucho menos agresiva que la de USA pero no por ello es progresista. Al respecto no estaría de más que quienes actúan de voceros acríticos de los intereses rusos desde una posición pretendidamente comunista conociesen cuál es la categorización que hace el KKE de este país, sus burguesías y su gobierno en el contexto de la posibilidad de una guerra, producto de las contradicciones interimperialistas.
Meta usted en las dos publicaciones digitales muchos contenidos que tengan que ver con Rusia, con sus intereses estratégicos a nivel internacional, ponga enlaces a sus publicaciones y de sus aliados y el reflejo condicionado pavloviano hará el resto. Si a ello le añade usted algún colaborador progresista o incluso marxista el resultado funcionará. Cabe preguntarse si los progresistas o los “marxistas” que colaboran en publicaciones de este tipo lo hacen a sabiendas de lo que en realidad son políticamente esos medios o no.
Toda esta infiltración de conceptos, contenidos e ideas ajenas y hasta opuestas al pensamiento marxista se hace posible por la debacle que ha sufrido el movimiento comunista internacional al menos desde el hundimiento de la Unión Soviética, cuyo efecto ha sido devastador para nosotros, independientemente de en qué corriente nos situemos. La debilidad teórica y organizativa ha hecho el resto. Comunistas políticamente muy poco formados, ideológicamente involucionados, ajenos a los fundamentos del marxismo y con un profundo sentimiento de orfandad que les ha llevado a encontrar referentes internacionales en países con gobiernos que hace 25 años sería impensable para un comunista, están siendo abducidos por el pensamiento más reaccionario. La última trinchera que necesitaba derrotar el capital a través de un refrescamiento de sus ideologías de enfrentamiento éramos nosotros y nos están destrozando y no por nuestra debilidad sino por el riesgo de que nos metabolicen, convirtiéndonos en lo que nunca hemos sido: otra cosa.
¿Alternativas frente a ello ? Creo que la denuncia de estos hechos es ya, en sí misma, una alternativa necesaria, por reducido que sea su eco receptor. En otros textos que he escrito anteriormente he planteado también algunos ejes necesarios para la recuperación del marxismo y de la identidad comunista.
Aún así, creo que sería necesario desarrollar propuestas frente a este terrible desafío; respuestas que deben ser también tarea de más comunistas que hayan detectado este riesgo tangible de involución política dentro de nuestro campo ideológico.
En cualquier caso, no descarto un segundo artículo con contenido propositivo frente a la amenaza aquí analizada.  

20 de septiembre de 2016

MI EXPERIENCIA COMO COLUMNISTA DE DIARIO 16. HASTA AQUÍ HEMOS LLEGADO

Por Marat

Toda colaboración periodística en un medio llega un día a su final. En este caso ha sucedido por decisión propia.

Antes de adentrarme en la explicación del fin de mi colaboración con Diario 16 quiero dejar claras algunas cuestiones:
  • La primera de ellas es que jamás se me censuró una coma. Es la única promesa que ha cumplido la interlocutora que se puso en contacto conmigo para ofrecerme que escribiera en el periódico.
  • La segunda es que escribir en el diario me ha permitido conectar con algunos lectores que no me conocían anteriormente. Ha sido un placer escribir también para ellos.
  • La tercera es que redactar semanalmente buscando el hilo conductor de mi ideología comunista en relación con el momento que estamos viviendo me ayudó a ir creando un discurso que se articulaba, si no de capítulo a capítulo, sí entre muchos de ellos.
  • La cuarta, ayudar a difundir las posiciones de mi organización -el Espacio de Encuentro Comunista- ya que no he escrito como articulista al margen de un pensamiento y debate ajenos sino como voz de un colectivo que iba más allá de un particular modo de ver el mundo.
En este sentido mi tarea como columnista de opinión- y algunas semanas de la sección que en cada momento me adjudicasen- no ha sido inútil ni he dejado de apreciar lo que significaba la oportunidad de ir más allá de mi blog. Estoy agradecido a aquella oportunidad, a pesar de que ha significado sobreexplotarme, engañarme y algo que explicaré más tarde, tomarme por tonto intentando hacerme comulgar con ruedas de molino.

Dicho esto, dos han sido las razones para cortar mi relación con este medio:
Me referiré a continuación a los dos puntos anteriores:

A) Trabajando gratis durante 4 meses y medio
Inicié mi andadura en Diario 16 el 21 de Mayo del presente mes, con un artículo titulado “La izquierda, desaparecida sin combate”. Una semana antes me llamaron de este periódico para ofrecerme colaborar como redactor de opinión. Según ellos, yo era un bloguero muy conocido y mi blog tenías muchas visitas. Entendí rápidamente que lo que buscaban era dar a conocer un medio que por entonces era muy desconocido y lograr incrementar el número de visitas, que es lo que atrae la publicidad a un diario de estas características, fuente de la que viven, salvo los que apuestan por la suscripción digital.

Les pregunté si pagaban por la colaboración, a lo que me aclararon que, de momento no, pero que en Julio estaba previsto revisar la situación económica del diario y empezar a pagarnos a todos los colaboradores.

De otro modo no hubiera aceptado escribir una columna semanal para éste ni para ningún otro medio de comunicación oficial y ello por variadas razones.

En primer lugar porque soy un parado de 54 años y no me puedo permitir el lujo de regalar mi esfuerzo y mi trabajo a quien se beneficiará económicamente de él. Mi condición de parado es algo que la vida me ha enseñado a guardarme ante un posible contrato porque sé por experiencia que, si no lo haces intentarán aprovecharse aún más de ti, soltándote caritativamente la calderilla que la parte contratante -en este caso, no contratante- lleva en el bolsillo para pagarse los cafés.

En segundo lugar porque creo que toda persona tiene el derecho a ser remunerado por su trabajo.

En tercero porque hacer un artículo que no se limite al tópico habitual de contar lo que ya sabe todo el mundo y analizar la realidad yendo más allá de lo aparente conlleva una labor mental que no se resuelve en media hora, soltando la primera simpleza que a uno se le ocurre.

En cuarto lugar, y me da igual que a ustedes les parezca pretencioso por mi parte, porque quien te llama para colaborar ya sabe de tu valía como articulista y no soy un meritorio que esté empezando y deba rogar que me permitan hacer currículo y aprender a juntar letras.

Pero pasaba el tiempo y lo que iba a ser en julio luego me contaron -cuando preguntaba- que iba a ser en Agosto, después en Septiembre y luego en Octubre. Cuando ves que pasan los meses, tienes que andar preguntando y, o no hay voluntad o no hay parné, es el momento en el que debes decir bon voyage. Cierto que aguanté tanto tiempo porque, al fin y al cabo, escribir allí me permitía difundir mis ideas políticas y las de mi organización, el Espacio de Encuentro Comunista, como dejaba claro en mi perfil público de Diario 16. Pero la realidad se impone: “primum vivere deinde philosophari” (“primero vivir, después filosofar”).

Cuando en la última conversación por whatsapp se me dice que esperaban tenerlo pero que “no ha habido dinero en todo este tiempo” me dije “ya está bien de hacer el canelo” y di un ultimatum que se agotaba este lunes 19 de Septiembre para que se me hiciese un contrato comercial, desvinculándome de entregar un solo artículo más si no se producía una oferta en firme. Un día después esa oferta no se ha producido. Pues bien señores, en mi hambre mando yo. Espero que nadie de Diario 16 se atreva a negarme los datos que a lo largo de este texto expongo y no me obligue a tirar de capturas de pantalla y correos, ya que por lo que no paso es porque se pretenda, además de torearme, tomarme por mentiroso.

Que si no fue posible el contrato “porque no se cerró la publicidad” en su momento, que si “no se enviaron los e-mails de contratos porque me pilló el parto” -¡Qué parto más largo! Ni que fuera la construcción e la pirámide de Keops- Hay comodines que se usan en exceso y mi interlocutora los había agotado todos, dedicada a hacer de parapeto de mis exigencias y de las que de cualquier otro que pensara que ya estaba bien de regalar su esfuerzo.

B) Tampoco es cosa de tratar una “exclusiva” como una exclusiva

Así que vamos a dar info en exclusiva”Eso me respondió la aludida por whatsapp. Porque de eso se trataba: de contar lo que otros medios no estaban contando sobre el mismo escándalo y de llegar mucho más lejos que ellos, que apenas arañaban la superficie del mismo.

La parte no contratante me dijo que podía colocarlo en “actualidad” y yo no caí en aquél momento en la trampa. 
Al verlo publicado supe que me la estaban colando porque se había desplazado la noticia del primer plano a un segundo. Había una opción mucho mejor que “actualidad” y se llamaba “nacional”. Me refiero a la parte de nacional que sitúa las noticias arriba del todo.



Les explico este concepto con unos sencillos ejemplos.


Si ustedes entran en el periódico en nacional se encontrarán algo así como esto



Esto es poner un artículo en cabecera y destacarlo en primer lugar, que es lo que se hace siempre según van entrando las noticias.



Esto no lo es



Como ven, la desproporción de protagonismo de unas y otras noticias es evidente.

Cuando al día siguiente pedí que se desplazase a cabecera, la persona a la que le hice la petición me dijo que eso no dependía de ella. Aún insistiría en ello otra vez ¿De quién dependía? ¿Acaso no entendió la importancia que podía tener la noticia para el propio medio si este escándalo se destacaba al lugar correspondiente? No sé si hizo o no la gestión. Algunos pensarán que ya poco importa pero lo cierto es que, de aquél modo, a los lectores acostumbrados a ir solo a los primeros titulares de cabecera se les estaba escamoteando el derecho a conocer la amplia trama de supuesta corruptela que aún continua dentro de la Agencia de la Vivienda Social de la Comunidad de Madrid, antes Instituto de la Vivienda de Madrid ¿No les parece que merecía un lugar más destacado? Si usted, lector, fuera director/a del periódic¿no cree que este texto era una oportunidad para dar a conocer su media una población que apenas sabde la existencia del mismo? ¿No le parece que el artículo hubiera podido darle un empujón como medio de comunicación que no se limita a contar lo que los demás estaban contando por esos días y que era ya de sobra conocido por muchos?

por supuesto destacaría la noticia en mi diario, situándola en cabecera y fijándola durante días mientras la explotaba al máximo.

Ello sucedió gracias no sólo a la gran difusión de mis lectores en redes sino también al periódico serrano, que ponía un enlace al lugar de publicación original. Cierto que lo tuitearon elogiosamente -no me gusta ser injusto- su directora y la directora de opinión, entre otras personas del entorno, la misma que intentó convencerme de que “Actualidad Nacional” era lo mismo que “Nacional”. Pero para halagos en lugar de salario estoy ya muy mayor.

Cuando un medio está empezando, tener una exclusiva es algo fundamental. Iniciarse dando a entender que vas a ir hasta el final es un modo de decir “aquí estamos quienes hacemos un periodismo sin mordazas ni miedoy dice mucho de cuál será tu evolución futura. Tratarla como una noticia más también dice mucho de ese mismo diario. Estamos hablando de un escándalo de miles de millones saqueados al vender a los fondos buitre propiedad pública.  
Si fuera el director de un diario tan desconocido, que casi todo el mundo cree que no ha vuelto a la vida, aprovecharía la ocasión de una exclusiva para sacar la cabeza por encima de la mediocre medianía del resto de la prensa. Intentaría que mi nueva directora lo diera a conocer en los medios televisivos en los que aparece habitualmente y haría que todo mi entorno apoyara la posibilidad de dar a conocer una denuncia que aportara notoriedad a mi medio.  
No fue así. El artículo fue decayendo rápidamente, con una velocidad sospechosa, a pesar de que se defendía bien en visitas. Pasó de un lugar secundario y descendiendo en posiciones dentro del digital, desplazada por la la siguiente noticia que entraba y la otra y la otra hasta desaparecer de la portada. Ya sólo quedaban como únicos medios de descubrirla las orlas de los principales colaboradores, que se encuentran a la mitad de la misma y los tuits y entradas de facebook que, a pesar de todo este “eclipsamiento”, eran muchas.  
Esto último es algo bastante curioso. Si comparan ustedes el número que aparece junto a la red social y el número de visitas que ahora mismo tiene el artículo verán que el primero es elevado para una cantidad de visitas modesta. Sí, ya sé que mucha gente comparte entradas sin leerlas pero lo cierto es que el titular invitaba mucho a la lectura.



Les sugiero que vean ustedes otros de mis artículos, si es que antes no desaparecen del medio, cosa que ignoro. Como esto ya ha sucedido, les pongo la caché correspondiente del periódico, para que vean que en élescribió 18 artículos un tal Jean Paul Marat: http://webcache.googleusercontent.com/search?q=cache:_eb_d2THpAcJ:diario16.com/author/marat/page/2/+&cd=2&hl=es&ct=clnk&gl=es  Verán que esa proporción entre redes sociales y número de lecturas existe y que, en la mayoría de los casos, a mayor difusión por redes, mayor número de lecturas. En ocasiones algunos de mis textos han estado menos presentes en redes y tuvieron más visitas. Esto es algo que le indiqué a mi interlocutora del diario mientras me juraba y perjuraba que el periódico en general había caído mucho en lecturas en verano. Mis textos, no obstante, habían tenido una buena acogida también en ese período. ¿Qué pasa, que de repente, sin que se notaran signos sociales de tal comportamiento, los lectores habíamos perdido el sentido del morbo ante un titular?

El caso es que ante mis quejas por el tratamiento dado a la exclusiva, mi interlocutora afirma que ella lo mandó a un periódico digital de la sierra madrileña, titulando la entrada del siguiente modo Diario 16 destapa un pasteleo corrupto del Instituto de la Vivienda de Madrid con Goldman Sachs”. No sé si el término “destapa” es el más adecuado. Y allí hubiera continuado sin pena ni gloria si no es porque al día siguiente (sábado 18) uno de mis lectores metió esa entrada en el agregador de noticias Menéame, convirtiéndose en la noticia más leída del domingo 19. La paradoja es que poco le faltó al Diario de la Sierra para alcanzar las visitas (4348), que son los clics del menéame, que en el momento en que escribo estas líneas tiene el artículo en Diario 16 (4768). Ironía poética de que el gran beneficiado de un texto que no promocionas sea un medio distinto al tuyo.

Por no mover, no lo movió ni siquiera el community manager que hasta el domingo 18 (cuatro días después de su publicación), a las 11y media de la noche no lo difundió con un único tuit en toda la semana, y eso porque era la segunda noticia más leída en ese mismo período. Ello sucedió gracias no sólo a la gran difusión de mis lectores en redes sino también al periódico serrano, que ponía un enlace al lugar de publicación original. Cierto que lo tuitearon elogiosamente -no me gusta ser injusto- su directora y la directora de opinión, entre otras personas del entorno, la misma que intentó convencerme de que “Actualidad Nacional” era lo mismo que “Nacional”. Pero para halagos en lugar de salario estoy ya muy mayor.


En definitiva cuando te tiras 18 semanas sin ver ni un maravedí por tu trabajo, compruebas que lo que tu interlocutora durante todo este tiempo califica como “exclusiva” se trata como una noticia más, te intenta convencer de que es una noticia que quizá no se haya leído lo esperado porque es larga y no tiene “tu formato habitual”, como si una investigación de este tipo se hubiera de limitar a 140 caracteres, estás en un medio en el que todos trabajamos gratis, según ella y, por no tener, no tiene siquiera una línea editorial identificable, es el momento de decir “bon voyage mes amis”.  
PD: Tras escribir este artículo he recibido varios mensajes privados de dos fuentes aparentemente distintas pero mucho más que "muy relacionadas". Juegan a la zanahoria y al palo. Nada que responder. Lo que tenía que decir lo he dicho aquí. Y especialmente no respondo al de la "segunda fuente" porque no soy de los que desciende al barro ni a la sordidez de las miserias humanas. Quienes juegan a eso que se queden allí. Es el lugar que les corresponde. En eso también nos diferenciamos las personas, en la materia de la que estamos hechas. 

19 de septiembre de 2016

TASA DE GANANCIA Y NEOLIBERALISMO

Alejandro Nadal. Bandera Roja Canarias

En su evolución, las economías capitalistas siempre han mostrado que su necesidad de crecer es acompañada por periodos de crisis y estancamiento. Esta es la historia del capital: que las mismas fuerzas que impulsan su desarrollo son las que conllevan un ingrediente de inestabilidad y crisis. Y la era moderna no es ninguna excepción.

El surgimiento del neoliberalismo no es el resultado del triunfo del capitalismo, como siempre se le ha presentado, sobre todo a partir del colapso de la Unión Soviética. En realidad la historia es muy diferente. El neoliberalismo es la respuesta a un gran fracaso de dimensiones históricas, a saber la incapacidad del capital para mantener tasas de ganancia adecuadas.

La economía estadounidense proporciona un excelente caso de estudio de laboratorio. Otras economías capitalistas siguen trayectorias similares. Los tiempos y magnitudes varían, pero en esencia estamos hablando de un proceso general. En Estados Unidos el capital comenzó a percatarse a finales de la década de 1960 que la tasa de ganancia ya no era lo que había sido en las dos décadas anteriores. Al tomar conciencia de este hecho el primer reflejo del capital fue el que siempre le acompaña: buscó por todos los medios a su alcance aumentar la tasa de explotación de la fuerza de trabajo. El pacto social que había mantenido mejores prestaciones salariales y sociales para la clase trabajadora y que había nacido a raíz de la Gran Depresión comenzó a ser percibido como un estorbo por la clase capitalista.

En la década de 1970 la clase capitalista comienza a desplegar una vigorosa campaña para desmantelar poco a poco ese paquete social que perduró durante la primera fase de la posguerra. El primer paso fue desencadenar una ofensiva en contra de todo lo que fuera sindicatos y oliera a organizaciones relacionadas con negociaciones salariales. El resultado es que a partir de 1973 comienza en Estados Unidos un periodo de estancamiento del salario real. Pero no tardó muchos años la clase capitalista en darse cuenta que se requería algo más.

El capital necesita expandirse constantemente. Es por así decirlo, su esencia y para lograrlo utiliza dos caminos importantes (no son los únicos). El primero consiste en eliminar las restricciones institucionales que frenan su expansión. La desregulación en todos los ámbitos, pero sobre todo en lo que concierne a la circulación del capital, fue una de las primeras prioridades en los años de 1970. El colapso del sistema de Bretton Woods abría nuevas esferas de rentabilidad, pero para aprovecharlas era necesario eliminar los obstáculos a la circulación del capital. Entre 1973 y 1995 se desencadena un gigantesco proceso para desregular la cuenta de capital de la balanza de pagos en casi todos los países del mundo.

El segundo camino consiste en ocupar los espacios de rentabilidad que anteriormente habían sido ocupados por otro tipo de arreglos institucionales. Con la privatización el capital privado irrumpió en el ámbito de todo tipo de actividades que anteriormente habían sido responsabilidad de instituciones públicas. Privatizar y desregular fueron los dos grandes arietes con los cuales el capital emprendió la ofensiva contra el antiguo pacto social heredado de la Gran Depresión.

El neoliberalismo pudo restablecer niveles más aceptables (desde la perspectiva del capital) de la tasa de ganancia. Esto es claro en las diversas mediciones sobre tasas de remuneración al capital: la caída que se registra desde 1966 se mantiene hasta los años 1980, pero se recupera entre 1984-1997. La tasa de ganancia crece 19 por ciento entre 1982 y 1997 y alcanza su punto más alto en varias décadas hacia finales del milenio. Diversos factores explican esta evolución en la tasa de ganancia, pero destacan tres: la mayor explotación de la fuerza de trabajo en Estados Unidos, la ampliación de las relaciones de explotación de otros componentes de la fuerza de trabajo a escala mundial mediante la globalización y, por supuesto, la canalización de las inversiones hacia sectores improductivos (especulación y desarrollo de bienes raíces).


Pero las fiestas no duran para siempre. A partir de 1998 la tasa de ganancia comienza a erosionarse nuevamente: en los diez años que van de 1998 a 2008 se reduce 6 por ciento. La canalización de inversiones hacia la especulación inmobiliaria y en el sector financiero puede maquillar la caída en la tasa de ganancia, pero no la puede detener. Los episodios de inflación en el precio de las acciones de las empresas de alta tecnología y después en la esfera inmobiliaria acabaron por llevar a los estallidos (y recesiones) de 2000 y ahora de 2007. La súper crisis que sufre la economía mundial el día de hoy es resultado directo de esta serie de mutaciones en las formas de acumulación de capital bajo el neoliberalismo en su afán por contrarrestar la caída en la tasa de ganancia. Desde esta perspectiva, las explicaciones de la crisis en términos de deficiencia de la demanda agregada se quedan en la superficie.

13 de septiembre de 2016

LOS MITOS DEL "MILAGRO SOCIALISTA" NORUEGO

Ariel Zunino. La Izquierda Diario

He descubierto que las raíces de nuestra vida moral están completamente podridas, que la base de nuestra sociedad está corrompida por la mentira”, escribía el noruego Henrik Ibsen en Un enemigo del pueblo. Quizás viendo un mundo que se empezaba a construir con norte en la riqueza de pocos y en base a la explotación de otros; países que aparecen como imperios construidos en base al esfuerzo nacional, pero que en realidad sus cimientos están socavadas en la rapiña de naciones más débiles y menos dotadas de recursos.

Noruega suele ser llamada “el ultimo socialismo del siglo XXI”, con un ingreso promedio de 57.300 dólares anuales por habitante, educación pública y bilingüe, uno de los impuestos a la renta más altos, una fuerte presencia del estado que garantizan seguridad social para sus habitantes y uno de los estándares de vida más altos del mundo, la ubican en el imaginario social, como un modelo al cual todos los países podrían aspirar sin la necesidad de cambiar el sistema político por uno más justo.

Hasta 1969, cuando se realizó el primer hallazgo de una gran reserva de petróleo en el mar del norte, Noruega vivía de la pesca y de una incipiente producción agropecuaria. Con un clima favorable para la producción agrícola, el problema que se le presentaba era la poca extensión de tierra y un clima duro que no permitía que se poblara la totalidad su territorio. Fue en ese año cuando los noruegos vieron que sus mares, ricos en fauna, les podían proveer del oro negro que había vuelto ricas a otras naciones.

Conocedores de que los precios del petróleo fluctuaban, en 1990 el gobierno decidió crear el Goberment Pension Found para contrarrestar las fluctuaciones futuras del precio del crudo; en realidad no es un fondo de pensiones, ya que sus ingresos no derivan del salario de los trabajadores, sino que recauda sus ingresos del excedente generado por permisos de explotación, impuestos al petróleo y dividendos por la participación del estado en la petrolera nacional STATOIL.

Statoil, la petrolera off shore mas grande del mundo

La compañía noruega de petróleo Statoil, establecida en 1972, es la mayor compañía de su país. Mientras que figura listada en la Bolsa de Valores de Nueva York, el estado noruego aún mantiene la mayor parte de su propiedad, lo que hace que pueda controlar sus operaciones alrededor del mundo.

Es la compañía con mayor cantidad de operaciones off shore del mundo, en febrero de este año compro el 11.93 % de la petrolera sueca Lundin Petroleum por 497 millones de Euros. Está presente en más de treinta países en el mundo y sus principales operaciones en América son en Brasil, en donde tiene el 60 % de participación en la cuenca de Campos y participa en un 50 % en los trabajos de exploración en Sao Bernardo, en la cuenca de espíritu Santo.

En Venezuela tiene el 9% de participación del proyecto de extracción de crudo extra pesado en la franja del Orinoco. Está intentando obtener los permisos para explotar los pozos petroleros en Anaran (Irán), en donde el costo de extracción por barril es de menos de un dólar.

La ilusión del modelo noruego

El fondo Noruego del petróleo (como se lo conoce coloquialmente), es el mayor fondo soberano del mundo. Con un valor estimado de 850.000 millones de dólares, invierte su mayoría en la bolsa, operando con un volumen que sostiene el 1,05 % de los mercados bursátiles del mundo y el 2,15 % de las reservas europeas, es decir que es el mayor propietario de valores en Europa (Dr. Javier Santiso, “Fondos soberanos”, 2012).

Gestionado por el Norges Bank Investment Management, y amparado en su increíble volumen de operaciones, durante la crisis del 2008, mientras las bolsas europeas sufrían increíbles caídas y los trabajadores de países como España, Grecia, Irlanda, Italia y Reino Unido perdían sus viviendas y sus empleos, el fondo noruego aprobó aumentar sus posiciones bursátiles de un 40 % a un 60 %. Las economías de los países más afectados por la crisis le presentaban una oportunidad única, acciones de empresas y deuda soberana en sus niveles más bajos, mercados inmobiliarios derruidos con gente desalojada de sus viviendas y bancos con grandes deudas, hacían las delicias de un fondo millonario que quería comprar bajo y vender alto.

Esta crisis, le permitió invertir 7.000 millones de euros en la bolsa española, aumentando durante el 2015 un 8,15 % su posición en este mercado y adquirir 9.412 millones de euros en bonos soberanos británicos. Es decir, hacerse acreedor de la masiva deuda externa de los países que se vieron más afectados por el derrumbe, deuda que no pesa sobre los gobiernos o sobre las grandes empresas, sino que pesan sobre la clase trabajadora de esos países.

No es difícil entender por qué Noruega presenta tan ventajosas condiciones para sus habitantes, grandes recursos naturales que representan miles de millones de dólares reinvertidos en las bolsas del mundo, una población de poco más de cinco millones de personas y una política de expansión económica a fuerza de dólares provenientes de la renta, hacen bastante simple a la ecuación.

A pesar de sus millones, Noruega se está viendo afectada por la caída del precio del petróleo y por el sacudón mundial que ocasiono el Brexit. El fondo noruego había invertido en deuda soberana británica 9.412 millones de euros y un 1 % en el mercado inmobiliario del Reino Unido, tiene una participación del 8,9 % de Great Portland Estates que es dueña de 3.700 millones de libras del desarrollo inmobiliario Ingles. La caída de la bolsa y en especial la incertidumbre que generó en el mercado inmobiliario, hicieron que en 2016 por primera vez en su historia y durante dos trimestres consecutivos, Noruega haya tenido que retirar dividendos del fondo para cubrir el déficit fiscal.

Todo este blindaje y aparente estado benefactor, muestra su verdadera cara, cuando ante el primer síntoma de recesión, la petrolera Statoil despidió a 20.000 empleados en todo el mundo. Al parecer el fondo que prometía cuidar a sus ciudadanos ante una fluctuación de los precios del petróleo, operó más preocupado por mantener márgenes altos e índices positivos.

Si una de las economías más fuertes del mundo, con altos estándares de vida, con miles de millones de dólares generados por sus enormes recursos naturales, ocupando los mayores volúmenes de operaciones en las bolsas del mundo -tal es así que cualquier amenaza noruega de retirar sus posiciones en la bolsa europea podría llegar a hundir los mercados nuevamente-, no puede garantizar el empleo a sus trabajadores, entonces no parece ser el modelo a seguir dentro del capitalismo.

De acuerdo al periodista Helge Hiram Jensen:

La única razón por la cual Noruega puede sostener su sistema, es que su micro Estado es dueño (o es adueñado por) una empresa de petróleo que lucra con el calentamiento global, y que opera en el mercado como cualquier empresa transnacional. La única razón por la cual Noruega puede controlar sus yacimientos petrolíferos es porque se alinea con EE.UU., incluso contribuyendo a guerras neo-coloniales en Afganistán o Libia.
Tal es así que en 2011 Noruega se unió a EE.UU., Reino Unido y Francia en la operación Freedom Falcon, bombardeando al pueblo libio”.

Estas economías que se pretenden proteccionistas, no son más que semi-periferias que tomando ventaja del sistema colonial, con un aparente cuidado de los suyos, explotan y rapiñan al resto de las naciones. Los increíbles volúmenes con los que opera su petrolera, socavan las soberanías de las naciones que tienen petróleo para abastecer las arcas del mayor fondo europeo que con un solo movimiento puede hundir nuevamente los mercados y arrastrar más trabajadores a la miseria.

Estos fondos son ahora los nuevos acreedores de las deudas que trabajadores británicos y españoles deberán pasar años pagando con sus salarios, las nuevas escuelas noruegas y los nuevos paraísos turísticos del norte se pueden medir con el sudor de los explotados a los que les toco estar del otro lado de la crisis, y todavía no es suficiente para garantizarle el empleo a los noruegos.

Todo esto nos plantea una pregunta: si en países ricos, que basan su subsistencia en la expoliación y el drenaje de plusvalía repatriando las remesas de utilidades de las empresas con capital noruego que están en otros países, no es posible garantizar el empleo a la totalidad de sus habitantes, y aun así debe basar su subsistencia en la explotación de otras naciones. ¿Cómo pueden sobrevivir, entonces, las demás naciones que quedan subordinadas y sin recursos?

La respuesta es que no hay un capitalismo bueno ni eficiente, un sistema que basa su misma existencia en la explotación del hombre para generar riquezas, no puede garantizar la subsistencia del género humano, y lo que se nos presenta como casos testigos de que se puede modificar el sistema sin arrancarlo de cuajo e imponer uno más justo, son apenas ilusiones, que miradas de cerca, terminan develando como el más fuerte sobrevive con la sangre del más débil, por ejemplo: el “milagro” noruego.


12 de septiembre de 2016

BRAINSTORMING

Ejercicio de brainstorming en un entorno creativo
 a cargo de expertos-jefe
Luis Casado. Alainet

Brainstorming: literalmente, ‘tormenta de ideas’. Cuando las multinacionales ven con horror que los beneficios bajan, reúnen a sus ‘genios’ con el sano propósito de estrujarles el hemisferio derecho del cerebro, y obtener las últimas gotas de creatividad. Para lograrlo, sacan a los ‘genios’ de su entorno cotidiano: la ‘investigación científica’ sugiere que eso les aviva la pensadora. De ahí que las reuniones y conferencias corporativas se desarrollen en hoteles y resorts situados lejos del mundanal ruido.

La Reserva Federal, banco central de los EEUU, fue a elucubrar nuevas ideas en Jackson Hole (Wyoming). Acompañada de un areópago de “expertos”, gente que sabe, influye y decide: banqueros centrales, agentes privados, académicos y legisladores. Ya era tiempo. Una semana antes, Kevin Warsch, ex gobernador de la FED, publicó una columna en el Wall Street Journal titulada: “La Reserva Federal necesita un Pensamiento Nuevo”.

He aquí el producto del brainstorming, una ‘tormenta de ideas’ como se pide.

Cada año los bancos centrales fijan un objetivo de tasa de inflación. La FED, el Banco Central Europeo (BCE) ponen un 2%. ¿Por qué? La respuesta es de una sencillez bíblica: ¿por qué no? De ahí que en un destello de creatividad, en una fugaz pero genial ocurrencia, alguien preguntase: “En vez de fijar un objetivo de inflación del 2%... ¿por qué no lo fijamos en 4%?”

La estupefacción de la sala fue inferior sólo a la que provocó otra idea aún más genial que la primera: “En vez de inquietarnos por el PIB… ¿por qué no nos centramos en el PIB nominal?”

Es poco probable que tales “chisperas” relancen el crecimiento y el empleo. No pocos financial experts dudan. Entre ellos John Mauldin, consultor financiero del que ya te he hablado. Y junto a Mauldin, decenas de millones de parados que buscan curro en los EEUU, en Europa, en Japón y otros lugares del mundo.

Mauldin piensa que el Simposio sólo buscaba ampliar el número de herramientas de que dispone la FED, habida cuenta que ni el relajo monetario ni la manipulación de las tasas de interés han logrado estimular la inversión. Tú me dirás que dos herramientas es poco, pero hasta ahora nadie había imaginado que necesitasen otras. La teoría económica y la ortodoxia monetarista son así: dogmáticas.

Temblando de pavor, y contra la opinión de más dogmáticos que ellos, los genios de la FED entraron en lo que llaman uncharted waters, mares desconocidos: “Si las ZIRP, tasas de interés a cero por ciento, no motivan a nadie, probemos con las NIRP, las tasas de interés negativas.”

El tema trae tela: con las NIRP un banco debe pagar para prestar plata. He aquí el mundo al revés. El griterío de los bancos es ensordecedor y alguno, para compensar, cobra hasta por el Guten morgen. El Raiffeisenbank cobrará un 0,4% anual por los depósitos que superen los € 100 mil. En vez de pagarte por tu dinero, te cobrarán por él. El mundo al revés te digo.

El BCE ya le había aplicado tan novedosa regla a los bancos privados, con la loable intención de obligarles a ofrecer créditos en vez de almacenar su liquidez en el banco central. Aun así, la banca privada no mueve pieza. De paso, los Fondos de Pensión deberán pagar por colocar tus dineritos y, en vez de hacerte ganar dinero para tu jubilación te empobrecerán cada día más.

¿No me crees? Hace algo más de una semana, el periodista Tom Keene de la Radio Bloomberg, entrevistó a Stanley Fischer, vicepresidente de la FED.

-Tom Keene: (…) “Hay un duro debate sobre la eficacia de las tasas de interés negativas para los bancos centrales, para los gobiernos y para los bancos privados. ¿Cuál es la eficacia de las tasas negativas para quien ahorra?”

-Stanley Fischer: “Bueno, claramente hay diferentes respuestas a las tasas negativas. Si Ud. es un ahorrador, es difícil lidiar con ellas, aun cuando impulsan un mejor precio de los activos. Pero nosotros consideramos todo eso. En economía tenemos que tomar soluciones intermedias todo el tiempo, y la idea es, mientras más bajas sean las tasas de interés mejor para los inversores.”

Si cotizas en una AFP, ya sabes cuál es tu triste suerte: los bancos centrales (FED, BCE, Bank of England, Bank of Japan, etc.) prefieren servir los intereses de los inversionistas, aun cuando eso signifique hundir en la miseria a millones de futuros jubilados. John Mauldin se escandaliza:

Leamos la frase de nuevo… ‘la idea es, mientras más bajas sean las tasas de interés mejor para los inversionistas.’ Están sacrificando a las familias de clase media de los EEUU, a los esforzados trabajadores que respetaron las reglas y ahorraron y se jubilaron esperando disfrutar de sus nietos y de algo de descanso, y encuentran que no pueden porque la Reserva Federal piensa que proteger a Wall Street, a los ricos inversionistas y a los bancos es más importante”.

Ya. Pero lo importante es que la caja de herramientas de la FED dispone de otro utensilio: las NIPR.

No sólo la FED: Nestlé, gigante suizo del sector agro-alimentario, obtuvo créditos a 4 años a una tasa negativa del -0,008%. Otras multinacionales se aprestan a aprovechar la ganga, mientras los analistas financieros europeos ponen el grito en el cielo. Uno de ellos publicó en marzo de este año una nota titulada: “BCE: de la estupidez de las tasas a 0% a la incuria de las tasas negativas”.

¿Quién iba a imaginar que el sueño de Keynes, “la eutanasia de los rentistas”, se cumpliría de este modo?

Por otra parte, Stanley Fischer le aseguró a Tom Keene: “Estamos en un mundo en el que (las tasas de interés negativas) parecen funcionar”. John Mauldin se pregunta: “Ah, ¿sí? ¿Para quién? ¿En qué realidad?”, antes de disparar:

Alemania está flirteando con la recesión, endeudada más allá de cualquier esperanza de salir del problema. Italia acaba de abandonar el puerto de los acuerdos Presupuestarios europeos para regresar a los agitados mares de los déficits aún más grandes, con una deuda aún mayor, compitiendo con Grecia. La deuda italiana representa hoy el 132% del PIB, y si Italia aprueba sus anunciadas políticas impositivas y de gasto fiscal, la deuda pronto llegará al 150% del PIB.”

Desolador panorama. Ahora bien, si los bancos prestan a tasas negativas, los Fondos de Pensión pagarán el pato de la boda recibiendo una remuneración aún más negativa. El futuro de los sistemas de previsión por capitalización se anuncia tormentoso.

Pero, ya se dijo, los bancos centrales disponen de una nueva y flamante herramienta. Que según Stanley Fischer –no muy seguro de sí mismo– “parece funcionar”, mientras crece el escepticismo de un lado y la certidumbre de un desastre del otro.

Ocurre que hay un precedente: Japón. El gigante asiático, tercera economía del planeta, ha conocido dos décadas de crecimiento cero. A pesar de haber inaugurado las ZIRP, y luego las NIRP, sin resultados. Nadie espera que ahora las NIRP hagan por Japón lo que no hicieron en veinte años.

La otra genialidad de Jackson Hole, el PIB nominal, tampoco ayuda. El PIB nominal evalúa el valor añadido de bienes y servicios al precio del año corriente, mientras que el PIB real lo hace al precio de un año de referencia considerado como año “base”. En otras palabras, el PIB real corrige el efecto inflacionario. Uno no ve qué cambia, a los efectos del crecimiento, medir el PIB nominal.

John Williams, presidente de la FED de San Francisco (la Reserva Federal está constituida por doce FED regionales), sugirió fijar un objetivo de inflación del 3%. El ya mencionado Kevin Warsh señala que “un cambio numérico en el objetivo de inflación no es una reforma”, agregando que “sirve como un subterfugio para distraer la atención de los errores monetarios, regulatorios y fiscales”. Ya ves el ambiente de coherencia y camaradería…

John Mauldin opina que en Jackson Hole “nadie tuvo ninguna idea nueva”. Y señala, caustico: “Para empezar, el discurso de Janet Yellen, que fue notable sólo en lo aburrido y lo poco inspirado. No entregó ninguna nueva información”. Hace unos días te comentaba que los economistas-jefe y otros “expertos” habían parado de respirar esperando la alocución de Yellen: ya ves el resultado.

Tenaz, Mauldin llama la atención sobre un elemento del discurso de Yellen que pasó inadvertido: la Footnote 8. En ella Yellen se refiere, favorablemente, a una fórmula matemática que podría poner las tasas de interés en piloto automático. Aun cuando hasta ahora no es el caso, que figure en los papeles de Yellen sugiere que su uso podría constituir otra “herramienta”.

Si conoces los Automated Trading Systems (ATS), es como para sentir escalofríos en la espalda. Los ATS son programas informáticos que ejecutan órdenes de compra/venta de cualquier activo negociable en un mercado financiero. A una velocidad inimaginable, provocando reacciones en otros ATS. En un par de ocasiones, algún bug (error de programación) ha puesto en peligro los equilibrios del mercado financiero planetario.

Que los banqueros centrales se queden sin trabajo es lo de menos. Pero ver un ejército de economistas-jefe obedecer las “señales” enviadas por un algoritmo instalado en un ordenador como el de 2001: Odisea en el Espacio…

John Mauldin precisa que si se hubiesen seguido las reglas descritas en la Footnote 8, (con un algoritmo que tomando en cuenta variables como la tasa de inflación subyacente –core PCE price index– el objetivo de inflación de la FED y la tasa de desempleo, calcula una tasa de interés óptima para los Fondos Federales), y si se aplicasen las reglas utilizadas durante la última recesión… la tasa de interés resultante hubiese sido de -9,0%.

¡Una tasa negativa de -9,0%! Vivan los automatismos y la cibernética… ¿Todo bien HAL?

El propósito es acostumbrar a todo el mundo a la idea de las tasas negativas. Marvin Goodfriend, de la Carnegie Mellon University, llamó a hacer de modo que “las tasas de interés negativas puedan estar libremente disponibles y completamente efectivas como una opción frente a una futura crisis”.

Actualmente, el BCE opera con una tasa efectiva del -0,04%, y el banco central de Suecia con una tasa del -0,05%. Vistos los resultados… no es hora de organizar un carnaval.

Christopher Sims, de la Princeton University, clausuró el Simposio de Jackson Hole. Una vez no es costumbre, un premio Nobel de economía (2011) habló de economía real. Fue para comentar la ineficacia de las políticas fiscales y las incógnitas que surgen de la compra de activos tóxicos por parte de los bancos centrales. Anota: incógnitas (misterioso, oculto, desconocido). En su día, Alan Greenspan –presidente de la FED durante 18 años– declaró que para él las tasas de interés eran una incógnita. Si a eso le sumas que los bancos centrales (FED, BCE…), gracias a sus ‘nuevas herramientas’ generan más incógnitas… quiere decir que no saben dónde están y, peor aún, no saben dónde van.

El buen Christopher Sims comenzó su discurso preguntando: “¿Por qué han sido ineficaces las políticas monetarias en los EEUU, en Europa y en Japón?”

Uno imagina que a Janet Yellen, a Mario Draghi y a Haruhiko Kuroda les debe haber dado hipo…

Ya ves, los enteraos que venden retiros espirituales, simposios, cónclaves, reuniones, conferencias, convenciones y otras juntas en hoteles caros y resorts exclusivos con el pretexto de estimularle la cafetera a los participantes, son tan estafadores como los gobernadores de los bancos centrales. Para no hablar de los economistas-jefe que viven amorrados a esa teta.

Tal vez por esa razón Thomas Jefferson dijo alguna vez:

Me parece que, de vez en cuando, una rebelión es una cosa tan buena y tan necesaria en el mundo político como las tormentas en el mundo físico.”

Ya sabes lo que te queda por hacer.

Ps: thanks to John Mauldin for his accurate sources and thoughtful comments