7 de junio de 2022

SE AGOTÓ LA BARAKA DE LA IZQUIERDA

 Por Marat

Baraka es un término árabe que significa bendición y gracia especial divina; algo así como ser un suertudo.

Sánchez ha sido desde su elección como secretario general del PSOE, su posterior defenestración, su vuelta por aclamación y su presidencia del gobierno un hombre con baraka. Y con una convicción sobre sí mismo a prueba de bombas, puñaladas y odios políticos y mediáticos que chorreaban sangre. Su proyecto era él, dentro de su línea política de la que no se ha desviado demasiado. Sus enemigos, aquellos que desean que ni siquiera el polvo de sus huesos sea encontrado un día.

Yolanda Díaz logró el mejor resultado para la izquierda gallega no sólo nacionalista sin ser ella protagonista sino una de sus principales artífices. Su inteligencia la fue convirtiendo dentro de lo que fue la galaxia Podemos hasta llevarla a una de las vicepresidencias del gobierno, Le gusta a la progresía liberal, al sindicalismo con correa de perro y a gran parte de la CEOE. No tengo claro si les gusta a los más desgraciados de los barrios. Su tiempo se ha agotado. Sus dudas hamletianas sobre cuando matar al padre y cuando plantear una propuesta propia indican que a la izquierda del PSOE no hay nada.

El tiempo de Sánchez (el PSOE no existe desde Felipe González) se agotó. El BCE cambió el rumbo. La UE ha secado el grifo. La izquierda es social cuando elcapitalismo le encarga serlo. Se disparan la inflación, los tipos de interés y una crisis en el horizonte que va dar otras cien mil vueltas a una clase trabajadora que dice ser clase media y le gusta el maltrato.

El tiempo de Yolanda Díaz se ha agotado igualmente. Dependía de lo mismo, De una recuperación que era europea pasamos a un BCE que nos habla de subidas del tipo de interés ( las hipotecas) y de inflación. Estuvo bien vender la idea de casi pleno empleo, aunque fuera un bluf, El problema no es que Yolanda Díaz disienta de sus compañeros

El problema es que entramos en una nueva fase de interpretación de lo que es válido y lo que no para cada uno. Y que lo que a muchos les pone es el fascismo de VOX, que es lo que toca en lo económico -quien no pelee contra la desigualdad que se joda cuando le vaya mal -y lo que ideológicamente hace española a la gente cutre y sucia.

Lo que viene es una inflación galopante, precios de consumo disparados, subidas brutales de los tipos de interés (las hipotecas), crisis financiera...pero, de momento, malestar social e ira mongólica sin alternativa. Matar a un político, nunca a un gran empresario o banquero. No da para más la ira. Tampoco en mayo hace 11 años. Luego despidos a mansalva, liquidación definitiva de la sanidad pública, fin del sistema de pensiones, últimos coletazos de las coberturas asistenciales,..

Nada que debiera sorprendernos en exceso. Al fin y al cabo el eñor Escrivá, ministro de la seguridad social del gobierno Sánchez ya se ha encargado de cargarse vuestras pensiones, mamones. Votad PP y VOX, que aún os irá mejor. Es lo que  pasa cuando sólo se tiene una urna por cabeza y una papeleta en la mano en lugar de luchar por dejar de ser esclavo.



6 de mayo de 2022

POR QUÉ EL FASCISMO TRIUNFARÁ

Por Marat

No es la primera vez que me acusan de derrotista. No será la última.

Sospecho que habrá quien me señale como profeta o justificador del fascismo. No me siento con ganas de justificarme. Creo que éste llegará...por precipitado de todo lo que le abrió la puerta, el liberalismo económico, y de todo lo que debió combatirlo e hizo justamente lo contrario, favorecerlo, la izquierda.

El fascismo actual ya no viste uniformes negros, grises o azules. Sólo pegan palizas cachorros del mismo de los que él reniega oficialmente. Pero eso no se ve en los medios de comunicación.

La mal llamada memoria histórica es una ficción. Quienes  podían sostenerla desde la experiencia del pasado ya han muerto. Hoy hablar de torturas, cámaras de gas, fusilamientos y cárceles es de mal gusto. 

Cuando habla de la inmigración como problema plantea la cuestión en los barrios de falsa clase media venida a menos, y de descomposición obrera donde quienes necesitan del Estado “benefactor” se enfrentan por los restos de la beneficiencia contra los que se buscan la vida conociendo todos los trucos de cómo hacerlo.

No es culpa del extranjero crear redes naturales de solidaridad. Es lo mejor de la naturaleza humana. Así aprenden los débiles a apoyarse y a encontrar su puerta de entrada al sistema; ese que les niegael derecho  a la supervivencia que proclama en sus leyes superiores.

Eso es algo que hemos perdido los de aquí. Nos va más ir a nuestra bola y, si al amigo (ya no hay vecinos) le va mal, que le den por el culo.

Hay una lógica del todos contra todos. Y una ira, mal dirigida que, si es contra el más débil, es criminal porque desprecia su condición y la causa que le hace ser lo que es, y que si es contra el fuerte sólo lo hace contra el estado de la situación y no contra lo que está detrás.

La inteligencia del fascismo está en dar respuestas simples para mentes torturadas con poca exigencia argumental. La irá no quiere saber de razones y motivos sino de culpables y horcas.

El fascismo de hoy ya no parecece una amenaza. Se habla de él como si no lo fuera, se  les normaliza y presenta como personajes que forman parte del menú de cada día.

Cuando el Huffington Post y Wyoming hacen coñas de quienes frivolizan el dolor, la muerte y los asesinatos políticos blanquean al fascismo por la vía blanda de ridicularizarlo cuando con ellos ya no toca broma alguna sino limpiar de ratas el sitio.

Ni Hitler, ni Mussolini, ni Franco, ni Putin son cómicos. Sólo los monstruos correspondientes a las sociedades que les hicieron posibles.

Enfrente tenemos a una izquierda que defiende un Estado del Bienestar que ya no existe. Una parte de esa izquierda fue artífice de su voladura.

La otra parte de esa izquierda ya no intenta asaltar el Estado capitalista (sólo los imbéciles de izquierda y derecha hacen como si creyesen tal cosa). Se conforman con mantener la ficción de Estado redistribuidor que ya no es ni siquiera benefactor.

La ira ante un futuro cada vez más precario, inseguro y de fin de la democracia de consumo, que se inició con la indignación de las clases medias, ya está llegando a las trabajadoras. Es reaccionaria. Abrazará el fascismo porque la izquierda no va a dirigirla sino a tratar de pararla mediante parches.

Si en el pasado el comunismo fue la esperanza de la humanidad quienes hoy usurpan su memoria son un fraude, sea como socialdemocracia bastarda o como el estalinismo más casposo.

Enfrente, una larga noche de oscuridad y repliegue.

La esperanza sólo podrá sostenerse sobre lo pequeño de cada acto solidario