28 de marzo de 2013

ALEMANIA ESCONDE LOS ESCÁNDALOS DE DEUTSCHE BANK POR PURO INTERÉS ECONÓMICO

El país necesita de su principal banco para engrasar las ruedas de su economía
Muchas empresas dependen de la financiación que les concede la entidad

elEconomista

La dependencia de Alemania de su principal banco, Deutsche Bank, para engrasar las ruedas de su economía ha llegado a tal punto que el país parece dispuesto a dejar en un segundo plano ciertos escándalos vinculados con la entidad para mantener las buenas relaciones. Al fin y al cabo, muchas empresas germanas dependen de la financiación de la entidad, recuerda Reuters.

Deutsche Bank es uno de los bancos investigados por los reguladores europeos y de Estados Unidos por su presunto papel en la manipulación de las tasas de interés de referencia. Además, la entidad coopera con las autoridades alemanas en una investigación independiente sobre fraude fiscal. El banco ya ha negado las acusaciones de que infravaloró derivados y malvendió valores respaldados por hipotecas.

Esta serie de acusaciones dañarían la reputación de cualquier banco, señala en un artículo Reuters. Pero el respaldo de los líderes empresariales y miembros clave del consejo de supervisión del banco parecen estar ayudando a los nuevos co-presidentes ejecutivos del banco, Anshu Jain y Juergen Fitschen, a poner los escándalos en un segundo plano paraesconderlos en cierta forma. Esta base de apoyo es crucial para Deutsche Bank, especialmente ante las próximas elecciones en Alemania.

En los próximos días se esperan nuevas informaciones sobre Deutsche Bank. El regulador alemán debe publicar un informe sobre la presunta participación del banco en la manipulación del Libor. En el informe, apunta Reuters, se pondrá a prueba el compromiso de Alemania para mantener fuerte a Deutsche Bank por el bien de su economía exportadora.

Ese compromiso es un tema común en las entrevistas que la citada agencia de noticias ha llevado a cabo con el personal de Deutsche, líderes empresariales, fuentes del regulador y directores bancarios. Varias fuentes familiarizadas con el informe del regulador han dicho que se centrará en los "fallos organizativos" en lugar de culpar a Jain o Fitschen, lo que hace menos probable que Berlín les exija que se marchen.

"El corazón industrial"
Una red de apoyo a Deutsche Bank ha surgido entre las empresas alemanas de primer orden y medianas, que han crecido muy dependientes de la financiación del banco más grande del país.
Burkhard Lohr, director financiero del Grupo K+S, proveedor de fertilizantes y sal, con actividades en Canadá, Chile y Brasil señala que la fortaleza del Deutsche Bank es vital. "Necesitamos bancos con una red global ya que nuestros mercados también son globales", explica.

Stefan Sturm, director financiero del grupo médico Fresenius SE, comparte la misma opinión. "Lo que es crucial es el capital financiero e intelectual. Particularmente en el caso de proyectos complejos que deben terminarse sin problemas y en un corto plazo de tiempo", añade.

Datos de Thomson Reuters muestran cómo el papel de Deutsche Bank como prestamista para las empresas alemanas ha aumentado desde la crisis financiera. En 2008, la entidad prestó 4.520 millones a las empresas alemanas, lo que supone una cuota de mercado del 7,23%. Cuatro años más tarde, Deutsche Bank es el segundo mayor proveedor de préstamos en Alemania detrás de Commerzbank, con un volumen de 10.820 millones de euros, o 15,9%.

La necesidad de un banco alemán global es aún más crucial para las empresas pequeñas y medianas, la columna vertebral de la economía. Éstas están altamente especializadas en exportar bienes en todo el mundo, pero no tienen la capacidad de mantener múltiples relaciones con los bancos para financiar sus exportaciones.

Anshu Jain está usando su nuevo papel para ampliar el apoyo a la "economía real" y en los círculos políticos. Desde que asumió el cargo, el pasado 1 de junio, el banquero nacido en la India se ha reunido con unos 50 mandatarios de Alemania y ha visitado Berlín alrededor de 10 veces para cumplir con políticos de alto rango.

Ganar cuota de mercado
Mientras tanto, altos funcionarios del Deutsche ven una gran oportunidad para ganar cuota de mercado. Fundamental para Jain y Fitschen, el presidente del consejo de supervisión de Deutsche Bank, Paul Achleitner, apoya su estrategia.

Exejecutivo de Goldman Sachs que ayudó a Deutsche Bank hacer una de sus mayores expansiones en banca de inversión en 1998, cuando se informó sobre un acuerdo para adquirir Bankers Trust, Achleitner es un firme creyente en un banco de inversión alemán fuerte.

"¿Queremos que Alemania sea el hogar de un importante banco de importancia global? No hay muchas empresas en el sector financiero capaces de competir con las firmas de EEUU", señala Achleitner.

Apaciguar a los dioses
Deutsche Bank tiene una relación a veces difícil con los políticos. La entidad enfureció alos legisladores el año pasado cuando se negó a enviar Jain a comparecer ante una audiencia parlamentaria sobre el escándalo Libor. El jefe de cumplimiento de normas, Stephan Leithner, fue en su lugar.

Deutsche también enfureció al ministro de Agricultura alemán y activistas contra la pobreza este año, cuando  decidió levantar una moratoria autoimpuesta en la negociación de instrumentos financieros derivados vinculados a las materias primas.

A finales del año, agentes de la Fiscalía de Francfort registraron las oficinas centrales de Deutsche Bank en el marco de una investigación por presunto fraude fiscal relacionado con la comercialización de certificados de emisiones de dióxido de carbono (CO2) que habría permitido evadir centenares de millones de euros.

La operación estaría dirigida contra 25 empleados de la entidad, sospechosos de colaborar en una red para facilitar la evasión fiscal a gran escala, el blanqueo de capitales y obstruir la acción de la Justicia. Entre los que están siendo investigados figuran el consejero delegado de Deutsche Bank, Jürgen Fitschen, y el director financiero de la entidad, Stefan Krause.

Pero incluso si Alemania pierde la paciencia con la nueva dirección del banco, muchos dentro del Deutsche Bank siguen convencidos de que será difícil sustituir a Jain yFitschen, concluye Reuters.

27 de marzo de 2013

IRAK DIEZ AÑOS DESPUÉS: EL FRACASO DE LA POLÍTICA NEOLIBERAL Y DEL ARDOR GUERRERO DE BUSH Y SUS ALIADOS

A Irak no ha llegado la democracia, ni el país ha renacido de sus ruinas, 
como predicaban quienes hace diez años propiciaron la invasión, sino que, 
por el contrario, se ha convertido en un cúmulo de ruinas y un paraíso 
de corrupción. ©Radio Nederland Wereldomroep

Mercedes Arancibia. Crónica Popular

El 20 de marzo de 2013, cuando se han cumplido exactamente diez años de la invasión de Irak por la coalición encabezada por los Estados Unidos de George W. Bush (de inolvidable memoria), y secundada por los palanganeros Tony Blair y J.M. Aznar más Durao Barroso que les prestó la cama en las Azores, en el diario La Presse (del Canadá independentista, es decir de Québec) me entero de una iniciativa que tiene miga: el blog político estadounidense Gawker ha propuesto a sus lectores escribir a quien fuera el 43 presidente del país, gran arquitecto de del conflicto, felicitándole por el aniversario de una guerra que no termina nunca desencadenada con el lema “Libertad para Irak” y que, lo mismo que la de Afganistán, enfrentaba a dos ejércitos de potencia desigual y propiciaba un considerable aumento en la actividad de los grupos terroristas de la zona. A estas alturas de la historia, las guerras de Irak y Afganistán son emblemáticas de lo que significa “modernidad” en materia de conflagración armada.

Los de Gawke publican la dirección del correo electrónico del menos tonto (supuestamente) de los hijos de Bush senior, para que sus lectores puedan dirigirle todos los improperios que se les ocurran por haber esgrimido la existencia de armas de destrucción masiva en Irak y la relación entre Saddam Hussein y los yihadistas de Al Qaeda para justificar la invasión del país. El tiempo ha puesto las cosas en su sitio, demostrando que ambas premisas eran absolutamente falsas. Los ciudadanos de esta parte del mundo ya lo sabíamos: no en vano fuimos millones quienes hace diez años salimos a las calles para manifestarnos en contra de una guerra en la que no se nos había perdido nada.

Lo que pasa es que el equipo del peor de los Bush se puso inmediatamente a la obra y, después de los primeros correos, que sin duda le pillaron por sorpresa, empezó a devolver los siguientes con el lema “dirección desconocida”. Aunque, se puede comprobar, el dominio ogwb.org corresponde al “centro presidencial de George W. Bush” –según Gawke- registrado en 2009 por Brian Cossiboom, vicepresidente de operaciones de la Fundación George W. Bush. Yo he hecho la comprobación y lo que aparece ahora es una página como un galimatías, en la que en una de las líneas puede leerse que el sitio “se ha trasladado” (probablemente inundado por emails y spams) (1).

Dejemos la broma a un lado y saltemos a la realidad. Se han cumplido diez años del comienzo de la guerra, han sido diez años de equivocaciones y horrores y nadie ha pedido perdón todavía. “No hay ninguna duda de que la invasión de Irak fue un desastre. No hay ninguna duda de que se hizo basándose en suposiciones erróneas y con una voluntad que tenía muy poco que ver con las justificaciones oficiales de la intervención”, puede leerse ahora en el digital AgoraVox, que reproduce un artículo publicado en Il fatto quotidiano, diario italiano en línea fundado en 2009 y dirigido por Antonio Padellaro (2).

Balance de muertes sin contabilizar 11.500 víctimas iraquíes
Aunque los soldados estadounidense se retiraron oficialmente de Irak en diciembre de 2011 las víctimas, directas y colaterales, han continuado acumulándose durante los últimos meses y aunque pretender establecer un censo definitivo resulta muy arriesgado algunos organismos lo intentan, como la publicación digital británica Iraq Body Count que, precisando que probablemente se trate de una cantidad inferior a la real, cifra entre 112.000 y 122.000 el número de civiles que han perdido al vida en el conflicto, o sus consecuencias, según publica estos días el semanario Le Nouvel Observateur en un artículo firmado por Boris Proulx. Los famosos «documentos de Wikileaks» revelaron en 2010 que la muerte de alrededor de 11.500 víctimas iraquíes de la guerra nunca se ha hecho pública y, por tanto, no figura en ninguna contabilidad, ni oficial ni oficiosa.

Siempre según Iraq Body Count, a los muertos civiles hay que sumar 39.000 combatientes de distintos orígenes (4.488 estadounidenses, 179 británicos y 140 de los países aliados, entre los que se encuentra España). Y según Proulx, “esta guerra pasará a la historia como un fiasco militar de Estados Unidos en el siglo XXI, igual que lo fue Vietnam en el siglo XX”.

Otras fuentes facilitan otras cifras. Según el estudio publicado a mediados de marzo de 2013 por el Watson Institute for International Studies, de la Universidad Brown, los muertos podrían haber sido hasta cuatro veces más de los contabilizados oficialmente: si se incluye a policías, insurgentes, periodistas y trabajadores de organizaciones humanitarias la agencia Reuters estima que la cifra de muertos podría situarse entre 176.000 y 189.000. Además, un millón de iraquíes han resultado heridos, en mayor o menor grado, durante el conflicto y cuatro millones (de los 33 que pueblan el país) han tenido que abandonar sus hogares para escapar a la violencia; la mitad han permanecido en el interior de Irak y la otra mitad han huido hacia el extranjero, principalmente a Siria, de donde no pueden volver y donde ahora padecen las consecuencias de otra guerra.

Siempre según el mismo estudio, la guerra ha costado 700.000 millones de dólares (540.000 millones de euros) a estados Unidos, a los que hay que sumar 490.000 millones de dólares en indemnizaciones a pagar a los ex combatientes; y se supone que, en las próximas cuatro décadas habrá que seguir haciendo frente a gastos como consecuencia de la guerra hasta un total de 6 billones de dólares (más de 4 billones y medio de euros).

Un áspero perfume de petróleo
En el balance que de los diez años de guerra hace el diario comunista francés L’Humanité denuncia directamente el papel determinante que el conflicto ha tenido en la desestabilización de toda la zona de Oriente Medio, “que desprende un áspero perfume de petróleo”, y donde todos los estados se encuentran hoy “divididos entre fuerzas centrípetas”. La estrategia militar les ha conducido a un aislamiento mayor que el que padecían: “Irak todavía no ha encontrado su unidad. En Irán, con el pretexto del asunto nuclear, las grandes potencias están propiciando una atomización del poder, sin pensar en las consecuencias. En cuanto a Siria, hoy se encuentra en tal estado –sean quienes sean los responsables- que resulta difícil imaginar cómo podrá volver a encontrar un día su unidad. La situación en Oriente Medio, ¿sería la misma si la región no rebosara petróleo y gas? ¿No es razonable preguntarse si el futuro de esas reservas energéticas, y el de los países donde se encuentran, es la explicación de las posturas y actitudes adoptadas por Estados Unidos y la Unión Europea?”.

Diez años después de la invasión estadounidense, Irak sigue buscando su rumbo ante la inestabilidad política y la persistencia de la violencia. Lo que en principio se presentó como un enorme fracaso de los servicios de Inteligencia estadounidenses, que proporcionaron argumentos falsos a las administración Bush para llevar a cabo la invasión, fue en realidad el fracaso de todo el sistema USA, centrado en el de instituciones como el ejército de tierra, la marina y la aviación, que debieron frenar aquella barbaridad basada en pruebas inconsistentes como las que atribuían a Saddam Hussein la posesión de armas de destrucción masiva, e incluso la capacidad de poder utilizarlas con fines devastadores contra países occidentales, tan alejados como Estados Unidos o el reino Unido. “En primera fila (del fracaso) -escriben en Il fatto quotidiano- se encuentran los personajes trágicos de Bush, Cheney, Rumsfeld y todo aquel circo neoconservador al que hay que añadir, y al mismo nivel, a Blair, Aznar y Berlusconi, que le prestaron su apoyo, y a toda una panoplia de jefes de estado que se sumaron de distintas formas. Ocupan también un lugar destacado los medios de comunicación que se dedicaron a divulgar aquella propaganda increíble y que, a la larga, se extendieron un auténtico terrorismo psicológico entre las opiniones públicas occidentales”.

De más está decir que tras la invasión y la ocupación militar de Irak las supuestamente letales “armas de destrucción masiva” jamás aparecieron, por la sencilla razón de que nunca existieron- se puede leer en LibreRed, una publicación que reproduce informaciones de diversas fuentes-: “Fueron una mentira, el pretexto para ejecutar la operación militar contra Hussein, que tiempo después (a finales de 2006) fue detenido y ejecutado".

Un legado desastroso
El legado tras diez años de invasión imperialista en nombre de la democracia es desastroso. Falta de servicios básicos, destrucción de infraestructuras, actos de violencia diaria y una tasa de desempleo superior al 50 por ciento. A esto hay que sumarle la sistemática violación de los derechos humanos, con la tortura de presos como práctica corriente en las cárceles custodiadas por el ejército estadounidense…las torturas se generalizaron en los centros de detención en Irak, como se demostró tras el escándalo de la prisión de Abu Ghraib, junto a Bagdad, y el descubrimiento de las cárceles secretas de la CIA, conocidas como “agujeros negros”.
Entre 112.000 y 122.000 el número de civiles que han perdido la vida en el 
conflicto, o sus consecuencias, más 39.000 combatientes de distintos 
Una investigación del diario económico Financial Times acaba de concluir que “Washington se ha gastado al menos 138.000 millones de dólares en contratos a grandes empresas implicadas en seguridad privada, logística y reconstrucción en Irak. Y que la compañía que más se ha beneficiado de ese maná de fondos públicos ha sido KBR, ex subsidiaria de la corporación Halliburton que dirigiera Dick Cheney antes de convertirse en vicepresidente de Bush y en el mayor promotor de la invasión ilegal que devastó el país. KBR se ha embolsado hasta ahora no menos de 39.500 millones de dólares, con lo que encabeza el ranking de multinacionales enriquecidas en la contienda; las dos que le siguen (las kuwaitíes Agility y Kuwait Petroleum Corp.) han sacado 7.400 y 6.300 millones de dólares, respectivamente. A continuaciónsiguen grandes compañías estadounidenses especializadas en la privatización de las Fuerzas Armadas, como Dyncorp, que se ha llevado 4.100 millones por entrenar a la nueva Policía iraquí, o Triple Canopy (1.800 millones), una de las mayores empresas militares privadas, integrada por ex comandos especiales de la Delta Force”.

El nuevo Irak tiene un gobierno de mayoría chií que sigue apoyado en bases americanas, aunque oficialmente los soldados se han marchado, y tiene que enfrentarse diariamente a las acciones de los diferentes grupos sunitas, que hunden sus raíces en el país. A Irak no ha llegado la democracia, ni el país ha renacido de sus ruinas, como predicaban quienes hace diez años propiciaron la invasión, sino que por el contrario se ha convertido en un cúmulo de ruinas y un paraíso de corrupción. Han tenido unos maestros ejemplares, que han abusado de sus prisioneros y han despreciado a una población sacrificada en aras de una mentira, a la que diez años después nadie ha pedido todavía perdón. “No en vano, el periodista iraquí que lanzó su zapato a Bush se ha convertido en un héroe nacional y ni siquiera quienes odiaban a Saddam son ahora capaces de agradecer su intervención a los americanos. Nadie va a conseguir olvidar las traiciones, los duelos, los heridos, los inválidos y las humillaciones”.

Nadie ha pedido perdón a los iraquíes, ni tampoco a los militares y civiles de otros países enviados a morir en Irak. Tan solo el diario New York Times se excusó ante sus lectores, por haberles mentido. Y, mientras tanto, la violencia continúa. El décimo aniversario de la invasión ha estado precedido de una serie de atentados con bomba : «febrero ha sido algo menos letal que enero con ‘solamente’ 220 muertos y 571 heridos». En un reciente entrevista concedida a la televisión británica ITV, el ex primer ministro Tony Blair –en su línea de “mantenella y no enmendalla”- aseguró que si “se hubiera dejado a Saddam continuar en el poder, en Irak se habría producido una carnicería aun mayor que la que está en marcha en Siria”.

Notas
1. El texto completo puede leerse en francés en las páginas: http://gawker.com/5991411/wish-george-w-bush-a-happy-iraq-war-day-here-is-his-private-email-address, y http://www.slate.fr/lien/69653/mail-george-bush-anniversaire-guerre-irak-hacking-guccifer

2. La salida del periódico estuvo precedida de una campaña iniciada en el blog . voglioscendere.it del periodista Marco Travaglio. El nombre de la cabecera es un homenaje a la memoria de Enzo Biagi (1920-2007), uno de los grandes nombres del periodismo italiano, que dirigió el programa televisivo Il Fatto; el logotipo –un niño con un megáfono- está inspirado en el del diario La Voce, como homenaje a su fundador, Indro Montanelli (1909-2001), periodista, escritor y autor teatral. Para conservar su independencia, el periódico ha renunciado al fondo de financiación pública.

3. El canal cultural franco-alemán ARTE ha emitido estos días un hermoso documental titulado “Diez años, 100 miradas”, que puede verse en: http://irak.arte.tv/

26 de marzo de 2013

LA ABOMINABLE CARA OCULTA DE LOS «EJÉRCITOS HUMANITARIOS»


ACTUACIONES DEL EJÉRCITO ESPAÑOL

Al hilo de informaciones recientes, Gasteizkoak describe y analiza las actuaciones cometidas por el Ejercito español durante las «misiones humanitarias» para evidenciar que esconden un Iado oscuro, marcado por la violación de derechos humanos.

Estitxu Martínez de Guevara. Gara
Colectivo Gasteizkoak

En las últimas semanas hemos conocido dos graves hechos relacionados con los denominados «ejércitos humanitarios» que nos han recordado el libelo que hace diez años publicamos con el mismo título que encabeza este artículo. Por un lado está la difusión de un vídeo en el que se observa a cinco soldados españoles destinados en Irak en 2004 maltratando salvajemente a dos detenidos, uno de los cuales incluso llegan a suponer que pueda haber muerto a causa del ensañamiento a patadas al que es sometido. Por otro, de un sentido completamente distinto, la noticia de que el Ministerio de Defensa español ha remitido a los Institutos de Enseñanza Secundaria de Hegoalde (y suponemos que al resto del Estado español) dos publicaciones en forma de cómic: “Los pacificadores. Misión con la Fuerzas Armadas”', y “Las Fuerzas Armadas, en defensa de la paz y la seguridad”, este último basado en el “Libro de apoyo para docentes”  del sistema educativo español, del mismo nombre. El objetivo del «regalo» se declara en la presentación: «Confío en que disfrutéis de la lectura de este cómic y sirva para despertar el interés de nuestras Fuerzas Armadas entre los más jóvenes”. Pues bien, nosotras confiamos en que los párrafos siguientes sirvan para aportar algo de luz sobre esa abominable cara de los «ejércitos humanitarios», en este caso españoles.

Con respecto al vídeo, el Ministerio de Defensa rápidamente ha declarado que “los primeros” que lamentan y rechazan estas imágenes son “los propios militares, que llevan más de 20 años en misiones en el exterior”, haciendo «un trabajo impecable» y sin que «jamás» haya habido «una queja» sobre su comportamiento. Pero estas declaraciones no son sino una sarta de mentiras, pues no son, ni mucho menos, las primeras.

En 2003, cuando publicamos el libro, éramos conscientes de que los datos que aportábamos “no son sino una pequeña muestra de la situación real”, ya que `el poder y sus voceros' intentan ocultar estas realidades que tanto dañarían la campaña de imagen militar y ayudarían a cuestionar la existencia misma de los ejércitos, ya fueran regulares o `humanitarios'. A través de esas noticias vamos a poder forjarnos una visión de conjunto hasta ahora públicamente `no retratada', que muestra la cara más salvaje, más inhumana de los ejércitos llamados `humanitarios' y de sus diferentes `Misiones de Paz'».

Entre la recopilación eran varias las referencias a las tropas españolas o a sus mandos políticos y militares, dejando en evidencia las declaraciones de Defensa. Veamos algunas.

Una soldado de infantería denunció que “fue acosada sexualmente por un sargento mientras estuvo destinada en los Balcanes entre octubre de 1994 y abril de 1995” y que una compañera en Bosnia para ayudarla habló con el capitán y “lo único que consiguió es que el capitán le acosara a ella también”.

El primer avión español cargado con ayuda que llegó a Zaire en octubre de 1996, a pesar de ser pagado por la Agencia de Cooperación Española, aterrizó en Kinshasa a miles de kilómetros de terreno selvático de la zona afectada. Nada de su contenido llegó a los refugiados. Alguien decidió darle un fin más importante al vuelo: transportar a miembros de los GEO (Grupo Especial de Operaciones) para proteger la Embajada española.

En 1997, un periodista conversaba con uno de los legionarios que tomaron parte en la llamada «Operación Alba» en Albania. Los soldados no terminaban de entender el objetivo de su misión: proteger la distribución de alimentos en un país que, aunque pobre de solemnidad, no conoce el hambre. Pero al menos ellos tenían su propia satisfacción: “En principio hemos venido para tres meses, pero nuestro capitán nos ha dicho que con toda seguridad estaremos más tiempo, así que nos vamos a levantar una pasta...”. Y, efectivamente, así era, pues unos soldados cuyo sueldo en 1997, habitualmente, apenas superaba las 100.000 pesetas mensuales, se multiplicaba por cuatro mientras se prolongase la «misión humanitaria» en Albania, gracias a las dietas que el Ejército les abona por permanecer fuera del territorio español.

Durante el verano de 1999, José María Aznar, entonces presidente español, en visita relámpago de doce horas, apareció en julio en el campamento de Hamallaj, en territorio albanés bajo responsabilidad militar española. Pero la visita no fue más que una acelerada escena de teatro virtual. Después de trabajar una semana en la instalación de infraestructuras, los voluntarios se quedaron atónitos cuando les ordenaron deshacer lo hecho (“ahora podéis desmontar que el presidente ya se ha ido...”), bajo el pretexto de que esa no era su «ubicación definitiva».

En 2000 un brigada de farmacia español destinado en Kosovo apareció muerto, suicidado según las versión de Defensa. Pero un informe de tres forenses contratados por la familia, que no estaba de acuerdo con la versión, afirmaba que pudo ser asesinado por alguno de sus compañeros. Estos compañeros estarían presuntamente vinculados a una trama de robo y desvío de medicamentos al mercado negro.

A finales de 2000 la ONU se vio obligada a expulsar a seis policías -de nacionalidades española, británica y estadounidense- de la fuerza internacional en Bosnia-Herzegovina, por su supuesta vinculación a la extorsión de varios locales de prostitución en los que trabajaban menores de edad. Las mujeres y las niñas de 14 años procedían de Rumania, Moldavia, Ucrania y Rusia.

En 2002 el teniente Iván Moriano, tras haber sido denunciado en dos ocasiones por agresión sexual (una de ellas con violación) en dos destinos distintos, fue posteriormente destacado a la «misión humanitaria» en Bosnia.

En 2001, el informe “Instrumentalización de la Acción Humanitaria por parte del ejército español: el caso de Mozambique”, elaborado por Pilar Duch para Médicos Sin Fronteras sobre su experiencia con el Ejército español, entre otras muchas cosas relataba que en el hospital de campaña del Ejército español las estadísticas parecían ser su máxima preocupación. No admitían enfermos en estado terminal, que pensaban que pudieran morir en los próximos días. Un testigo presencial recuerda haber oído: “No recogemos a los que tienen posibilidades de morir, sino de salvarse”. Su aproximación a la población consistía en esperar a que ellos acudieran, y de aquí la pregunta a las doctoras de MSF, cuando acudían con los niños que sufrían malnutrición severa: “¿De dónde habéis sacado esto? A ver si dejáis de recoger cosas por el campo”.

Publicamos otro libro en 2003, pero el repugnante «hacer humanitario» de las tropas españolas, por mucho que sigan tratando de esconderlo, ha seguido estando presente.

Tal y como ha denunciado Al Mayali (y recogido Gervasio Sánchez y Amnistía Internacional, entre otros), en 2004 sufrió trato inhumano y degradante durante los tres días de interrogatorio a los que fue sometido por las tropas españolas en Irak, justo en la misma base de Diwaniyah de donde procede el video ahora publicado. A Mayali le pusieron una capucha, le ataron las manos a la espalda, le propinaron golpes en la cabeza, golpes con fusiles, le insultaron y le amenazaron de muerte... y tras los interrogatorios permaneció otros dos días en una habitación húmeda, sin dormir y recibiendo insultos cuando pedía ir al servicio. El máximo responsable de aquella base durante estos sucesos, el entonces general Fulgencio Coll, fue tras ello nombrado primero jefe de la Unidad Militar de Emergencias y, posteriormente, siendo ya teniente general, jefe del Estado Mayor del Ejército.

En 2006 un cabo español destinado en Mostar (Bosnia) fue acusado de abusos sexuales por una militar francesa. El español lo negó, pero gracias al testimonio de compañeros de la militar francesa, fue condenado en 2008 por la Audiencia Nacional a una multa de 1.620 euros que, según se publicó, al declararse insolvente los pagó el Estado (es decir, todas nosotras). Siguió en el Ejército sin mayores problemas.

En 2012 el Tribunal Supremo rebajó de nueve a cinco meses la sanción disciplinaria impuesta a un militar condenado en 2008 por violencia machista, al “considerar como atenuante una medalla de la OTAN”, justificándolo en “su acostumbrada o asidua participación en operaciones de mantenimiento de la paz en un escenario de la dificultad y peligrosidad de Afganistán, en el que resulta frecuente que los participantes tengan necesidad de acudir al empleo de la fuerza armada”.

Valgan como colofón explicatorio de todo este «humanitarismo armado» las declaraciones realizadas a una periodista en 2011 por un soldado español que ha participado en misiones en Líbano, Kosovo y Afganistán: “De misión de paz nada. Allí vas a matar y a que no te maten”. Los ojos azules de Ángel (nombre ficticio) se emocionan cuando habla de su trabajo: “Lo peor de Afganistán es tener tiempo para pensar, para echar de menos'. (...) La batalla ahoga los problemas: Lo único que piensas es en dónde está, para matarlo”. Una droga que engancha. “Vamos a por él”, se decía Ángel. “Olvidas tener miedo. Mientras estás allí disparando, lo único que tienes en la cabeza es: `A ver si pillo a ese cabrón, que mañana puede matar a un amigo”.

Los «ejércitos humanitarios» tienen una abominable cara oculta, ocultada por la connivencia y complicidad de la mayoría de medios, de sus compañeros y mandos, de los responsables de los ejércitos, de las instancias judiciales afectadas y de los dirigentes políticos que les mandan. Por mucho que se intenten ocultar hechos y vídeos y que se promuevan cómics y campañas de «lavado de imagen», la idiosincrasia militar para la que han sido instruidos seguirá brutalmente presente, porque como declaraba el 22-06-2006 a la BBC alguien tan poco sospechoso de antimilitarismo como el entonces director adjunto de la revista «Defensa», Gustavo Morales: “La guerra destapa lo peor que hay en muchos, porque fundamentalmente lo que se impulsa a hacer a una persona es a matar a otra. Entonces, si se la puede matar, ¿por qué no violarla? Las enormes descargas de adrenalina que genera el combate liberan, como lo hace el alcohol en ocasiones, desinhibición, lo que hace que no respetemos determinadas reglas (...) Esas violaciones son algo inherente al conflicto y contra ellas se pueden hacer pocas cosas, porque se podría elevar el nivel cultural de la tropa pero si se eleva demasiado lo mismo no combate”.

Más claro, agua.

25 de marzo de 2013

CÓMO TELEDIRIGE EL PP A SUS TROLLS EN INTERNET

Título original de la noticia: ‘Lapsus mail’: opinadores
El PP envía por error a los medios un mail que iba dirigido a sus 'opinadores'
En el correo da las directrices de las noticias para comentar
Marcos Torío. El Mundo. Baleares.

El Lapsus Mail es un desliz no catalogado por el que envías un correo electrónico justo a quien no debes, a la última persona que debería leerlo, ya sea porque va contra tus intereses, la pones a parir o te debilitará frente al enemigo. Destinatario erróneo. Existe también la modalidad Lapsus SMS y supongo que la habrá también modelo Facebook y WhatsApp. Luego está la categoría Torres-Urdangarin, género en sí mismo, con algunas variaciones.

El gabinete de comunicación del PP en Baleares envió ayer por error un correo electrónico a los medios de comunicación que iba dirigido a un grupo de comentaristas profesionales adscritos, no se sabe de qué forma, al partido. "Buenos días opinadores, éstas son las noticias para comentar", rezaba el encabezamiento. A continuación, recogía varias noticias del día que debían amplificarse en caso de beneficiar al partido o neutralizarse si perjudicaban su imagen.

El correo electrónico revela lo sistematizada que está la estrategia –"aquí tenéis todos los argumentos para su defensa" e incluye los enlaces digitales de las noticias que deben trollearse. Sobre la incidencia en la huelga de profesores públicos, el gabinete advierte de que debe guardarse "máximo respeto hacia aquellos que quieran secundarla", extremo que demuestra la virulencia con la que los opinadores leones se lanzan a por la presa. A reglón seguido recuerda la directriz por si alguien no lo tuviera claro. "Desde el PP creemos que ante la situación en la que nos encontramos las cosas no se solucionan haciendo una huelga".

La política ha llegado al punto de conseguir incluso pervertir e intoxicar hasta la supuesta libertad de expresión que proporcionan los avances en comunicación digital. Ha creado un ente abstracto de trabajadores borregos del que desconocemos su perfil. No se sabe si percibe remuneración, si se le coloca en la cola de favores o si es desempleado con ganas de perpetuar los resultados electorales. En cualquier caso, la fórmula confirma que más no significa mejor y que nunca fue una buena idea que cualquiera pueda escribir lo que le dé la gana –o lo que le dicten– en ese agujero negro que es Internet y las redes sociales.

La democratización de la opinión no hace sino relegar a anécdota aquella que pueda tener validez por expresarse de forma libre y cualificada. Lo que se diga acodado en la barra del bar o rascándose el culo es otra cosa. En definitiva, no es que no se pueda distinguir el grano de la paja, sino que todo acaba por volverse paja.

Los políticos compiten cual egotuitero por ganar seguidores, que se entregan sin saber que, por ejemplo, en el caso del presidente del Govern balear, José Ramón Bauzá, hasta un becario del gabinete ha sido responsable de lanzar sus tuits al ciberespacio.

El Lapsus Mail del PP confirma a los opinadores como plaga, marionetas al servicio de la doctrina y perpetuadores de la vacuidad. Es un grupo tan fervoroso que necesita instrucciones de aliento y de contención. Precisa que se le suelte la correa o se le coloque el bozal. Mientras, los políticos responsables de esos comentarios los utilizan para reforzar su discurso o desmontar el del contrario. Falta poco para que en el Parlament, micro en mano, escuchemos una discusión tal que así:
–Señor fulanito, usted tuiteó ayer contra la medida que defiende.
–Al terminar, recuérdeme que despida al nuevo becario del gabinete.

Los opinadores harán el resto.

CHIPRE: SIMPATÍA POR UNA LAVADORA


Rafael Poch. La Vanguardia

En Alemania la definición de la palabra “oligarca” se restringe estos días a los que han nacido en Rusia

Tras la estabilización que la garantía ilimitada del BCE logró en septiembre con el respaldo de Merkel, en Francfort se preguntaban hace unos meses cuanto duraría la calma. Algunos ya decían que Europa había cambiado una crisis financiera por una crisis de empleo y recesión. Primero llegaron las elecciones italianas, que Merkel aún no ha mentado, y ahora el disgusto de Chipre. De nuevo la voluntad popular -en Italia unas elecciones, en Chipre un parlamento- se interpone en el camino del errático Diktat europeo.

Este segundo sobresalto ilustra la fragilidad de la situación europea y tuerce un poco la por ahora segura victoria de la canciller alemana para ganar su tercer mandato en las elecciones de septiembre bajo el lema, “qué bien lo hacemos”. Pero al directorio berlinés-bruselense le crecen los replicantes. Desde Berlín se calificó de payasada lo de Italia -lo dijo el candidato socialdemócrata a la cancillería, Peer Steinbruck- y ahora se reduce a Chipre a una lavadora de sucio dinero ruso. Pero la isla mediterránea es mucho más que eso y ha demostrado tener sentido de la dignidad.
Chipre tiene una historia de colonialismo y dependencia europea  muy cruda que comenzó en 1878 cuando la isla fue adquirida a los otomanos por la Inglaterra victoriana hoy parte de la Unión Europea. La sombra de aquel yugo, que en los años cincuenta ignoró el referéndum nacional chipriota a favor de la “Enosis”, la unión con Grecia (con el resultado de un 96% de la población griega local, 80% de la población total, a favor) continúa hasta hoy en forma de bases militares británicas tres veces mayores que Guantánamo. Desde ellas el Reino Unido lanzó en 1956 sus infames bombardeos tardo coloniales contra el Egipto de Nasser y contribuyó al desastre de Irak.

A su independencia en 1960 gracias a la tenacidad del ejemplar Patriarca Makarios de su Iglesia ortodoxa, autocéfala desde el siglo V, siguió la invasión y colonización del ejército turco, golpista y esbirro de la OTAN por excelencia, y la injusta y brutal partición de la isla en 1974, un escándalo sangriento en el que Europa dejó hacer a los militares turcos.
La democracia chipriota ha sido ejemplar, con alto nivel de instrucción, menos corrupción que en Italia y España y elecciones limpias. Desde esa historia no es casualidad que el agravio lanzado por el directorio europeo haya indignado en Chipre y que los sentimientos hacia Rusia sean favorables.
La solución expropiatoria impuesta tenía como principal justificación una cuestión de política interna alemana en periodo preelectoral: los rescates (a los bancos) no son populares en Alemania. Y con razón. Pero Europa lleva tiempo salvando bancos internacionales con dinero del contribuyente, especialmente bancos de los países centrales, los más expuestos, con los rescates que llevan nombre de los países de la periferia. Eso es lo que los votantes alemanes ignoran, en gran parte gracias a sus medios de comunicación.
La jugada expropiatoria impuesta a los chipriotas demuestra, una vez más, la desigualdad entre naciones europeas, algunas de ellas sin derecho alguno a la soberanía, algo sobre lo que Chipre conserva buena memoria en su biografía.
Al anunciar en octubre de 2008 que garantizaba a los alemanes sus depósitos bancarios, Merkel dijo que lo contrario significaba, “comprometer la confianza en el orden social”. La solución chipriota demuestra que esa confianza se puede destrozar sin problema en los países de la periferia. Un aviso general para potenciales rebeldes.
La justificación del sucio dinero ruso es indecente y selectiva. Según los índices de la ONGTax Justice Network, Chipre ocupa el puesto número 20 en la tabla mundial de opacidad financiera. Por delante de ella hay seis naciones europeas, con Alemania en el puesto nueve de los diez más opacos del mundo. La campaña de la prensa alemana contra el “sucio dinero de los oligarcas rusos en Chipre” ha coincidido con revelaciones sobre generosos depósitos de oligarcas alemanes, tratados aquí de “empresarios prominentes”, en el paraíso fiscal panameño: Piëch, el dueño de Porsche, Quandt, BMW, la familia de banqueros Finck, el rey del café Jacobs y el editor del imperio Burda, entre otros. De repente en Alemania el concepto “oligarca” – “personas que pertenecen a un grupo reducido y ejercen el poder supremo”- se restringe a quienes han nacido en Rusia. Un estudio del SPD divulgado en enero estima en 150.000 millones de euros el fraude fiscal que tiene lugar anualmente en Alemania. La cifra representa el 16% de la recaudación total del estado. ¿Cuál es entonces la enfermedad chipriota? ¿Quizá ofrecer a empresas rusas el estatuto fiscal favorable que en Irlanda es completamente respetable?

Los chipriotas no inventaron nada. En sus mejores días el “modelo Chipre” generaba en la City londinense el 10% del PIB británico. En Irlanda existe un esquema idéntico al chipriota de bajos impuestos para empresas, que ha continuado funcionando tranquilamente incluso tras el rescate de bancos internacionales concedido a ese país. El primer ministro de una gran lavadora internacional, Luxemburgo, el simpático Jean-Claude Junker, ha sido hasta enero, y durante ocho años, jefe del eurogrupo. Quienes en Alemania hablan del sector bancario “sobredimensionado” de Chipre -Merkel, Shäuble y Steinbrück, entre otros- son los mismos que liberalizaron la “plaza financiera alemana” que hasta los años 2000 estuvo menos abierta al casino. ¿Quién no tiene una banca “sobredimensionada” en la Europa del casino? La diferencia esencial de todo el asunto es que ahora se trata de un país de la periferia, pequeño y bajito, y que el dinero en juego es fundamentalmente ruso y afecta poco a los principales tahúres.
Chipre jugó al casino como todos, pero la principal ruleta estaba en Londres, Francfort y Nueva York, no en Nicosia. La isla mediterránea tenía una deuda pública del 48% en 2008 y ha sido, entre otras cosas, una víctima de la mala política europea hacia Grecia, que la troika empeoró con su medicina. La rebaja de la deuda griega costó 3000 millones a los bancos chipriotas.
Ahora se dice que los mercados entenderán el mensaje de este castigo político a los depositantes rusos que blanqueaban dinero en Chipre. Ser ruso y tener dinero en Chipre no es necesariamente “blanquear” y, en cualquier caso, ¿qué pasa con el blanqueo en Suiza, las islas Caimán, Luxemburgo, Estados Unidos, Jersey, Alemania, Reino Unido, Bélgica y Austria, por citar solo algunos de los veinte países en los que las finanzas son más oscuras que en Chipre según la citada organización? Y encima el coqueteo con Moscú: ese ejercicio de soberanía nacional ha sido un irritante desafío.
Un enorme yacimiento de gas con el que interesar al consorcio ruso Gazprom. Una posible base militar para la flota rusa en Limasol, que podría ser alternativa para continuar una presencia en el Mediterráneo Oriental si Moscú termina teniendo que salir por piernas de la Siria de El Asad…. Lo más irritante de la situación, vista desde Berlín y Bruselas, es este ejercicio de soberanía ejemplarizado por el viaje del ministro de finanzas chipriota a Moscú. El Directorio europeo, que en su día castigó a Rajoy por la minucia de un cuestionamiento de los objetivos de déficit y a Papandreu por proponer un referéndum, va a ser implacable con esto.

El caso chipriota es un abuso más de la mentalidad de matón que está desintegrando la eurozona. Hay que utilizar la situación para realizar lo que el diario Die Welt describe como, “un precedente que tenga efecto disciplinador sobre otros países en crisis reacios a realizar reformas”. Ante este trato no es de extrañar que dos de cada tres chipriotas apuesten por abandonar el euro y fortalecer las relaciones con Rusia, como señala una encuesta de Prime Consulting. O que el 91% apoye el “no”, unánime, de su parlamento a la quita en los depósitos.

24 de marzo de 2013

LA MUERTE DE LOS CONVENIOS COLECTIVOS....Y DEL SINDICALISMO DE CONCERTACIÓN


Título original de la noticia: EL DESCUELGUE SALARIAL SE GENERALIZA ENTRE LAS EMPRESAS TRAS LA REFORMA LABORAL

MÁS DE 200 EMPRESAS AL MES SE ACOGEN A ESTE BENEFICIO

Carlos Sánchez. Cotizalia

Si uno de los objetivos estratégicos de la última reforma laboral era facilitar a las empresas que puedan descolgarse de los convenios colectivos: pleno al 15. El Gobierno ha acertado todos los números de la quiniela. La inaplicación de convenios colectivos era hasta hace un año residual en las relaciones laborales, pero ahora se ha disparado hasta convertirse en un instrumento importante a la hora de salvar la situación económica de una empresa.

Las cifras oficiales muestran que en los dos primeros meses de este año el número de empresas que ha decidido no aplicar a sus trabajadores el incremento salarial pactado previamente en un convenio colectivo de ámbito superior representa más de la mitad que en todo el año pasado.

O dicho en términos más precisos: si en 2012 fueron 748 sociedades las que no aplicaron el convenio por razones económicas -lo que afectó a 29.352 trabajadores-, en enero y febrero de este año ya son 430 empresas las que se han acogido a esta posibilidad. En total, 19.340 trabajadores que no podrán beneficiarse de una mejora de sus relaciones laborales debido a la situación patrimonial de sus empresas, pese a que así lo marca el convenio de ámbito superior.

La posibilidad del descuelgue ya existía con la anterior legislación laboral, pero el procedimiento era tan prolijo y complicado que en la práctica su utilización siempre ha sido muy escasa. La nueva ley facilita que una vez culminado un proceso de consultas con los representantes de los trabajadores, las empresas no apliquen el régimen salarial pactado, pero siempre que su “situación y perspectivas económicas pudieran verse dañadas como consecuencia de tal aplicación, afectando a las posibilidades de mantenimiento del empleo en la misma”. Si se dan estas condiciones, una empresa puede acogerse a la cláusula de descuelgue.

Lo que pretendía la reforma laboral, según su declaración de principios, era favorecer “la adaptabilidad de las condiciones de trabajo a las circunstancias de la producción”. Pero lo cierto es que esta posibilidad está afectando sobre todo a las empresas de mayor tamaño. De hecho, casi el 10% de las compañías que se han acogido al descuelgue tienen una plantilla superior a 250 trabajadores, cuando su peso en el conjunto de empresas que tienen algún trabajador y por el que cotizan a la Seguridad Social es de apenas el 0,3%. De los casi 20.000 trabajadores afectados por el descuelgue, casi la mitad tienen su empleo en empresas con más de 250 trabajadores.

Los costes laborales se desploman
La generalización de los descuelgues salariales es una de las causas que explican el desplome de las nóminas. También, como es lógico, la destrucción de empleo, que ha provocado un retroceso históricos de los salarios. Los datos más recientes muestran, en concreto, que los costes laborales unitarios (CLUs) del conjunto de la economía española siguieron retrocediendo en el último trimestre del pasado ejercicio y anotaron una caída interanual del 5,8% frente a un retroceso menos acusado del trimestre anterior (2,9%).  Esta tasa contrasta con lo que ocurría, por ejemplo, en 2008, al principio de la crisis. Ese año, los costes laborales crecían nada menos que un 5,7%.

En el conjunto del año 2012, por el contrario, los CLUs mostraron una caída media del 3,4%, frente al -1,4% del conjunto de 2011, lo que da idea del ajuste. El Ministerio de Economía lo achaca tanto a la recuperación de la productividad como a la moderación de los costes laborales, principalmente los salarios. Hay que tener en cuenta que, según el registro de convenios colectivos, las nóminas están subiendo actualmente apenas el 0,6% respecto del año anterior, lo que supone casi cinco veces menos que el IPC. 



La conclusión que saca el Gobierno es que esta evolución de los costes laborales unitarios (relación entre productividad y salarios) “comporta una ganancia de competitividad vía costes y una reconstitución de la rentabilidad de la inversión, condiciones necesarias para crear las bases que permitan iniciar la creación de empleo”.