Por
Marat
El
asesinato de Mahsa
Amini por la Policía de la Moral (apropiado nombre para los esbirros
de una dictadura teocrática) o
Gasht-e
Ershad,
ha
desatado una revuelta más en Irán; esta
vez puede que sea la última y definitiva. Si
se producen fisuras en la cúpula del poder
político-clerical-económico-militar (la estructura mafiosa forma un
todo) el proceso de descomposición del régimen se acelerará.
Las
mujeres,
a las que en palabras de la escritora Nazanín Armanian, el régimen
de los ayatolás considera infrahumanas,
están
siendo en esta nueva etapa de la protesta social iraní iniciadoras,
sostén y punta de lanza de las movilizaciones, con su decidido
desafío (quitándose
el hiyab o cortándose mechones de sus cabellos en público) a
los matones uniformados de
la dictadura. Pero a ellas se ha unido ya un creciente número de
hombres, lo que indica que es la nación, y no solo una parte de
ella, por grande que fuese, quien desafía abiertamente al poder.
Mujeres
y hombres, jóvenes y mayores, intelectuales, artistas y obreros en
huelga, periodistas y maestros, incluso niñas y niños en las escuelas, son quienes
desobedecen abiertamente, lanzan consignas frente al fascismo
religioso y se enfrentan a la policía.
La
respuesta del régimen es siempre la misma: el diálogo de las balas
contra el pueblo. Alrededor de 300 personas han sido ya asesinadas,
30 de ellas adolescentes y niños; torturas, palizas en las calles,
secuestros y desapariciones, restricciones
y cortes de Internet y redes sociales
pero la lucha no cesa sino
que se recrudece.
Desgraciadamente
la gente de Irán afronta su combate casi en soledad, si descontamos
a los iraníes en el exilio y la emigración y a los pocos ciudadanos
occidentales que, a título individual, están apoyando
sus manifestaciones en Europa y en otros países del mundo.
Los
adalides de las “democracias”, esos defensores de las libertades,
mientras condenan públicamente la represión de la teocracia iraní
contra su pueblo, siguen comprando su petróleo al régimen genocida,
se indignan en hipócritas declaraciones pero no rompen relaciones
diplomáticas con él, sus quejas son falsos lloros de
plañideras porque, al
fin y al cabo, “el petróleo
no tiene ideología”, aunque en lo económico la mafia
fundamentalista que lo vende, y que necesita de sus ingresos para
mantenerse en el poder, sea tan capitalista como los gobiernos que se
lo compran. Y
eso vale tanto para toda la UE y cada uno
de sus países miembros como para los EE. UU.
que “muestra su disposición a encontrar "una solución
diplomática" para reactivar el programa nuclear de Irán”,
cuando
en
el
pasado
se afirmó que sería empleado con fines bélicos. Y
es
que
el
petróleo
y
su necesidad para que funcione la maquinaria capitalista mundial sabe
poco de “Derechos
Humanos”.
En
definitiva, si los muertos los pone el pueblo iraní, bien le sirve
al capitalismo occidental aceptar el rojo de la sangre a cambio del
oro negro.
Cínico
el gobierno español que, a través de la número dos del Ministerio
de Asuntos Exteriores, Ángeles Moreno, convocó el pasado septiembre
al embajador iraní en España, Hassan Qashqavi, para pedirle
explicaciones y condenar la represión de su gobierno contra sus
ciudadanos y, ante la sarta de mentiras expresadas por el
diplomático, ha callado y aceptado de modo cómplice lo que está
ocurriendo en ese país.
Vergonzoso
el comportamiento del
socio del PSOE en el gobierno, Podemos, cuya
Ministra de Igualdad, Irene Montero, se limitó en Septiembre a expresar su apoyo en un tuit -¿en qué se basa ese
apoyo? - a las mujeres iraníes y, cuando éstas le pidieron ese apoyo
de forma activa, encontraron su callada por respuesta. Puede
que esa actitud podemita de ponerse de perfil ante crímenes tan clamorosos tenga algo que ver con el pasado mediático de Pablo
Iglesias en HispanTV,
canal oficial iraní, en el que presentaba su programa
“Fort Apache”. El
colmo del cinismo es que para justificar entonces su colaboración con la
televisión de un régimen criminal se comparase con Lenin, aludiendo
al tren blindado que le puso el gobierno alemán del kaiser para
entrar en Rusia, cuando Lenin fue a Rusia para hacer una revolución
socialista y Pablo Iglesias fue a la política para hacer reformismo
de bajos vuelos y
encontrar un trabajo bien remunerado con sus entonces
compañeros de programa, Errejón y Monedero.
Triste
que el movimiento feminista español, hoy dividido, no se muestre más
decidido y activo para presionar al gobierno español en defensa de
sus hermanas iraníes con el fin de lograr la ruptura de relaciones
diplomáticas. Imagino que algo tendrá que decir también ese
sector de las feministas que ven compatible el hiyab y el Corán con
la liberación de la mujer.
Patético
el silencio de ciertas publicaciones supuestamente a la izquierda de
las izquierdas oficiales, de grupúsculos residuales y de individuos
delirantes que, o hacen luz de gas sobre la represión contra el
pueblo iraní, o se abonan al conspiracionismo de un imperialismo
enfrentado a un supuesto antiimperialismo del fundamentalismo
islámico más reaccionario. Según sus argumentos el nazismo también
podría haber jugado un papel antiimperialista, al enfrentarse a un
imperio declinante, el británico, y a otro emergente, el
norteamericano. Otros
que, como Iglesias, cabalgan sus propias contradicciones. Claro que
el imperialismo juega su guerra de posiciones pero uno ha de saber
con quién está, si con las victimas de la represión o con sus
asesinos, en Irán y en cualquier parte del mundo.
Quizá a algunos de esos hiperventilados revolucionarios antiimperialistas les vendría bien conocer la posición del Partido Tudeh (comunistas iraníes) sobre el levantamiento popular en su país. Les pongo algunos enlaces, por si son de su interés:
https://www.tudehpartyiran.org/en/2022/09/20/statement-of-the-tudeh-party-of-iran-down-with-the-dictator-there-is-no-end-to-the-regimes-murderous-thuggery/
https://www.tudehpartyiran.org/en/2022/09/25/statement-of-the-tudeh-party-of-iran-in-support-of-the-courageous-and-widespread-uprising-of-the-people-against-oppression-and-tyranny/
https://www.tudehpartyiran.org/en/2022/10/02/statement-of-the-tudeh-party-of-iran-a-passionate-salute-to-the-heroic-struggle-of-the-women-youth-and-students-of-the-country-iran/
https://www.tudehpartyiran.org/en/2022/10/12/statement-of-the-tudeh-party-of-iran-our-warmest-greetings-to-the-striking-project-workers-in-the-bushehr-petrochemical-complex-and-contract-workers-of-the-second-phase-of-the-abadan-oil-refinery/
Doloroso
fue escuchar en distintos momentos del recorrido de la manifestación
del pasado sábado 22 de octubre en Madrid, bajo el lema “Mujer,
vida y libertad”, la
canción
de
“El pueblo
unido” de Quilapayún, primero en farsi y luego en castellano y constatar
que allí apenas había españoles de esos que presumen de
solidarios, de izquierdas e incluso comunistas. De las derechas no
debiera sorprender su ausencia. Y, por desgracia, a uno ya tampoco
le sorprende la indiferencia y el silencio cómplice de quienes
supuestamente debieran
ser
algo muy distinto a ellas.
Que
cada uno cabalgue sus propias contradicciones.