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23 de enero de 2016

TRAS LA OFERTA DE GOBIERNO DE PODEMOS AL PSOE A USTEDES AÚN LES PARECE QUE SON DISTINTOS, ¿VERDAD?

Por Marat

1.-"Descastizando y desmierdizando" al PSOE que es gerundio
No es que el PSOE haya sido de un plumazo definitivamente “descastizado” por el acto de autoproponerse Pablo Iglesias como vicepresidente de un gobierno presidido por Pedro Sánchez; es que en ese mismo acto ha sido literalmente “desmierdizado”¿Recuerdan aquello de “PSOE y PP la misma mierda es”? ¡Ah que eso lo gritaba el 15M! Pero ¿no se reivindicaban tanto Podemos como IU, cuyo candidato Garzón ya ha respondido positivamente a la propuesta de Iglesias, del 15M? ¿Acaso los líderes de Podemos y Garzón no estuvieron en el 15M?

Y lo más divertido de todo es que el señor Pablo Iglesias presentó esta propuesta a Felipe VI de Borbón antes que al principal interesado, Pedro Sánchez, lo que debiera despejar toda duda acerca de que se trate de una “jugada maestra” para que el invitado a ser Presidente con sus votos se sienta tan presionado que lo rechace por forma e intenciones. No parece en absoluto que esa sea su intención ni por la forma (presentar la propuesta al rey y luego, al salir del encuentro, anunciarlo ante los medios de comunicación ni por los intereses que se dirimen en tal apuesta.

En primer lugar, el interpelado Sánchez ha demostrado sobradamente sus esfuerzos, contra buena parte de sus barones, por encabezar ese gobierno, arriesgando incluso su propia cabeza (que solo puede salvar siendo Presidente del Gobierno o ganando una próximas elecciones si las hubiera y llegase a ser candidato) y la unidad del partido, bastante quebrada.

En segundo lugar, si Iglesias tensase demasiado la cuerda del acuerdo, de modo que lo hiciese imposible, mientras Sánchez ha mostrado desde el primer día su intención de negociar, y ello provocase unas nuevas elecciones, puede que los resultados no le fueran tan favorables y que los beneficiados de ellas fuesen el PP, al demostrar la oposición su falta de capacidad para entenderse, y el PSOE, al transmitir la idea, muy bien trabajada por Sánchez, de que no fue por ellos por lo que fracasó tal intento.

En tercer lugar, las confluencias con sus socios actuales no han sido precisamente una balsa de aceite, especialmente en el caso de Compromís que no se ha integrado en la disciplina del grupo podemita del Congreso. Posiblemente, unas nuevas elecciones sólo pudieran acentuar esa tendencia “disidente”, aun cuando se volviesen a presentar unidos.

En cuarto lugar, nada asegura que Podemos no haya alcanzado su techo. Les sugiero que no hagan demasiado caso a las encuestas que puedan afirmar que sí porque ya quedaron desacreditadas suficientemente en su momento. Quienes piensan que podría comerse todo el espacio de IU deben tener en cuenta lo siguiente:

  • Para ello, IU debiera en primer lugar no presentarse a las elecciones. Y no es seguro que tomase tal decisión porque sería negativo para las intenciones de casi toda su dirección federal y de la del PCE de encontrar un sitio calentito y seguro en la dirección de Podemos dentro de unos meses. Si uno quiere venderse por un buen precio ha de demostrar que lo vale y eso pasa por darse a valer, lo que unas elecciones que volviesen a darles representantes, por pocos que estos fuesen, reforzaría tal intnción.
  • De no presentarse a las elecciones no es seguro, ni mucho menos, que los votantes de IU en las pasadas elecciones dieran su voto a Podemos. Demostraron entonces que no se reconocían en tal formación, ello a pesar de la voluntad de su candidato, de la dirección de la organización y de los organizadores de su campaña de vestirse de podemitas en sus formas y en la elección de un ropaje (Unidad Popular) absolutamente desideologizado. Los raptos de “izquierdismo” de Garzón en la pasada campaña eran sólo modos de buscar el voto entre los sectores que pudieran votarles: los más ideologizados dentro de unas bases sociales muy desideologizadas en general. En una nueva convocatoria electoral gran parte de los votos que tuvo IU podrían irse a la abstención y ella beneficia sobre todo a los partidos más votados. Recordemos que los asaltacielos sólo asaltaron el tercer puesto en la carrera por la Moncloa.

Pero volvamos a la cuestión de si el PSOE y Podemos son, de verdad, dos opciones ideológicas distintas.

En julio de 2014 escribí un artículo titulado "Guárdame los votos, Pablo, que en unos meses pasaré a recogerlos. Pedro Sánchez". En dicho texto venía a sostener la tesis de que Podemos era un granero para guardar los votos del PSOE, no para quitárselos, y que posteriormente dichos votos volverían al PSOE. Lo cierto es que no ha ocurrido de un modo directo, si bien Podemos no supero al PSOE sino que quedó en tercer lugar. Pero lo cierto es que la propuesta de investir Presidente a Pedro Sánchez mediante los votos parlamentarios de Podemos viene a parecerse mucho a esa tesis, aunque para ello hubiese de pactarse algunas condiciones de Podemos y muchos cargos, que de eso se trata antes que de cualquier otra cuestión.

Desde Julio de 2014 a hoy mucho agua ha corrido bajo los puentes de Podemos y del PSOE.

En primer lugar, las veleidades de sorpasso quedaron atrás en el mundo podemita.

En segundo quien compare al Podemos reformista de entonces, y no digamos nada si lo hace con el de las elecciones europeas, con el de ahora y su programa creerá estar ante dos partidos distintos. Pero son el mismo. Las diferencias ideológicas entre un reformismo del sistema vía Podemos y las de un Podemos absolutamente entregado a los mercados, el IBEX35, la OTAN, la UE y la monarquía son las mismas, lo que garantiza sus proximidades al PSOE, que no sé porqué es PPSOE para los podemitas, cuyos votos vienen sobre todo de allí, y no es PSOE2 su partido.

Al fin y al cabo, en el paso de las posiciones contrarias a la OTAN, favorables a la República y al derecho de autodeterminación de Cataluña y de Euskadi, el PSOE hubo de invertir varios años y para cambiar alguna de esas posiciones hubo de llegar al gobierno. Podemos, por su parte, ha renunciado a todas ellas (sí, ya no hay líneas rojas, ni siquiera la del referéndum) en cosa de unos meses (en la cuestión el referéndum en un mes) y por supuesto sin llegar al gobierno, ni siquiera acercarse por méritos propios que no fuesen una coalición postelectoral con el PSOE.

Conviene ver algunas de las personas propuestas por Pablo Iglesias para formar parte del gobierno de coalición PSOE+Podemos+IU, que Garzón ya ha dicho que sí, mediante el procedimiento que toca: twitter. Los órganos de dirección de IU ya tal. Lo importante son los del candidato.


  • Julio Rodríguez; Mr. OTAN, señor JUJEM y bombardero sobre Libia. Fue máximo jefe del ejército español con Chacón, durante el gobierno de Zapatero. Imaginen para qué Ministerio le propondrá Iglesias.
  • Carolina Bescansa: próxima al PSOE en el pasado, a través de su pertenencia al grupo demoscópico dirigido por Julián Santamaría, máximo sociólogo de este partido.
  • Íñigo Errejón: máximo exponente de las tesis partidarias de pacto con el PSOE dentro de Podemos e hijo de José Errejón, hombre que ocupó altos cargos con el PSOE, que también con la UCD.
  • Victoria Rosell: Miembro de Jueces para la Democracia, entidad próxima al PSOE. Pareja del ex jefe de prensa del PSOE en Canarias, Carlos Sosa Báez
  • Pablo Iglesias Turrión: Partidario cuando era asesor, cobrando, de IU de acuerdos postelectorales PSOE+IU. Hijo de un ex reconocido miembro del FRAP, que tras su detención fue defendido por José Bono, alto jerarca del PSOE en los gobiernos González y Zapatero y propiciador de la famosa cena entre Iglesias y Zapatero.

2.-¿Qué significado tiene esta propuesta de acuerdo?
El PP y Mariano Rajoy son dos opciones quemadas para el capital. Su gestión la crisis capitalista ha sido enormemente útil a su opción de clase pero no está acreditado ni legitimado socialmente para continuar con una vuelta de tuerca que hoy piden tanto Bruselas como el FMI.

Su gestión de las tensiones territoriales ha sido nefasta. Su papel de partido nacionalista español y su negativa a actuar en algún sentido, fuere el que fuere, ante el órdago secesionista en Cataluña, es una auténtica fábrica de independentistas en distintos territorios del Estado.

El momento económico español aún mantiene inercias de crecimiento que son antagónicas con la tendencia mundial hacia una gran segunda depresión dentro de la crisis capitalista mundial. La insistencia de los medios de desinformación del capital (todos los medios no alternativos) de culpar a la demora de los políticos en formar gobierno en cualquier posible efecto negativo de la política en la economía tiene un doble objetivo:
  • Negar que las políticas económicas procíclicas tengan algo que ver en el próximo impacto de la crisis capitalista, en un Estado con una deuda cercana al 100%.
  • Favorecer la imagen, más que real, de desgobierno por parte de un PP incapaz de encontrar socios que favorezcan la investidura de Rajoy, que ya ha desistido.

El capital necesita una opción de gobierno que le permita continuar en su intento de recuperar su tasa de beneficio, más que afectada en sentido global, a pesar de los beneficios de ciertas grandes compañías y sectores.

Para ello necesita lograr varios objetivos:
  • Un gobierno estable, capaz de garantizar la paz social, ante la inminencia del recrudecimiento de la crisis. Que ésta es inminente lo podemos ver en 3 ejemplos concretos: el despido de Tragsa (gigante en el mercado medioambiental) de 555 de sus trabajadores mediante ERE, el hundimiento de Abengoa, gigante del sector energético, afectado por la suspensión de proyectos internacionales en un mercado contractivo, la suspensión de actividades por tiempo indefinido de la planta de producción de acero de Arcelor Mittal de ACB (Acería Compacta de Bizkaia) -335 trabajadores- debido a la contracción mundial de la demanda de productos semifacturados, crisis agravada por la fuerte competencia China y la guinda del pastel: próxima reestructuración del sector bancario español que prevé reducir su plantilla en 35.000 empleos.
  • Asegurar la desmovilización social y política, hasta hoy asegurado por el sindicalismo sistémico de CCOO y UGT, y que, la inclusión de Podemos en el gobierno potenciaría en grado extremo, dado el “sentido de Estado” manifestado en varias ocasiones por su líder Pablo Iglesias.
  • La continuidad de la unidad del mercado español, lo que significa dar una solución “relativamente” satisfactoria a los sectores soberanistas, en primer lugar en Cataluña, lo que reconduciría significativamente al situación, especialmente reorientando los restos de Convergencia Democrática de Cataluña hacia soluciones “más realistas”. En esta cuestión lo fundamental es ganar tiempo para la gran burguesía española y catalana (ésta última no secesionista en su gran mayoría). 30 o incluso 20 años más de pax catalana serían una bicoca. Reforma federal como sugería el fallecido Rubio Llorente y que Podemos estaría en condiciones de favorecer, tras su pastoreo de buena parte del independentismo catalán, vasco y gallego.
  • Desprestigiar la idea de izquierda, ya bastante dañada por la practica reformista y prosistema de los partidos mayoritarios que se reclaman tal -objetivo real para el que ha nacido Podemos- y, de cualquier expresión políticamente organizada de la lucha de clases. Si la prensa de la caverna fascista acusa a los podemitas de comunistas -algo tan cercano a la realidad como la condición de socialista del PSOE- a ver quién es el guapo que en el futuro se reinvindica comunista y denuncia la falsedad de aplicar este término a sujetos de la catadura del señor Iglesias y su troupe. Será una tarea de titanes, imprescindible y obligado, pero muy cuesta arriba hacer esto.
Y, más allá de las apariencias y la fanfarria de alarmismos empresariales mediáticamente sobreactuados, a este objetivo de un “gobierno de progreso” se sumará el capitalismo español porque le van muchos beneficios en ello. Quien crea que habrá reversibilidad de leyes laborales, de pensiones, derogación del artículo 135 de la Constitución española y de la LOEPSF que la desarrolla, así como del Tratado de Estabilidad, Coordinación y Gobernanza en la Unión Económica y Monetaria del que ambos emanan, blindaje de derechos sociales, negativa a acatar el TTIP, referéndum catalán, etc., es que pretende justificar su posición pusilánime y claudicante bajo el formato de “ilusión” y confianza en quienes son el referente español de Syriza (Podemos e IU)

Sin la derogación y denuncia de las 3 leyes de austeridad fiscal citadas no hay dinero que valga para blindar derechos social alguno ni para derogar leyes de pensiones y laborales, señores, porque cuesta dinerito y el grifo de él lo tiene el BCE, excepto que se intente vía impuestos a las familias y empresas con mayor capital pero eso no nos vamos a creer que PSOE+Podemos+IU lo hagan ¿o sí y nos creemos que los Reyes/Reinas Magos/Magas existen?

Lo que obtendrá la clase trabajadora española de tal gobierno es unos rejonazos como los que ha obtenido la clase trabajadora griega de parte del gobierno de Syriza. Y no vale la cantinela pablista de decir que España no es Grecia porque la economía también en España se va a poner muy mal y las medidas que tomen PP o un gobierno alternativo al mismo serán las mismas, las que dicte el capital que ya ha votado. ¿O se creen ustedes que si no lo hubiera hecho en un sentido concreto Mariano Rajoy no tendría ya hoy a estas alturas el voto de Ciudadanos? ¿No era Ciudadanos la opción del IBEX35?

Pues bien, visto lo visto y lo que hemos de ver, yo por mi parte afirmo que al igual que hasta ayer se decía “PSOE y PP la misma mierda es” hoy ya es posible, y dentro de unos meses mucho más, decir que “Con Podemos, IU y PSOE la misma mierda tenemos”.