Solidarité internationale. La Haine
En Turquía publican
un impactante informe sobre los crímenes cometidos por los terroristas. Se
acusa a los grupos yihadistas y a la guerra de agresión contra Siria
La "Asociación turca por la paz"
y los "Abogados por la
justicia" preparan desde hace meses un informe preliminar a acciones
en justicia contra los criminales de guerra en Siria y aquellos que ejercen el
mando. Se trata de acciones en los tribunales turcos y sobre todo en los
tribunales internacionales. El informe acaba de ser entregado a la Comisión de investigación
independiente de la ONU
sobre los crímenes cometidos en Siria.
Se intenta poner
en pie el equivalente del comité Russell sobre los crímenes cometidos en la
guerra de Vietnam en los 60, experiencia ésta que se ha repetido para las
guerras de Irak y Palestina, para juzgar los crímenes cometidos por el
imperialismo.
Los abogados y
periodistas turcos conocen bien el terreno, tanto el de las regiones
fronterizas con Turquía como el que han conocido a través de su participación
en equipos de inspectores en visita puntual en Siria o como reporteros de
guerra en este país.
Los abogados
turcos se basan en el Estatuto de Roma, previsto por la Corte Penal Internacional
(CPI) y que clasifica los crímenes cometidos en Siria en tres tipos: crímenes
de agresión, crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.
El primero
fundamenta la persecución judicial, los otros dos están estrechamente ligados a
la acción de bandas criminales en Siria.
Una guerra de
agresión: un crimen contra el pueblo sirio
La parte central
de la acusación reposa sobre el concepto de “guerra
de agresión" reconocido por una enmienda del estatuto de Roma de 2005
que se refiere a un Estado agresor.
Así, “el envío de bandas, grupos armados, grupos
irregulares o mercenarios en nombre de un estado para llevar a cabo una lucha
armada contra un Estado" también está incluido en la definición.
Así que para la Asociación por la paz,
se trata de denunciar a los instigadores, a los llamados «Amigos de Siria», reunidos en Túnez en febrero de 2012, en Soha en
Junio de 2013, y que desde el principio han reconocido al Consejo nacional
sirio, aportando así su apoyo a la rebelión armada.
Cinco nombres se
encuentran en la lista de acusados: Estados Unidos, Arabia Saudí, Catar, Israel
y Turquía.
En cuanto a los
EEUU, no hay nada nuevo, la Asociación recuerda los
planes para eliminar todo obstáculo a su plan del "Gran Oriente Medio",
Irak, luego Siria, finalmente Irán. Dialogan con los grupos armados, los
coordinan, les aportan un constatado aporte financiero y logístico.
Arabia Saudí
busca el aislamiento de Irán y la creación de una Siria suní, comandada por los
saudíes. La potencia saudí invierte miles de millones en armar a los
combatientes, entrenarlos y transmitirles ordenes con la vista puesta en
objetivos de potencia regional.
En cuanto a
Catar, ha apoyado desde el principio la rebelión armada, ha acogido el
encuentro de Doha en junio de 2013, habiendo declarado su primer ministro que
el "apoyo armado era la única forma
de obtener la paz". Más tarde maquilló su posición, buscando una
conciliación por la vía de la autoridad palestina.
Finalmente, la
intervención de Israel no se limita al apoyo a los grupos armados: están
también el envío de vehículos a los rebeldes, el recurso a los ataques con
uranio empobrecido, la acogida de combatientes en hospitales israelíes para
acabar con el proyecto de intervención internacional coordinado por Israel.
Turquía: la base
en la retaguardia de la agresión armada, en la primera fila del banquillo de
los acusados
Es sobre todo a
Turquía a quien se refiere con más fuerza el informe. Su política imperialista
neo-otomana entra cada vez más en conflicto con la llamada política de "ningún conflicto con los vecinos"
que había conducido a relaciones pacíficas con Siria.
Turquía es lugar
que alberga el acta de nacimiento de del consejo nacional sirio en agosto de
2011. En mayo de 2012 las relaciones diplomáticas con Siria son suspendidas y
los diplomáticos sirios son expulsados.
En Septiembre de
2012, Erdogan confía al 'Washington Post'
que Turquía le presta apoyo logístico a los 'rebeldes' antes de añadir,
estableciendo un paralelismo con la intervención de EEUU en Irak: "Tenemos que hacer lo que sea
necesario, y lo vamos a hacer".
Las acciones de
colaboración concreta entre Turquía y los 'rebeldes' se cuentan por cientos,
los 'rebeldes' utilizan Turquía como base en la retaguardia para las retiradas,
como un privilegiado circuito de reavituallamiento.
Baste recordar
que las bases de entrenamiento del llamado ejército libre sirio se encuentran
en la provincia fronteriza turca de Hatay, que los campamentos de
"refugiados" se ven cada vez más claramente como bases para el
repliegue de yihadistas y que Turquía es el país por el que transitan las armas
provenientes del Golfo.
Es cada vez más
probable que sea a través de Turquía que los 'rebeldes' se dotaron de armas
químicas, factor señalado por 12 antiguos miembros de los servicios secretos en
su carta al presidente Obama.
El último
escándalo
El pasado 15 de
diciembre, se supo que desde junio de 2013 no menos de 47 toneladas de
armamento y de munición atravesaron la frontera entre Siria y Turquía según una
investigación realizada por la
ONU.
De forma
intencionada, el estado turco ha hecho de la zona fronteriza entre Siria y
Turquía una zona sin ley donde se encuentra por todas partes tráfico de todo
tipo de mercancías (armas, coches de lujo…). Los controles de frontera se han
convertido en imposibles al pertenecer la zona al dominio de las milicias
islamistas, de bandas de individuos sin escrúpulos y de traficantes de todo
tipo.
Sin embargo es el
gobierno turco quien controla las informaciones vitales. Los abogados ponen el
ejemplo del yihadista turco Burak Yazici, muerto en Siria, y a quien las
autoridades turcas habían detectado y dejado pasar a Siria para combatir al
gobierno de Assad.
Los yihadistas
miembros de Al Qaeda patrullan por las calles de las ciudades del sur de
Turquía. Human Rights Watch se indigna por la hipocresía turca que "concede un refugio seguro a criminales
de guerra, a personas que han violado los derechos humanos".
El pasado 7 de
noviembre se llegó incluso a encontrar un camión lleno de lanza granadas, de
bombas y de armas fabricadas en la fábrica turca de Konya con destino a Siria y
conducido por Heysem Topalca, combatiente en Siria y que campa a sus anchas
gracias a sus contactos con los servicios secretos turcos.
El «ejército criminal»: seis grupos
terroristas, una sola ola de terror bajo el paraguas de la religión
Al-Qaeda,
Ejército libre sirio (ELS), yihadistas y 'opositores' de todo tipo. ¿Quiénes
son los 'rebeldes' sirios? ¿Quiénes son los criminales de guerra que hacen la
guerra contra el pueblo sirio?
La asociación
divide estos grupos en seis: una división compleja y en continuo movimiento.
Subrayan que el ELS y Al Qaeda dirigen a estos grupos, aunque hay que
concebirlos como organizaciones con una estructura muy débil con influencia
sobre débiles grupos de combatientes.
Sólo el envío de
armas saudíes coordinado por la
CIA ha conseguido unir por algún tiempo a estos grupos,
conduciendo a rivalidades regulares por el reparto del botín.
Por otro lado la
distinción entre los grupos próximos al ELS y Al Qaeda es frecuentemente
imposible al actuar siempre juntos. Por ejemplo, Osman Karahan, un turco que
trabaja como abogado de Al Qaeda murió en Alepo en junio de 2012 mientras
combatía con el ELS.
El primer grupo
yihadista en Siria es el Frente Islámico Sirio. Entre 13 000 y 20000 hombres
que se apoyan en la
Brigada Ahrar Al-Sham. Este grupo tiene importantes vínculos
con Turquía e Irak, está ligado con el ELS y tiene como objetivo las regiones
kurdas.
El segundo grupo
es el Frente Islámico de Liberación, con cinco brigadas. La de Tawhid en Alepo
está vinculada con el ELS, la de Farouk en Alepo y Homs es cercana a Turquía.
Las brigadas Islam (de Damasco) y Al Haq (de Homs) están vinculadas con Arabia
Saudita. La quinta, Suquour al-Sham, cercana a Al Qaeda, está financiada por
Qatar. Ésta última cuenta con 3 000 combatientes y la brigada Islam con 10
0000.
El tercer grupo,
Ghuraba al-Sham, está compuesto de un gran número de ciudadanos turcos y se
especializa, claro, en los ataques contra zonas kurdas.
El cuarto grupo, la Brigada de los mártires de
Idlib, cada vez más formada por la organización islámica radical Suquor al-Sham
y financiada por los Qataríes, está ligada con Al Qaeda. La brigada Al-Resul,
otra organización islámica radical, ha sido instaurada por Catar y cuenta con
su apoyo.
Hay que resaltar
que organizaciones con base no en Siria sino en Líbano o en Irak, participan en
los combates en Siria, como la brigada Abdullah Azzam, una organización
salafista con base en Líbano y cercana a Al Qaeda. También Jund al-Sham,
compuesta de yihadistas palestinos.
También se puede
pensar en el ejército libre iraquí, organizado por gentes cercanas al antiguo
presidente iraquí Tarik al-Hashimi. La mayoría de estos grupos funciona
directamente con Al Qaeda.
Quinto grupo y no
el menor: el Frente Al Nosra, organización islamista fundamentalista que jurado
obediencia a Al Qaeda en abril de 2013. Se cree que son 70 los atentados con
bomba cometidos por esta organización terrorista entre hoy y junio de 2013.
Este grupo intenta tomar el mando dela rebelión.
Se podría añadir
el Estado islámico en Irak y Sham (ISIS), fuerte en Homs, Ar-Raqqah y Azez,
donde las tropas llevan a cabo un combate contra los kurdos y van y vienen a
través de la frontera entre Turquía y Siria y también entre la frontera entre
Siria y Jordania.
Crímenes de
guerra, crímenes contra la
Humanidad: una larga lista de mártires del pueblo sirio
Los abogados
turcos subrayan al menos 19 casos de crímenes de guerra contenidos en el
Estatuto de Roma y 10 crímenes contra la Humanidad tal y como se recoge en el artículo 7
del mencionado Estatuto. Ambas definiciones se confunden con frecuencia en el
caso de la llamada guerra civil siria.
Asesinatos y
masacres: La Asociación
ofrece como prueba el caso de 22 ataques mortíferos, esencialmente atentados
con bomba que han sido directamente imputados a grupos rebeldes y reivindicados
por estos grupos.
Entre los más
destacados se puede pensar en los vehículos llenos de explosivos que estallaron
el 28 de noviembre de 2012 en un barrio multiétnico, poblado por cristianos y
drusos, en Jaramana con el resultado de 34 muertos y 83 heridos.
El 29 de enero de
2013, 80 cadáveres, la mayoría de niños, fueron encontrados ejecutados y con
las manos atadas a la espalda a lo largo del río Quiq en Alepo, región
controlada por el ELS.
El 21 de febrero
de 2013 una serie de explosiones reivindicadas por Al Qaeda hizo 161 muertos y
500 heridos en Damasco.
Exterminio de
grupos raciales y religiosos: los ataques que
tienen como objetivo las minorías religiosas (cristianos y chiíes) y étnicas
(kurdos, drusos, alauíes) se multiplican. Podemos pensar en los ataques a los
pueblos alauíes y kurdos en Latakia.
Los militantes de
Al-Nosra atacaron el 4 de agosto 8 pueblos de Latakia. Después de haberlos
bombardeado, los yihadistas cometieron masacres con hachas, cuchillos y
machetes. Varios cientos de muertos: todos los habitantes del pueblo Hrrata
murieron, solo 12 sobrevivieron en Nabata.
En Balluta los
yihadistas se ocuparon de masacrar a los niños reunidos en la plaza del pueblo
y después mataron a los adultos. Según el informe de Human Rights Watch, 190
personas habrían sido asesinadas, 200 habrían sido secuestradas, aunque las
cifras podrían ser mucho más elevadas.
El recurso a
armas químicas: Su uso ha sido
demostrado, al menos en el ataque de la región oriental de Guta, en Damasco, el
21 de agosto. Así, aunque el Gobierno de Assad ha sido rápidamente acusado por
los agresores, los hechos apuntan en otra dirección.
Rusia había
subrayado el hecho de que los misiles habían sido lanzados desde una zona
controlada por Liwa al-Islam, milicia islamista. En mayo de 2013 el Ejército
sirio ya había tomado muestras de gas sarín en soldados de Al-Nosra y otras
armas de destrucción masiva más refinadas.
Más tarde, en
octubre de 2013, una explosión con bomba en la frontera turca sobre un puesto
de control de los Kurdos de Ras al Ayn podría haber estado acompañada de armas
químicas, según se ve en los síntomas de envenenamiento en algunos combatientes
y en el humo amarillo de la explosión.
No olvidemos que
Carla del Ponte, miembro de la comisión de investigación de la ONU confirmó que no había
ningún indicio de que el gobierno sirio hubiera usado estas armas, sino que
podrían haber sido los rebeldes sirios.
Ataques contra
edificios educativos, religiosos y culturales: son frecuentes, más de 200 establecimientos escolares han sido
destruidos por los combates. En enero de 2013 el hospital francés de Alepo fue
víctima de un ataque con coche bomba por parte de Al-Nosra.
El 28 de marzo de
2013 la Universidad
de Damasco fue víctima de un ataque con mortero que hizo 15 muertos y 20
heridos. El 21 de marzo la mezquita de Eman fue víctima de un ataque el
viernes, día del rezo. El imán Sheikh Mohammed Said Ramadan, cercano a Assad, y
otras 42 personas fueron asesinadas.
Los más
importantes monumentos de la rica historia siria, inscritos en la lista de la UNESCO, ya han sido
seriamente dañados y saqueados: el Krak de los caballeros, Palmira, el casco
histórico de Damasco, los edificios medievales de Aleo, el bazar de Al-Madina o
la gran mezquita de Alepo.
Violaciones y
acoso sexual: está demostrado que Al Qaeda y las organizaciones vinculadas con
el ELS han violado a miles de mujeres y niños. Según la ONG "Mujeres en estado de sitio", en 2012 está demostrado que
tuvieron lugar 100 casos de violaciones, el 80% contra mujeres y adolescentes.
Serían cifras muy subestimadas.
Ninguna de las
denuncias presentadas por “Abogados por
la justicia" en Turquía contra los criminales de guerra y sus
cómplices ha sido tomada en consideración por la justicia turca.
Sin embargo, el
atentado islamista de Reyhanli, en la frontera turco-siria, el pasado mayo, que
causó 46 muertos, despertó la conciencia del pueblo turco. Fue el punto de
partida de la "rebelión de junio", que zarandeó el gobierno
autoritario de Erdogán, que hoy en día sigue debilitándose bajo el peso de los
escándalos.
Ahora, los
abogados ávidos de justicia, los periodistas amigos de la paz, los diputados
preocupados por la verdad, se giran hacia la justicia internacional: hace falta
la expresión de un gran movimiento de solidaridad con el pueblo sirio que es
víctima de una guerra de agresión. ¡La verdad debe ser pronunciada y se debe
hacer justicia frente a los crímenes de guerra que sufre Siria!
El informe completo puede ser leído en: Barisdernegi (en inglés)
Solidarité internationale. Traducción: Quique Guerrero para www.michelcollon.info