Por
Marat
1.-"Descastizando
y desmierdizando" al PSOE que es gerundio
No
es que el PSOE haya sido de un plumazo definitivamente “descastizado”
por el acto de autoproponerse Pablo Iglesias como vicepresidente de
un gobierno presidido por Pedro Sánchez; es que en ese mismo acto ha
sido literalmente “desmierdizado”¿Recuerdan aquello de “PSOE y
PP la misma mierda es”? ¡Ah que eso lo gritaba el 15M! Pero ¿no
se reivindicaban tanto Podemos como IU, cuyo candidato Garzón ya ha
respondido positivamente a la propuesta de Iglesias, del 15M? ¿Acaso
los líderes de Podemos y Garzón no estuvieron en el 15M?
Y
lo más divertido de todo es que el señor Pablo Iglesias presentó
esta propuesta a Felipe VI de Borbón antes que al principal
interesado, Pedro Sánchez, lo que debiera despejar toda duda acerca
de que se trate de una “jugada maestra” para que el invitado a
ser Presidente con sus votos se sienta tan presionado que lo rechace
por forma e intenciones. No parece en absoluto que esa sea su
intención ni por la forma (presentar la propuesta al rey y luego, al
salir del encuentro, anunciarlo ante los medios de comunicación ni
por los intereses que se dirimen en tal apuesta.
En
primer lugar, el interpelado Sánchez ha demostrado sobradamente sus
esfuerzos, contra buena parte de sus barones, por encabezar ese
gobierno, arriesgando incluso su propia cabeza (que solo puede salvar
siendo Presidente del Gobierno o ganando una próximas elecciones si
las hubiera y llegase a ser candidato) y la unidad del partido,
bastante quebrada.
En
segundo lugar, si Iglesias tensase demasiado la cuerda del acuerdo,
de modo que lo hiciese imposible, mientras Sánchez ha mostrado desde
el primer día su intención de negociar, y ello provocase unas
nuevas elecciones, puede que los resultados no le fueran tan
favorables y que los beneficiados de ellas fuesen el PP, al demostrar
la oposición su falta de capacidad para entenderse, y el PSOE, al
transmitir la idea, muy bien trabajada por Sánchez, de que no fue
por ellos por lo que fracasó tal intento.
En
tercer lugar, las confluencias con sus socios actuales no han sido
precisamente una balsa de aceite, especialmente en el caso de
Compromís que no se ha integrado en la disciplina del grupo podemita
del Congreso. Posiblemente, unas nuevas elecciones sólo pudieran
acentuar esa tendencia “disidente”, aun cuando se volviesen a
presentar unidos.
En
cuarto lugar, nada asegura que Podemos no haya alcanzado su techo.
Les sugiero que no hagan demasiado caso a las encuestas que puedan
afirmar que sí porque ya quedaron desacreditadas suficientemente en
su momento. Quienes piensan que podría comerse todo el espacio de IU
deben tener en cuenta lo siguiente:
-
Para ello, IU debiera en primer lugar no presentarse a las elecciones. Y no es seguro que tomase tal decisión porque sería negativo para las intenciones de casi toda su dirección federal y de la del PCE de encontrar un sitio calentito y seguro en la dirección de Podemos dentro de unos meses. Si uno quiere venderse por un buen precio ha de demostrar que lo vale y eso pasa por darse a valer, lo que unas elecciones que volviesen a darles representantes, por pocos que estos fuesen, reforzaría tal intnción.
-
De no presentarse a las elecciones no es seguro, ni mucho menos, que los votantes de IU en las pasadas elecciones dieran su voto a Podemos. Demostraron entonces que no se reconocían en tal formación, ello a pesar de la voluntad de su candidato, de la dirección de la organización y de los organizadores de su campaña de vestirse de podemitas en sus formas y en la elección de un ropaje (Unidad Popular) absolutamente desideologizado. Los raptos de “izquierdismo” de Garzón en la pasada campaña eran sólo modos de buscar el voto entre los sectores que pudieran votarles: los más ideologizados dentro de unas bases sociales muy desideologizadas en general. En una nueva convocatoria electoral gran parte de los votos que tuvo IU podrían irse a la abstención y ella beneficia sobre todo a los partidos más votados. Recordemos que los asaltacielos sólo asaltaron el tercer puesto en la carrera por la Moncloa.
Pero
volvamos a la cuestión de si el PSOE y Podemos son, de verdad, dos
opciones ideológicas distintas.
En
julio de 2014 escribí un artículo titulado "Guárdame
los votos, Pablo, que en unos meses pasaré a recogerlos. Pedro
Sánchez". En
dicho texto venía a sostener la tesis de que Podemos era un granero
para guardar los votos del PSOE, no para quitárselos, y que
posteriormente dichos votos volverían al PSOE. Lo cierto es que no
ha ocurrido de un modo directo, si bien Podemos no supero al PSOE
sino que quedó en tercer lugar. Pero lo cierto es que la propuesta
de investir Presidente a Pedro Sánchez mediante los votos
parlamentarios de Podemos viene a parecerse mucho a esa tesis, aunque
para ello hubiese de pactarse algunas condiciones de Podemos y muchos
cargos, que de eso se trata antes que de cualquier otra cuestión.
Desde
Julio de 2014 a hoy mucho agua ha corrido bajo los puentes de Podemos
y del PSOE.
En
primer lugar, las veleidades de sorpasso quedaron atrás en el mundo
podemita.
En
segundo quien compare al Podemos reformista de entonces, y no digamos
nada si lo hace con el de las elecciones europeas, con el de ahora y
su programa creerá estar ante dos partidos distintos. Pero son el
mismo. Las diferencias ideológicas entre un reformismo del sistema
vía Podemos y las de un Podemos absolutamente entregado a los
mercados, el IBEX35, la OTAN, la UE y la monarquía son las mismas,
lo que garantiza sus proximidades al PSOE, que no sé porqué es
PPSOE para los podemitas, cuyos votos vienen sobre todo de allí, y
no es PSOE2 su partido.
Al
fin y al cabo, en el paso de las posiciones contrarias a la OTAN,
favorables a la República y al derecho de autodeterminación de
Cataluña y de Euskadi, el PSOE hubo de invertir varios años y para
cambiar alguna de esas posiciones hubo de llegar al gobierno.
Podemos, por su parte, ha renunciado a todas ellas (sí, ya no hay
líneas rojas, ni siquiera la del referéndum) en cosa de unos meses
(en la cuestión el referéndum en un mes) y por supuesto sin
llegar al gobierno, ni siquiera acercarse por méritos propios que no
fuesen una coalición postelectoral con el PSOE.
Conviene
ver algunas de las personas propuestas por
Pablo Iglesias para formar
parte del gobierno de coalición PSOE+Podemos+IU, que Garzón ya ha
dicho que sí, mediante el procedimiento que toca: twitter. Los
órganos de dirección de IU ya tal. Lo importante son los del
candidato.
-
Julio Rodríguez; Mr. OTAN, señor JUJEM y bombardero sobre Libia. Fue máximo jefe del ejército español con Chacón, durante el gobierno de Zapatero. Imaginen para qué Ministerio le propondrá Iglesias.
-
Carolina Bescansa: próxima al PSOE en el pasado, a través de su pertenencia al grupo demoscópico dirigido por Julián Santamaría, máximo sociólogo de este partido.
-
Íñigo Errejón: máximo exponente de las tesis partidarias de pacto con el PSOE dentro de Podemos e hijo de José Errejón, hombre que ocupó altos cargos con el PSOE, que también con la UCD.
-
Victoria Rosell: Miembro de Jueces para la Democracia, entidad próxima al PSOE. Pareja del ex jefe de prensa del PSOE en Canarias, Carlos Sosa Báez
-
Pablo Iglesias Turrión: Partidario cuando era asesor, cobrando, de IU de acuerdos postelectorales PSOE+IU. Hijo de un ex reconocido miembro del FRAP, que tras su detención fue defendido por José Bono, alto jerarca del PSOE en los gobiernos González y Zapatero y propiciador de la famosa cena entre Iglesias y Zapatero.
2.-¿Qué
significado tiene esta propuesta de acuerdo?
El
PP y Mariano Rajoy son dos opciones quemadas para el capital. Su
gestión la crisis capitalista ha sido enormemente útil a su opción
de clase pero no está acreditado ni
legitimado socialmente para
continuar con una vuelta de tuerca que hoy piden tanto Bruselas como
el FMI.
Su
gestión de las tensiones territoriales ha sido nefasta. Su
papel de partido nacionalista español y su negativa a actuar en
algún sentido, fuere el que fuere, ante el órdago secesionista en
Cataluña, es una auténtica fábrica de independentistas en
distintos territorios del Estado.
El
momento económico español aún mantiene inercias de crecimiento que
son antagónicas con la tendencia mundial hacia una gran segunda
depresión dentro de la crisis capitalista mundial. La insistencia de
los medios de desinformación del capital (todos los medios no
alternativos) de culpar a la demora de los políticos en formar
gobierno en cualquier posible efecto negativo de la política en la
economía tiene un doble objetivo:
-
Negar que las políticas económicas procíclicas tengan algo que ver en el próximo impacto de la crisis capitalista, en un Estado con una deuda cercana al 100%.
-
Favorecer la imagen, más que real, de desgobierno por parte de un PP incapaz de encontrar socios que favorezcan la investidura de Rajoy, que ya ha desistido.
El
capital necesita una opción de gobierno que le permita continuar
en su intento
de
recuperar su tasa de beneficio, más que afectada en sentido global,
a pesar de los beneficios de ciertas grandes compañías y sectores.
Para
ello necesita lograr varios objetivos:
-
Un gobierno estable, capaz de garantizar la paz social, ante la inminencia del recrudecimiento de la crisis. Que ésta es inminente lo podemos ver en 3 ejemplos concretos: el despido de Tragsa (gigante en el mercado medioambiental) de 555 de sus trabajadores mediante ERE, el hundimiento de Abengoa, gigante del sector energético, afectado por la suspensión de proyectos internacionales en un mercado contractivo, la suspensión de actividades por tiempo indefinido de la planta de producción de acero de Arcelor Mittal de ACB (Acería Compacta de Bizkaia) -335 trabajadores- debido a la contracción mundial de la demanda de productos semifacturados, crisis agravada por la fuerte competencia China y la guinda del pastel: próxima reestructuración del sector bancario español que prevé reducir su plantilla en 35.000 empleos.
-
Asegurar la desmovilización social y política, hasta hoy asegurado por el sindicalismo sistémico de CCOO y UGT, y que, la inclusión de Podemos en el gobierno potenciaría en grado extremo, dado el “sentido de Estado” manifestado en varias ocasiones por su líder Pablo Iglesias.
-
La continuidad de la unidad del mercado español, lo que significa dar una solución “relativamente” satisfactoria a los sectores soberanistas, en primer lugar en Cataluña, lo que reconduciría significativamente al situación, especialmente reorientando los restos de Convergencia Democrática de Cataluña hacia soluciones “más realistas”. En esta cuestión lo fundamental es ganar tiempo para la gran burguesía española y catalana (ésta última no secesionista en su gran mayoría). 30 o incluso 20 años más de pax catalana serían una bicoca. Reforma federal como sugería el fallecido Rubio Llorente y que Podemos estaría en condiciones de favorecer, tras su pastoreo de buena parte del independentismo catalán, vasco y gallego.
-
Desprestigiar la idea de izquierda, ya bastante dañada por la practica reformista y prosistema de los partidos mayoritarios que se reclaman tal -objetivo real para el que ha nacido Podemos- y, de cualquier expresión políticamente organizada de la lucha de clases. Si la prensa de la caverna fascista acusa a los podemitas de comunistas -algo tan cercano a la realidad como la condición de socialista del PSOE- a ver quién es el guapo que en el futuro se reinvindica comunista y denuncia la falsedad de aplicar este término a sujetos de la catadura del señor Iglesias y su troupe. Será una tarea de titanes, imprescindible y obligado, pero muy cuesta arriba hacer esto.
Y,
más allá de las apariencias y la fanfarria de alarmismos
empresariales mediáticamente sobreactuados, a este objetivo de un
“gobierno de progreso” se sumará el capitalismo español porque
le van muchos beneficios en ello. Quien crea que habrá
reversibilidad de leyes laborales, de pensiones, derogación del
artículo
135 de la Constitución española y de la LOEPSF
que la desarrolla, así
como del Tratado
de Estabilidad, Coordinación y Gobernanza en la Unión Económica y
Monetaria del
que ambos emanan,
blindaje
de derechos sociales, negativa a acatar el TTIP, referéndum catalán,
etc.,
es que pretende justificar su posición pusilánime y claudicante
bajo el formato de “ilusión” y confianza en quienes son el
referente español de Syriza (Podemos e IU)
Sin
la derogación y denuncia de las 3 leyes de austeridad fiscal citadas
no hay dinero que valga para blindar derechos social alguno ni para
derogar leyes de pensiones y laborales, señores, porque cuesta
dinerito y el grifo de él lo tiene el BCE, excepto que se intente
vía impuestos a las familias y empresas con mayor capital pero eso
no nos vamos a creer que PSOE+Podemos+IU lo hagan ¿o sí y nos
creemos que los Reyes/Reinas Magos/Magas existen?
Lo
que obtendrá la clase trabajadora española de tal gobierno es unos
rejonazos como los que ha obtenido la clase trabajadora griega de
parte del gobierno de Syriza. Y no vale la cantinela pablista de
decir que España no es Grecia porque la economía también en España
se va a poner muy mal y las medidas que tomen PP o un gobierno
alternativo al mismo serán las mismas, las que dicte el capital que
ya ha votado. ¿O se creen ustedes que si no lo hubiera hecho en un
sentido concreto Mariano Rajoy no tendría ya hoy a estas alturas el
voto de Ciudadanos? ¿No era Ciudadanos la opción del IBEX35?
Pues
bien, visto lo visto y lo que hemos de ver, yo por mi parte afirmo
que al igual que hasta ayer se decía “PSOE y PP la misma
mierda es” hoy ya es posible,
y dentro de unos meses mucho más, decir que “Con Podemos, IU y
PSOE la misma mierda tenemos”.
...mucha agua Ha corrido.....
ResponderEliminarMuchas gracias compa. Mi puñetera manía de no releerme el texto al acabarlo. Aún habrá alguna otra errata
EliminarGracias por el artículo. Produce una gran tristeza conocer la situación tan nefasta de la política en España y cuales son los objetivos. Pero es lo que hay.GRACIAS
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