NOTA
DEL EDITOR DE ESTE BLOG:
Recojo en este espacio de reflexión y debate la
llamada de alarma publicada en el periódico de “izquierdas” The Guardian
respecto al proceso de internacionalización del fascismo que encabezan los
neonazis griegos de Amanecer Dorado.
No es algo que deba sorprendernos. Aunque se
escuda en la defensa de los intereses chovinistas de cada país y, desde ese
pretexto, en los de sus capitalistas, a los que aparentemente condena, el
fascismo y el nazismo tienen una ambición internacional. Esto es así no sólo
por los deseos expansivos del país en el que en cada momento se proyecta el
fascismo con mayor fuerza sino fundamentalmente porque el fascismo y el nazismo
son una de las respuestas del capitalismo –la que escoge en sus períodos de
agudas crisis- y este sólo puede desenvolverse, crecer y expandirse con una
clara vocación internacional, aunque se invista de las banderas de los
nacionalismos del momento.
Desde su derrota en la Segunda Guerra Mundial, las
internacionales negra y parda, mucho más discretas en su coordinación que las
distintas internacionales de origen obrero, no han cesado en su empeño de
reconstrucción a escala mundial.
Detrás de las bravatas “anticapitalistas” y
nacionales de nazis y fascistas están los proyectos más criminales, violentos y
expansivos de la mundialización de los “mercados” pero con un ropaje retórico y
propagandístico aparentemente opuesto y antiglobalizador.
De ahí que, por paradoja, Amanecer Dorado busque
asentarse en la diáspora griega y no, aparentemente, en los nacionales de otros
países, cosa que también está haciendo pero de un modo más silencioso.
Echo en falta esta explicación en el análisis de
The Guardian, que se queda en una denuncia (muy necesaria) pero puramente
humanista del citado partido neonazi y no extrae las conclusiones necesarias de
que cuando la izquierda revolucionaria es incapaz de dar una respuesta
revolucionaria que lidere la protesta social contra el capital y que lo haga
desde un movimiento internacional y de clase, otros canalizarán la rabia
social, contra los intereses de las clases trabajadoras y de las libertades
democráticas, esta vez apoyándose en las atemorizadas clases medias, sectores
sociales precarizados y lumpen y, en general, en quienes son susceptibles de
caer del lado de la reacción por la ausencia de un objetivo emancipador
atractivo, radical y claro en la enunciación de un proyecto de sociedad
antagónico al capitalismo.
En tiempos de zozobra y tribulación las gentes
buscan banderas a las que seguir, ideas que les transmitan sensación de cobijo
y protección, un proyecto por el que luchar. Desafortunadamente, en un viejo
mundo capitalista en el que la mayor parte de las izquierdas son sistémicas
(social-liberales), otras carecen de futuro (socialdemócratas auténticos, incluidas
las izquierdas aparentemente radicales, las Syrizas internacionales) porque
nada van a transformar desde el respeto a las reglas del juego de la democracia
burguesa y, por último, otras no están
dando la respuesta necesaria que su condición y el momento histórico les exige
(comunistas), serán los enemigos de la clase trabajadora y de las libertades
democráticas los que levantan esa bandera de la rabia social, precisamente para
conducir a quienes la sigan al lugar opuesto al que tendría que dirigirse la
misma.
Sin más, les dejo con el artículo aludido.
EL
PARTIDO NEONAZI “AMANECER DORADO” DE GRECIA GLOBALIZA SUS AMBICIONES POLÍTICAS
Helena
Smith.
The Guardian
Alentado por su meteórico ascenso en Grecia, el
partido de extrema derecha 'Amanecer
Dorado' está extendiendo sus tentáculos por el mundo, y en un clima de
preocupación creciente actúa conforme a su compromiso de 'crear células en cada rincón del planeta'. El grupo extremista, qué
ya forjó lazos con los neonazis británicos allá por su fundación en los años
80, ha comenzado a abrir sedes en Alemania, Australia, Canadá y Estados Unidos.
Este impulso internacional es previo a una serie de sucesivas encuestas que
reflejan cómo 'Amanecer Dorado' está
afianzando su posición como tercera fuerza política del país además de ser la
que mayor crecimiento ha registrado. Catapultados por primera vez al parlamento
el año pasado consiguiendo 18 escaños, los ultranacionalistas han obtenido el
11,5% de apoyo en una reciente encuesta realizada por la compañía Asunto
Público (Public Issue).
El grupo -
cuyo logo consiste en una esvástica y cuyos miembros son proclives a emplear el
saludo nazi - se ha ido fortaleciendo cada vez más y se promociona como la
única fuerza capaz de enfrentarse a un 'sistema
podrido'. Entre rumores de haber recibido apoyo de navieros adinerados, han
logrado con éxito abrir nuevas sedes a lo largo y ancho de Grecia y en la
actualidad están centrados en extenderse internacionalmente. El pasado mes se
conocía la noticia de la apertura de su nueva sede en Alemania y sus planes de
establecer nuevas filiales en Australia. Su portavoz, Ilias Kasidiaris, afirmó
que la intención del partido es establecer células allá donde haya griegos. 'La gente ha comprendido que Chrysi Avgi
(Amanecer Dorado) dice la verdad' afirmó a un periódico griego en
Melbourne. 'En nuestros planes y
objetivos más inmediatos está la creación de una sede y organización local en
Melbourne. De hecho, varios diputados visitarán Australia en breve'. Pero
la campaña se ha tropezado con la indignación y la burla de muchos de los
miembros prominentes de la diáspora griega que representa a las comunidades de
los hemisferios norte y sur. 'No vemos nada
dorado en Amanecer Dorado' afirma el Padre Alex Karloutsos, miembro de una
de las principales comunidades griegas de los Estados Unidos en Southampton,
Nueva York. 'El nacionalismo, el fascismo
y la xenofobia no son parte de nuestra herencia espiritual y cultural'. A
pesar de todo, Amanecer Dorado espera llegar al fondo de ese pozo de ira y
decepción que sienten los griegos que viven en el extranjero, desde que hace
tres años su país era golpeado por la deuda y se sumergía así en la crisis.
'Amanecer
Dorado no es como los otros partidos griegos. Desde sus comienzos en los años
80 siempre mantuvo un ojo puesto en el extranjero'
dice Dimitris Psarras, cuyo libro La Biblia Negra de Amanecer Dorado, narra las
crónicas de la organización desde su fundación por Nikos Michaloliakos, abierto
defensor de los coroneles que supervisaron siete años de brutal dictadura
anti-izquierdista hasta la caída del régimen militar en 1974.
'Grupos de similar ideología en Europa y Rusia han
dado al partido apoyo ideológico e incluso económico para la publicación de
libros y revistas. 'Después de años
importando nazismo, ahora quieren exportarlo' añade Psarras. Infiltrándose
en las comunidades del extranjero, los ultraderechistas no solo intentan
fortalecer su credibilidad, también quieren conseguir financiación extra y
quizá captar votos potenciales en caso de que los griegos que viven en el
extranjero logren alguna vez el derecho de emitir sus votos en las elecciones. 'Amanecer Dorado no solo aspira a
convertirse en el eje central de una alianza neonazi paneuropea, aunque puedan
llegar a negarlo contundentemente en público' afirma Psarras, que asegura
que miembros del partido mantienen reuniones de forma regular con neonazis de
Alemania, Italia y Rumanía. 'Quieren
extender su influencia a nivel mundial'.
Con una fuerte comunidad de 300.000 miembros,
Melbourne ocupa un lugar de honor en la constelación de metrópolis con
población griega que forma una diáspora cuya estimación oficial ronda los 7
millones de miembros. Como parte de su campaña internacional, Amanecer Dorado
también mira a Estados Unidos, un imán para generaciones de inmigrantes, y a
Canadá, que atrajo a decenas de miles de ciudadanos griegos tras la devastadora
guerra civil de 1946-49.
'Es
una campaña muy bien estudiada' dice Anastasios
Samis, preeminente historiador de la etnia griega en Australia. 'Aquí hay mucha gente de ideología
conservadora - antiguos monárquicos, aquellos que apoyaron a la junta,
gente de ese tipo - muy decepcionados con
lo que ha pasado en Grecia y que intentan encontrar un medio para expresarse.
También hay nacionalistas que se sienten traicionados por Grecia por asuntos
como el de Macedonia, Chipre y (la minoría griega) en Voreio Epirus (sur de
Albania) que no ve el componente fascista del partido. Amanecer Dorado está
intentando aprovecharse de ellos'. 'La
generación más joven - hijos de inmigrantes no cualificados y agricultores - constituye otro de sus objetivos',
afirma. 'Es la generación de aquellos que
nacieron y crecieron aquí y que no saben casi nada acerca de Grecia y su
historia, sus antecedentes sociales y económicos. Son presa fácil y Amanecer
Dorado sacará provecho de su ignorancia'. Tamis confiesa que algunos de sus
estudiantes apoyan a la organización pero no cree que el grupo gane afiliados
incluso en el caso de que la extrema derecha australiana les brinde su apoyo.
Aún así, la expectativa de Amanecer Dorado de volcarse en este país ha
infundido temores en la comunidad griega. 'Esta
es una sociedad multicultural. Aquí no son queridos ni bienvenidos' dice un
importante miembro de esta comunidad, que ha solicitado anonimato en todo lo
referente a sus afirmaciones sobre la organización.
Los izquierdistas greco-australianos han comenzado
a recoger firmas de protesta para presionar al ministro de inmigración de
Australia, Brendan O'Connor, con el objetivo de que prohíba la entrada al país
a los diputados de Amanecer Dorado. En una declaración en la que instan al
gobierno a no concederles visa de diputados, afirman que a los extremistas hay
que pararles los pies para que 'no extiendan su influencia dentro de la
comunidad griega y amenacen la sociedad multicultural que los
greco-australianos y otros inmigrantes defienden'.
Los neonazis han sido recibidos de forma similar
en Canadá, donde el partido comenzó un nuevo capítulo el pasado mes de octubre.
A pesar de contar con el campeón de los velocistas para hacerle frente, Nicolas
Macrozonaris, los greco-canadienses condenaron rápidamente al grupo
considerándolo 'una mancha negra'. La
cultura de la intolerancia que ha permitido florecer una violencia de tipo
racial en Grecia - por la que se ha culpado a los hombres de negro de Amanecer
Dorado, debido al incremento del número de ataques a inmigrantes - está fuera
de lugar en un país que se enorgullece de sus valores liberales. 'Su filosofía
e ideología no atraen a los griegos que viven aquí' insiste el Padre Lambros
Kamperidis, sacerdote ortodoxo griego en Montreal. 'Todos sentimos miedo cuando vimos que iban a dar un conferencia de
prensa. Fue un evento despreciable y tan pronto como escuchamos sus
despreciables puntos de vista, fueron condenados por los líderes comunitarios y
la Iglesia'. 'Todos somos inmigrantes
en Canadá' añade Kamperidis refiriéndose a la táctica utilizada por
Amanecer Dorado de apelar al resentimiento contra la inmigración. 'Las condiciones que se dan en Grecia no son
las mismas que se dan aquí, así que no hay justificación posible para que el
partido prospere. Lo peor de todo es que al venir aquí dan la impresión, a
gente que no conoce la situación, de que un montón de griegos les apoyan y no
es verdad. Han hecho daño a Grecia, a la causa griega y a la reputación de
Grecia'.
A pesar de la resistencia, los ultraderechistas
hacen esfuerzos conjuntos para desplazarse y buscar nuevos lugares; los
defensores de Amanecer Dorado afirman que Toronto es su próximo destino, pero
sin duda, la mayor ofensiva con diferencia hasta la fecha ha tenido lugar en
Estados Unidos. Este país alberga a cerca de 3 millones de ciudadanos de
procedencia griega y constituye la comunidad más numerosa de la diáspora. Al
principio, las filas del partido trabajaban de forma clandestina, organizando
mercados de venta de ropa y otros eventos benéficos sin dar a conocer su
verdadera afiliación. Más adelante empezaron a verse pegatinas y carteles por
el suburbio neoyorkino de Astoria poco antes de que la organización abriera su
primera sede en ese mismo lugar. Pero a pesar de que los greco-americanos son
una de las comunidades más apegadas a su patria, las principales personalidades
de esta comunidad han comenzado a denunciar a la organización no solo por su
incongruencia con respecto a la lucha antifascista llevada a cabo por Grecia
durante una de las más brutales ocupaciones nazis de toda Europa, sino también
por ser completamente ajenos a su propia experiencia como inmigrantes. 'Esta gente y sus ideales nunca serán
aceptados por nuestra comunidad. Sus creencias son ajenas a las nuestras y a nuestra
forma de vida' dice Nikos Mouyiaris, co-fundador del Consejo de Liderazgo
Heleno-Americano de Chicago (Hellenic American Leadership Council-HALC), cuya
misión es promover los derechos humanos y los valores democráticos.
Las víctimas de la violenta persecución perpetrada
por el Ku Kux Klan, así como aquellas que sufrieron una amplia discriminación
(en los años 20 los restaurantes de Florida colgaban carteles del tipo 'no se permite la entrada de perros o
griegos') participaron activamente junto con la comunidad greco-americana,
casi sola entre las minorías étnicas según relatan con orgullo, en el
movimiento por los derechos civiles en el que su líder, el arzobispo Iakovos,
marchó junto a Martin Luther King. 'Nuestra
historia como diáspora en los Estados Unidos ha estado marcada por nuestra
lucha contra el racismo' dice Mouyaris. Muchos miembros de la diáspora,
como Endy Zemenides, director del HALC, creen que Amanecer Dorado se engaña al
creer que puede ser una fuerza permanente debido a su elevada popularidad en el
contexto de la crisis. 'La realidad es
que es una consecuencia fugaz de las fallidas medidas de austeridad y la
conflictividad social que esta austeridad ha provocado', afirma.
En Grecia, donde Amanecer Dorado ha comenzado a
reclutar en las escuelas, hay temores de autocomplacencia. Estableciendo
paralelismos con el período de Weimar de los años 30 y el ascenso del Partido
Nacionalsocialista Alemán de los Trabajadores de Hitler, el historiador Mark
Mazower ha advertido recientemente sobre el peligro de subestimar la amenaza
que supone un partido que hace gala de un alarmante uso de la violencia. 'Desafortunadamente, el Estado griego no
parece percatarse de la urgencia de la situación' afirmó ante el público en
Atenas.
Después de casi 30 años siguiendo la pista a
Amanecer Dorado, Psarras parece estar de acuerdo. Hace tan solo unas semanas
aseguró que Michaloliakos había mantenido conversaciones en el parlamento
griego con dos neonazis alemanes que se hacían pasar por periodistas. Amanecer
Dorado desmintió esta información asegurando que se trataba de otra de las
difamaciones de siempre. 'Es un fenómeno
extremadamente peligroso, y en cuanto a si considero que empeorará, creo que
sí' dice Psarras, que lamenta el hecho de que la organización haya abierto
sedes en barrios tradicionalmente de clase media mientras las condiciones de
vida sufren tan rápido deterioro. Hay un hecho que resulta difícil de ignorar:
en 2009 el partido no era más que un paria dentro del panorama político
obteniendo tan solo el 0,29% del total de votos; hoy tiene ambiciones a nivel
global.
'Si
hace diez años alguien hubiese dicho que Amanecer Dorado se convertiría en la
tercera fuerza política de Grecia, le habrían tomado por loco'
afirma Psarras. 'Mira donde están ahora'.
Traducido del inglés por Rodrigo Benito
García-Retamero
Marat,entonces ¿ninguna fuerza de izquierda revolucionaria o radical está dando la respuesta adecuada a la crisis capitalista? Y claro, eso hace que el fascismo pueda empezar a campar a sus anchas.
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