24 de junio de 2014

AL QAEDA: AL SERVICIO DEL PODER ECONÓMICO OCCIDENTAL

Rutas de llegada de los mercenarios islámicos a Iraq y que luego 
se utilizaron para atacar a Siria (Enlace)

Mikel Itulain. Diario-Octubre

Si vamos a los orígenes de eso que se llama Al Qaeda, veremos unas cuantas cosas que nos enseñarán mucho sobre este tipo de organizaciones, porque eso es lo que son, un conglomerado de organizaciones creadas y mantenidas según los intereses políticos y económicos de cada momento; y sobre cómo funciona el mundo de la política mundial, algo, esto último, que solemos ignorar demasiado.

Ya el 3 de julio de 1979 el presidente Jimmy Carter  firmaba una directiva para que llegase ayuda secreta con el fin de formar una guerrilla de extremistas islámicos en Afganistán. Bastante antes de la entrada del país soviético, que fue el 28 de diciembre.1 El Consejero de seguridad nacional de Carter, Zbigniew Brzezinski, era muy claro con los motivos de la ayuda:

Y ese mismo día escribí una nota al presidente en la cual le explicaba que en mi opinión esa ayuda iba a inducir a la intervención militar soviética…

¿Arrepentido?, ¿de qué? Esa operación secreta fue una excelente idea. Tuvo el efecto de meter a los rusos en la trampa afgana… El día que los soviéticos oficialmente cruzaron la frontera, yo escribí al presidente Carter: Tenemos ahora la oportunidad de darles a los rusos su Guerra del Vietnam. 2 

Las cantidades de dinero y de armamento que se enviaban a estos mujahideen o “guerreros santos”, como eran eufemísticamente apodados, fueron enormes.

Estimaciones  de cuanto dinero canalizó el Gobierno de EE.UU. a los rebeldes afganos en la década siguiente varían, pero la mayoría de las fuentes indican la cifra entre tres y seis mil millones de dólares, o más. Cualquiera que sea la cifra exacta, esta fue “el mayor programa de acción encubierto desde la Segunda Guerra Mundial”. 3 

El objetivo estaba claro, no era un mero ensayo, una intentona, para eso no se destinan tantos  recursos.

Se reclutaron extremistas de más de 40 países, en una cifra que ronda los 35.000. Quienes estuvieron en ello fueron la Central de Inteligencia estadounidense en colaboración con el ISI -el servicio de inteligencia pakistaní- y la dictadura saudí, de ahí vendría Bin Laden. De ahí también surgiría Al Qaeda, la base, la base de datos que tenía la Agencia Central de Inteligencia estadounidense para controlar a todos los yihadistas que se incorporaban a esa guerra “santa”. 4 Los mismos textos islámicos enseñados a los extremistas en las madrassas fueron impresos y publicados en Nebraska -Estados Unidos-. 5 El reconocimiento y halago a estos extremistas fue realizado no solo por los presidentes de EE.UU., como por ejemplo Ronald Reagan, que los califico como: “luchadores por la libertad” o los “equivalentes morales de los Padres Fundadores”, 1 sino que  incluso fue llevado a cabo por parte de Hollywood en el filme La guerra de Charlie Wilson, interpretado por Tom Hanks y Julia Roberts. 5 Hollywood ya tenía una larga experiencia en hacer apología de la violencia y de la guerra, como ya lo hiciese en la Primera Guerra Mundial. 6

Como ven, el terrorismo islámico se utilizó y promocionó para servir a los intereses políticos y económicos del poder económico de los Estados Unidos, y también de sus socios. Es decir, desde la Administración estadounidense, así como desde las corporaciones, los medios de comunicación, las organizaciones “humanitarias” y del mismo Hollywood, se ayudó a construir y propagar el más duro y cruel terrorismo.

Y no sean tan ingenuos y tan desconocedores de los hechos para pensar que tales organizaciones terroristas islámicas se escaparon de las manos de sus promotores, formadores, suministradores y financiadores. No, estas organizaciones desde entonces recibieron financiación, formación y suministro armamentístico por parte del poder económico occidental para que cumpliesen la función por la que fueron creadas. Esta misión se expresa de dos formas:

- una, como fuerza mercenaria de choque, que creará el terror mediante sus matanzas y atrocidades.
- otra, como excusa para decir que existe el terrorismo islámico y que es necesario mantener un estado de guerra, y principalmente para que sirva de pretexto y justificación a un ataque militar externo. Cuando falla la función mercenaria entra en juego esta segunda función, es lo que buscan ahora en Siria e Irak con el fortalecimiento de los terroristas del ISIS (Estado Islámico de Irak y Siria).

Miren lo que hicieron en Yugoslavia:

Al Qaeda después del desastre causado en Afganistán fue utilizada, por ejemplo, en la propia Europa, en la guerra que provocó la Unión Europea, con Alemania a la cabeza, y Estados Unidos contra Yugoslavia. La introdujeron en Bosnia, donde apoyaron al fanático Izetbegovic amparado por Estados Unidos.

 Al Qaeda de los orígenes y su función (artículo base del presente).

Lo que han hecho en Libia:

Con la inestimable ayuda de organizaciones “humanitarias” como Amnistía Internacional:

Lo que han hecho y están haciendo en Siria:

O lo que han hecho y siguen haciendo también en Irak:

La invasión del ejército de Estados Unidos sobre Irak ya en su segunda fase, en 2003, tuvo unos efectos devastadores para que grupos fundamentalistas y la propia Al Qaeda pudiesen aparecer y ganar fuerza en un lugar donde antes no tenían ninguna posibilidad. Pero esta presencia no fue una consecuencia indirecta de la invasión, sino que los propios servicios de inteligencia estadounidenses, con su embajada  a la cabeza, John Negroponte y su segundo Robert S. Ford, promovieron la creación de escuadrones de la muerte en Irak, con el fin de hundir al país en el caos y de eliminar a la verdadera resistencia a la  ocupación. Negroponte tenía ya un siniestro historial creando escuadrones de la muerte en América Central en los años 80 del siglo XX. 7 Robert S. Ford se convertiría en embajador estadounidense en Siria en enero de 2011 y enseguida empezaron a actuar estos escuadrones de la muerte también en Siria.

El mandato de Negroponte como embajador de EE.UU. en Irak (junto con Robert S. Ford) fue coordinar la embajada de Estados Unidos, dar apoyo oculto a los escuadrones de la muerte y a grupos paramilitares en Irak con vista a fomentar la violencia sectaria y debilitar el movimiento de resistencia. Robert S. Ford como número dos (Ministro Consejero para Asuntos Políticos) jugó un papel central en la embajada estadounidense en este menester. 7

Y ahora, después de la derrota de los fundamentalistas financiados en Siria, estos se han dirigido hacia Irak, provocando verdaderas tragedias. Aunque este enlace donde aparentemente se pueden ver las matanzas en masa que están llevando a cabo: Mass executions, puede ser un montaje para avivar los ánimos de modo que se pida una intervención militar, es decir, puede ser una falsa bandera con el objetivo de justificar ese ataque militar.  El Estado Islámico de Irak y Siria ha sido creado y mantenido por las potencias occidentales, aunque ahora sus medios de comunicación vuelvan una vez más a mentir indicando que están consiguiendo armas y poder porque asaltan bancos, cuando lo cierto es que ha recibido financiación, entrenamiento y armamento desde hace años a través de los servicios de inteligencia y de las dictaduras colaboradas de occidente en la zona, como son Jordania, Catar, Kuwait o Arabia Saudí, además de la colaboración con Israel. 8

Lo que se busca ahora es evidente para cualquiera que conozca esta historia, ahora entra en juego la segunda función de las organizaciones terroristas, servir de pretexto para un ataque e intervención militar exterior. Ya que no han podido llevarlo a cabo financiando a estos fanáticos como escuadrones y batallones de la muerte, se les utiliza como excusa para decir que hay que combatir el terrorismo, terrorismo que los mismos que lo han creado ahora dicen querer combatir. En realidad no se quiere combatir el terrorismo, sino utilizar eso para controlar a los países de la zona que no se someten, sería en este caso un ataque contra Siria, también, de nuevo, contra el propio Irak, y también contra Irán. Y esto lo podrían hacer creando una zona “buffer”, una especie de espacio “protegido”, que no tiene otro fin que tomar posiciones y minar la soberanía de los países cercanos, pues desde aquí se seguiría apoyando a esas mismas organizaciones terroristas contra las que teórica, pero no realmente, se combate.

El enredador, el poder económico occidental que no conoce la moral, busca dividir, destruir y arruinar a estos países y no repara en los medios, por atroces que estos sean.

Ellos mismos reconocen a través de sus órganos pensantes, como son los think tanks, la importancia de organizaciones mercenarias como Al Qaeda:

Aquí, por ejemplo, Ed Husain en el Council on Foreign Relations (CFR) en el caso de Siria:

Los rebeldes sirios serían inmensamente más débiles hoy sin Al Qaeda en su filas. En general, los batallones del Ejército Libre Sirio [Free Syrian Army -FSA-] están cansados, divididos, caóticos e inefectivos. Sintiéndose abandonados por occidente, las fuerzas rebeldes se están desmoralizando cada vez más mientras se enfrentan con el ejército profesional y superior armamento del régimen de Assad. Los luchadores de Al Qaeda, sin embargo, pueden ayudar a aumentar la moral. La influencia de los yijadistas trae disciplina, fervor religioso, experiencia en la batalla de Irak, financiación de los simpatizantes suníes en el Golfo, y lo más importante, resultados contundentes. En breve, el FSA necesita a Al Qaeda ahora [en realidad el Ejército Libre Sirio, formado por extremistas islámicos, fue dirigido por jefes de Al Qaeda]. 9, 10

Nuestros dirigentes políticos y económicos son una vergüenza para la humanidad, lo más bajo, sucio y sórdido del mundo. Mucha gente muere y sufre cruelmente por culpa de ellos, el mundo vive en guerra continua por ellos. Es hora de que empiecen ustedes a pensar seriamente en esta actuación intolerable, y que acabemos de una vez con esta lacra que estropea, ensombrece y destruye a la humanidad.

Notas:
1. Mikel Itulain. Estados Unidos y el respeto a otras culturas y países. Afganistán.Libertarias. 2012.
2. Zbigniew Brzezinski, The CIA´s intervention in Afghanistan. Le Nouvel Observateur, Paris, 15-21 January 1998. Posted at Globalresearch.ca, 15 October 2001.
3. Phil Gasper. Afghanistan, the CIA, Bin Laden, and the Taliban. International Socialist Review, November-December 2001.
4. Al Qaeda, el nombre de una  base de datos de la inteligencia estadounidense, The Guardian, 12.8.2005. 
5. Mikel Itulain. Justificando la guerra. 2012.
6. Mikel Itulain. Hollywood ante la Primera Guerra Mundial, 7.1.2013.Enlace
7. Michel Chossudovsky. The Pentagon´s “Salvador Option”. Part II. Global Research.  16.8.2011.
8. Tony Cartalucci. NATO´s terror hordes in Iraq a pretext for Syria invasión. Land Destroyer, 12.06.2014.
9. Ed Husain. Al-Qaeda´s specter in Syria. Council on Foreign Relations, 6.8.2012.

10. Mikel Itulain. Los intereses económicos detrás de la guerra en Siria.28.10.2012. Enlace

23 de junio de 2014

PERO, ¿QUIÉN DIABLOS GANÓ LA II GUERRA MUNDIAL?

Michel Collon. Canarias-Semanal

 «Sí, ¡ pero los estadounidenses nos liberaron en el 45 !» ¡Cuántas veces he tenido que oír decir eso! En la escuela. Pero también en los debates sobre las guerras actuales de Estados Unidos.

La del 39-45, ¿la única "buena" guerra de los EE.UU.? Puede que haya que matizar. Algunos hechos inquietantes han sido documentados en un excelente libro del historiador Jacques Pauwels (1). Sus documentos irrefutables demuestran que gran parte de las empresas de Estados Unidos colaboraron directamente con Hitler, y no sólo al comienzo de la guerra : Du Pont, Union Carbide, Westinghouse, General Electric, Goodrich , Singer, Kodak, ITT, JP Morgan ...

Peor aún. La gran novedad estratégica de Hitler fue la "Blitzkrieg", la guerra relámpago: dirigir muy rápidamente sus tropas hacia el corazón del enemigo. Para ello, dos condiciones esenciales: camiones y gasolina. Como Alemania no tenía ninguno de los dos, fue la compañía  Esso la que aprovisionó la gasolina, mientras que los camiones provenían de las fábricas alemanas de Ford General Motors.

 "¡ Que esta guerra dure el mayor tiempo posible !"
 Pauwels muestra que:
 . Una gran parte de la patronal de Estados Unidos era pro-Hitler en los años 30 y 40.

 . Eso cambió sólo cuando las ventas de las empresas estadounidenses fueron puestas en peligro por la agresividad comercial de Alemania en América Latina y en otros lugares. Y las ocupaciones japonesas confiscaban todo el comercio de Asia.

De hecho, los Estados Unidos jugaron a una doble carta. Deseaban que la guerra durase mucho tiempo. ¿ Por qué ?

Por un lado, las enormes ganancias que sus empresas hacían en Alemania estaban aumentando. Por otro lado, se enriquecían por los préstamos a Gran Bretaña, que soportaba todo el peso financiero de la guerra. Por cierto, Washington también ponía como condición que Londres abandonase sus colonias después de la guerra. Así se hizo. Los Estados Unidos se las arreglaron para aprovecharse de la Segunda Guerra Mundial, debilitando a sus rivales y convertiéndose en la única superpotencia capitalista.

Henry Ford: "Ni los Aliados, ni el Eje deberían ganar la guerra. Los EE.UU. deberían proporcionar a ambas partes los medios para seguir luchando hasta que ambos se desmoronen."

El futuro presidente Harry Truman, 1941 : " Si Alemania gana, debemos ayudar a Rusia y si Rusia gana, debemos ayudar a Alemania, para que muera el máximo de cada lado."

Ese juego cínico sólo terminó cuando la Unión Soviética derrotó a Hitler. Sólo entonces, los Estados Unidos se apresuraron a salvar sus intereses en Europa.

El pasado  6 de junio, se pretendió que la guerra habíaa sido ganada en Normandía y no en Stalingrado. No se dirá que Hitler perdió el 90 % de sus soldados en el Este. Que por un soldado de EE.UU. muerto, hubieron 53 soviéticos. Los libros de texto a veces son raros, ¿no?


Eso es todo. Siento mucho, lectores, haberos arrebatado una de vuestras últimas ilusiones.  Este mes podréis reflexionar  sobre todo ello.  Este Junio se cumplió el X aniversario del desembarco en  Normandía. Allí acudió George Bush, cuyo abuelo financió a Hitler. ¿En qué clase de mundo vivimos, verdad?